𝐅𝐀𝐋𝐎𝐅𝐎𝐁𝐈𝐀 | 𝐒𝐎𝐎𝐊𝐀𝐈

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Al sentirse tan indefenso, HueningKai no pudo evitar el nuevo ataque del licenciado. SooBin se sentó a un lado y lo beso nuevamente mientras tomaba la orilla inferior de la playera de Kai para ir resbalándola poco a poco por su torso, se separaron un instante para quitarla por completo y volver a besarse. Definitivamente el menor no sabía cómo actuar o siquiera que debía hacer, solo se dejaría llevar.

El mayor tomó de las manos al contrario para lograr hacer que quedará sobre de él con las piernas a cada uno de sus costados, una vez logrado esto recorrió con sus manos la piel expuesta.

-No sólo tu rostro es lindo también tu cuerpo, todo tu eres perfecto - ante esas palabras, HueningKai se sintió incómodo, no era la primera vez que alguien se lo decía pero en ese momento estaba expuesto ante la persona que lo dijo, logró hacerle ver que solo servía para eso, su único motivo de vivir era para que otros se aprovecharán de él.

-Lo siento, no-no puedo seguir con esto - lentamente se levantó dejando afligido al mayor, tomó su playera y se la puso - Yo no soy ningún objeto para jugar - dicho eso acomodó su cabello y salió del consultorio.

Al cerrar la puerta se dirigió a su amigo y lo tomó de la mano asustándolo ya que estaba distraído, se acercó a la recepcionista y esta lo saludo con una sonrisa.

-¿Próximo viernes a las 4pm?

-No, esta será la última - la expresión de BeomGyu fue aún de más confusión.

-De acuerdo - la recepcionista cerró su cuaderno de citas y volvió a sonreír - espero que vuelva pronto - el menor asintió y dio media vuelta para salir del establecimiento.

-¿Vas a explicarme que pasó? - soltó el agarre que tenía con el mayor y siguió caminando.

-No quiero saber más, tengo miedo de lo que pueda descubrir después - mintió con éxito y sin sentir remordimiento.

-¿Pero no quieres mejorar? - insistió Beom.

-No quiero saber más, ya no y dejemos de hablar sobre esto por favor - continuó con su camino a la parada del autobús sin hablar al igual que el resto de camino hacía su departamento donde pasaría YeonJun a recoger a su hermano.

-Si necesitas algo no dudes en decirme, vendré a verte si es necesario - el castaño asintió con la cabeza.

Cuando YeonJun finalmente llegó y se llevó a su amigo, HueningKai subió hasta su departamento, abrió la puerta con rapidez y la cerró de un azotón, buscó su toalla y algo de ropa para poder bañarse y quitar la repentina suciedad que sentía en su cuerpo.

Por un instante todo había sido bueno, se sentía bien y dispuesto a todo, aun seguía sin creer como es que el licenciado logró joder todo con solo esas palabras. ¿Por qué todo mundo lo veía solo como un juguete sexual?

Se tallo el cuerpo con tanta fuerza dejando algunas marcas rojizas en esté; una vez retirado el jabón por completo, salió y agarró la toalla para quitar los excesos de agua, tomó la ropa que había seleccionado la cual consistía en uno bóxer y una playera bastante holgada que lograba cubrir parte de sus piernas. Se acercó al espejo para arreglar un poco su cabello, lo peinó y después se observó detenidamente logrando así notar la pequeña marca que Choi había dejado en su clavícula.

-Eres un asco Kamal, por eso tienes una vida tan miserable, por dejarte convencer por cualquiera - se miraba con desprecio - Te mereces ser tratado así, mereces todo lo que te ha pasado hasta ahora - las lágrimas se fueron acumulando en sus ojos - Solo mereces sufrir - dio un fuerte golpe en el espejo y salió del baño dirigiéndose a su habitación.

+ × + × +

-¿Solo te dijo eso? - YeonJun preguntó sin entender bien la situación.

-Si, fue muy extraño - BeomGyu bebió del jugo que recién se había servido - Cuando salió estaba sonrojado y se veía mal, después su silencio total me pareció aún más intrigante pero sus palabras fueron sinceras.

-No debería hacer esto pero hablaré con SooBin para averiguar qué pasó en realidad, también se me hace extraño que actuara de esa forma - el menor asintió y dejó el vaso ahora vacío en la barra, caminó a donde estaba su hermano y se le echó encima.

-Tengo hambre - hizo un puchero.

-¿Qué se te antoja comer?

-Algo 100% hecho por mi hermano - el rubio sonrío y pico la mejilla izquierda de YeonJun - por favor.

-De acuerdo, quítate de encima para que pueda cumplir tu capricho - BeomGyu acató la orden y fue a la barra para tomar asiento mientras esperaba su comida.

El peligris hurgó en el refrigerador para ver de qué materiales disponía y pensar en que haría, al tener todo lo necesario, y sabiendo que era fácil, optó por hacer tteokbokki. Colocó las cosas en la barra donde hará la preparación y se giró para lavar sus manos, en eso un fuerte ruido seguido de un grito lo alertó, volteó y vio como su hermanito estaba tirado en el suelo apretando sus oídos con las manos.

-¡No, déjenme en paz! - el mayor corrió y lo abrazó antes de que pueda lastimarse por los repentinos movimientos bruscos.

-Tranquilo, estoy aquí bebé - pegó la cabeza del menor en su pecho y dio suaves caricias en la espalda de esté - Yo te protegeré siempre, siempre estaré contigo.

Había hecho varias investigaciones sobre el inusual nuevo comportamiento de su hermano, una cosa era cambiar por la edad poco a poco y otra que de la noche a la mañana comenzará a tener cambios tan bruscos eso sin contar aquellos momentos de trance. BeomGyu tenía algo más, algo que alarmaba de sobre manera a YeonJun y a su madre la cual se mantenía al tanto de las investigaciones del mayor, solo faltaba que el menor se diera cuenta y pidiera la ayuda que necesitaba.

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