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Choi SooBin estaba nervioso, no entendía como estar en ese lugar tan conocido donde antes comía o cenaba de 3 a 5 veces por semana lo ponía así, aunque en realidad no era el lugar sino lo que haría. Finalmente admitiría ante alguien más que estaba enamorado, enamorado de HueningKai.

Llegó 20 minutos antes de lo acordado, eran tantos sus nervios que incluso se preguntaba si era lo correcto, "¿En verdad me gusta tanto como para decir que es amor?". Dudar no servía de nada pero existía la fuerte posibilidad que lo volvía loco. ¿Cómo podía estar seguro de sentir algo que hace años no sentía? Definitivamente podría ser un error. Pero entonces lo veía, con esa hermosa sonrisa, sus labios rosados y delgados que tanto le encantaba besar, las manos delicadas que acariciaban su cabello por las noches hasta quedar dormido. Si eso no era amor, de cualquier forma le gustaba.

-Que relajado te ves - había llegado YeonJun, con la sonrisa de siempre.

Era su mejor amigo y conocía todo de él, incluso las cosas que al contrario le costaba notar SooBin era capaz de ver. Sabía que al decirselo estaría completamente arruinado, su familia sabía lo básico de su vida, aunque su hermana supiera algo más, pero YeonJun tenía conocimiento de lo importante, las cosas a quien nadie más le decía. Su mayor confidente desde hace años.

-Fue un día tranquilo, pocos pacientes - se encogió de hombros intentando sonar lo más natural posible.

-En realidad es que ya nadie te toma en serio, seguro tu secretaría se la paso arrodillada frente a ti por la tarde.

-Eres un asco hyung, ¿cómo se te ocurre que haría algo así con la hija de mi jefe? Realmente repugnante - el mayor soltó una carcajada sujetando su estómago - No veo lo gracioso de esto Jun.

-Siempre eres el primero en reír con esa broma, ¿qué te ocurre Binie?, ¿acaso es por qué llevas tanto tiempo sin acción?

-Claro que no, no ha sido tanto tiempo - "En realidad ayer fue el último momento que no he tenido algo de eso".

-Cielos, SooBin, en verdad que estas muy serio hoy, ¿seguro que no paso nada? - esta vez la pregunta fue hecha con menos burla.

-Si, estoy bien, ya sabes que de repente los problemas de los pacientes pueden afectarnos un poco.

-Lo sé, hace unos días llegó una chica a su primer consulta y me dejó sin palabras, creo que será un caso difícil de tratar - el mayor suspiró - Me recuerda un poco a mi a su edad, creer que puedes hacer todo cuando en realidad ni siquiera puedes cargar con tu propio peso.

-Confió en que podrás ayudarle lo suficiente, no eres lo tan bueno como yo que podría solucionar ese caso en un par de meses pero si eres capaz de hacerlo - el menor recibió un fuerte golpe en la pierna debajo de la mesa.

-Cuida tus palabras, no me haré cargo de algún daño que te haga por esas insinuaciones.

-No es una insinuación, es la verdad y lo sabes.

-Como sea, ¿qué tal vas con Kai? - la mirada de SooBin se desvió de inmediato sintiendo como si su cuerpo estuviera sudando dejando empapada su ropa.

"¿Cómo voy con Kai? Eso quiere decir que se dio cuenta, pero es imposible, nunca le he mencionado nada sobre nosotros al menos que haya sido él quien se lo dijo a BeomGyu y la pequeña ratita se escurriera hasta su hermano para decirle, o tal vez..."

-¿SooBin?

-Bien, creo que llevamos un buen avance aunque a veces es difícil llevar una sesión completa - "Suficiente, no demos más información"

-¿Por qué lo dices?, ¿sigue siendo tímido?

-Si, algo así, de repente se le dificulta el hablar pero podemos pedir la comida, espere hasta este momento para alimentarme bien.

𝐅𝐀𝐋𝐎𝐅𝐎𝐁𝐈𝐀 | 𝐒𝐎𝐎𝐊𝐀𝐈Donde viven las historias. Descúbrelo ahora