Capítulo 23

26 9 0
                                        

Salgo del restaurante luego de terminar mi jornada laboral que por cierto fue muy ajetreada.

Eva me ha comentado que últimamente vienen más clientes de lo que estábamos acostumbrados, esto se debe a que las personas ya están de vacaciones, no tuve ni un momento de descanso ya que tenía que preparar los diferentes tipos de menús mucho más de lo que solía hacerlo, además los meseros entraban y salían todo el tiempo con los pedidos de los clientes y el poner los platos de comida sobre la mesa para que se lo llevaran y añadiéndole que soy la que debe cocinar, terminé mi horario agotada.

Camino de regreso a la casa, decidí no usar la bicicleta por hoy, me he convencido a mi misma de salir sola a la calle. De repente una niña se acerca a mi corriendo y me abraza por las piernas, me tenso al instante.

-Mami, tenia miedo cuando tú no estabas cerca mío - solloza la niña-

Me arrodillo para quedar a su altura y le limpio las lágrimas.

-¿Dónde está tu mamá pequeña?

La niña se aleja un poco para verme y parece darse cuenta de que se había confundido.

-Nose - susurra y sigue sollozando-

-¡Hija! - exclama una señora acercándose de prisa hasta nosotras -

-¡Mami! - grita la niña, cuando la madre llega hasta ella la sostiene enseguida en brazos -

-Muchas gracias - me sonríe la señora - Solo me distraje un momento y ya no la encontré

-No hay nada que agradecer - le respondo, en cambio yo agradezco infinitas veces que ambas no hubieran huido de mí al verme -

-Adiós - me dicen ambas sonriendo-

Les hago una seña de adiós con la mano, observo el camino por donde se habían ido y me doy cuenta de que aquel hombre de nuevo esta caminando en mi dirección, sigo mi camino con pasos apresurados, volteo de vez en cuando detrás mio y él solo desvíaba la mirada cuando se daba cuenta de que lo estaba viendo.

Cruzo frente a la misma heladería y de ella sale Bruce acercándose directo al hombre, volteo a verlo y este comienza a guiar al desconocido a otra parte.

Ayer cuando le había contado todo a Bruce, él decidió que lo esperaría en esa heladería y que cuando lo viera hablaría muy seriamente con él.

Observo como se lo lleva tratando de no levantar sospechas y sin más comienzo a seguirlos a pesar de que Bruce me había repetido varias veces que no lo hiciera. Llegamos hasta un callejón y Bruce lanza al desconocido al suelo.

-¿Quién eres? - pregunta y suena muy tranquilo -

Observo a Bruce entre asustada y confundida, no tengo idea de qué es lo que planea hacer.

-¡¿Por qué me trajeron aquí?! - grita en su dirección el desconocido -

Bruce se arrodilla frente a él y susurra- Yo no repito la misma pregunta dos veces

Él hombre lo mira con miedo, intenta ponerse de pie pero Bruce lo evita.

-Te escucho - habla de nuevo Bruce -

-Yo....yo... - de su boca solo sale balbuceos y eso hace que comience a perder la paciencia-

-¡Habla de una vez! - grito en su dirección -

Bruce sonríe observando a ese hombre que parece apunto de tener un colapso nervioso.

-Soy...soy....soy tu primo - responde finalmente -

-Estás mintiendo - respondo de inmediato -

Observo como suspira varias veces y luego niega con la cabeza.

LeylaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora