11.

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Harry empezó a bajar nuevamente hacia el ombligo del ojiazul, mientras le desabrochaba el jean.

Con los pantalones del más bajo fuera, Harry se sacó sus prendas y volvió a sentarse ahorcadas de Louis, pero ahora sintiendo más la dura hombría de este. Eso lo hizo calentarse más.

Louis solo gimió cuando sintió el placer de su miembro rozando la entrada de Harry, solo los interponía ese pequeño pedazo de tela. El ojiverde siguió dejando besos por todo el cuerpo de Louis.

-Por favor, saca eso- Harry lo miró e hizo una sonrisa de lado, sabía lo que el ojiazul quería en ese momento. Obedeció, saco los bóxers de Louis dejando expuesta su erección. Bajo hacia el pene del castaño, y lo empezó a meter de a poco en su boca, sin dejar de mirar a Louis, esa acción volvía loco al ojiazul. Cada vez metía muchísimo más rápido el miembro viríl en su boca, le empezaban a salir lagrimas de tan profundo que entraba. Los gemidos de Louis inundaron el auto.

-H-Harry dios si- estaba tan a punto de llegar al orgasmo, se estaba desesperando de no poder tocarlo, lo mínimo que pudo hacer es mover un poco sus caderas. No aguantaba más.

Se vino en la boca del rizado, quien después de limpiarse los restos de semen de su boca se sentó arriba de Louis de nuevo.

-Dios, soltame necesito tocarte- el ojiverde solo se acercó al oído del más bajo.

-Me encanta verte rogando- el susurro hizo que la piel del ojiazul se erice, y que su miembro se endurezca más.

Harry saco sus bóxers y mojo dos de sus dedos para pasarlos sobre su entrada. Agarró el miembro de Louis para colocarlo dentro de él. Gimió cuando entro.

-Ay estas, estas demasiado apretado por dios-  Louis sentía que moriría en ese momento, empezó a empujar con sus caderas.

-Quieto- demandó Harry, para empezar a cabalgar encima de Louis. El auto se llenó de gemidos. El ojiazul estaba tan excitado, mirando cómo Harry estaba montando en él, como rebotaba y entraba todo su pene en él. El rizado gemía el nombre de Louis, gritaba de placer mientras subía y bajaba por todo el miembro del castaño.

-Mm me vengo, ya no puedo mas- anunció Harry.

-Soltame por favor- el rizado detuvo su trabajo para desatar a Louis, quien busco desesperadamente su boca. Sus lenguas chocaban, el ojiazul paso sus manos por toda la espalda desnuda de Harry. Lo agarró fuerte del pelo, haciendo que el rizado le muerda el labio fuertemente logrando que Louis largue un gemido.

-Seguí- ordenó el más bajo.

Mientras el ojiverde empezó a rebotar de nuevo encima del más bajo, este le dejaba chupones por todo su cuerpo, mordía y besaba cada una de las partes del cuerpo de Harry. Cada vez estaban más extasiados del otro.

El ojiazul colocó su mano al rededor del pene erecto de Harry, comenzando a subir y bajar rápidamente. El presemen comenzaba a fluir del miembro del rizado, no aguantaba más. Se vino en la mano del castaño, mientras este largaba un gemido viniéndose dentro de Harry.

Louis se quedo sentado apoyado en el pecho del ojiverde.

Sentían sus respiraciones agitadas, estaban sudados y con adrenalina en todo su cuerpo.

-Te amo- de atrevió a decir Louis.

Inmediatamente Harry se separo un poco de él mirándolo a los ojos, sentían los dos lo mismo, pero el rizado se negaba a lastimar al ojiazul.

-Creo que deberíamos volver- dijo comenzando a vestirse. Louis se quedo mirando las acciones del ojiverde, con ese silencio entendió que quizás no sentían lo mismo, y que para su mala suerte le acaban de romper el corazón.

Harry estaciono en frente de la casa del ojiazul, el viaje había sido silencioso y casi incómodo. Justo cuando el rizado iba a decirle que el también lo amaba, pero que no podía ser por el bien de los dos, Louis hablo.

-Esta bien Harry, no tenés que decir nada, cuando algo no es mutuo hay que aceptarlo- se miraron, Louis tenía una expresión tranquila, como si enserio no le importara, pero por dentro estaba muriéndose. -Hasta mañana- deposito un pequeño beso en la comisura de Harry, y se fue a su casa, dejando al ojiverde muy confundido dentro de su auto.

Louis pensó que quizás no sería tan malo alejarse un poco de Harry.

Bet on you (Larry stylinson)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora