[Muchos conejitos]

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—Entonces...¿El es YeonJun?—Preguntó SooBin metiendo sus manos a las bolsas de la blanca bata

—Sep,tiene diecisiete y dos años aquí—contestó la psiquiatra Sana,ella y el peliazul observaban por un enorme vidrio a un pelinegro abrazando un peluche de conejo gastado y afelpado de forma recelosa con un brazo y reír sosteniendo un crayón púrpura con el otro

El menor usaba un traje blanco de hospital,sus pelinegros cabellos revueltos y enmarañados acomodados en una forma en la que no le molestará para ver,permanecía descalzo y en la muñeca portaba un brazalete de plástico color azul pastel con unas letras en el

Paciente #319

—Realmente no sabemos que hacer con él,por esa misma razón lo llámanos a usted,Jeon.—Soo asintió aturdido cuando YeonJun se golpeó la cabeza con una mano varías veces y de forma brusca—Siempre hace eso,no se preocupe—

—Yo-—Choi fue interrumpido por el empujón de Sana,ella arrojó un portapapeles con el expediente del paciente

—No diga nada, solo entre ahí,por más que hemos dialogado con él,no podemos encontrar su cuarta personalidad.

—Tal vez no la tiene...

—Claro que la tiene,el mismo nos dijo—Entonces Sana camino hasta una silla jalandola para ponerla frente a la ventana riendo al ver a YeonJun tirar de sus cabellos frustrado

A SooBin no le parecía divertido

—¡Por qué no entiendes que esté conejo se mira mejor con púrpura!— exclamó el pequeño lanzando un manotazo a su cabeza,SooBin se sorprendió por que ninguna persona detenía al pelinegro de lastimarse

—Estúpido loco—murmurró la pelirroja dando un sorbo a su taza de café,SooBin tenso la mandíbula saliendo de la habitación

Suspiró profundamente tomando entre su mano el pomo de la puerta para entrar dentro con YeonJun,la abrió lentamente y en su campo de visión los ojitos curiosos de YeonJun lo observaban atento

—¡Buenos días!—dijo entusiasmado haciendo un reverencia,SooBin le correspondió el resto acercándose después de cerrar la puerta

—Buenos días, paciente 319

El menor dejo de respirar por unos segundos, mantuvo su miraba fija en el señor ese apretando más a su pecho a Tokki

—YeonJun—susurró desviando la mirada a sus manos,por alguna razón los colores frío hacían un bonito contraste con su blanca piel

—¿Disculpa?

—YeonJun,no soy el paciente no se que,me llamo YeonJun—habló con firmeza volviendo a colorear el conejo en el libro para colorear que en algún momento un psiquiatra le regaló

—Ahh...bueno un error mío,lo siento mucho YeonJun—el nombrado asintió conforme con un puchero en la boca por la concentración en no salirse de la línea

Y el mayor por fin pudo apreciar mejor la habitación,era totalmente blanca,en una esquina se encontraba la cama baja con mantas rosas y otro conejo gastado pero este de color rosa pastel,un enorme espejo que SooBin dedujo que por ahí Sana los observaba

YeonJun sentado en medio de la habitación con las piernas cruzadas y el libro recargado en su muslo izquierdo,también pudo notar que los mismos tenían marcas rojas que se asimilan a rasguños,al igual en los brazos y cuello se repetían los patrones de marcas rojas

No los hubiera notado si YeonJun no tuviera arremangado las mangas de la camisa al igual que los del pantalón

Te saliste de la línea

Drabbles 2 | SoojunDonde viven las historias. Descúbrelo ahora