Leyla

Capítulo 35

Luego de haber leído esa nota comienzo a llorar, ¿por qué me pasa esto a mí?, ¿qué he hecho para merecer esto?

No sé cuanto tiempo había pasado pero escucho que alguien toca el timbre, con el dorso de la mano intento limpiar mis lágrimas y me pongo de pie, suspiro varias veces y con el temor latente de que vuelva a ser dejada otra nota abro la puerta.

Eva se encontraba del otro lado con una sonrisa y un pastel en las manos, al ver mi rostro se da cuenta enseguida de que había estado llorando, su expresión cambia al instante a una de preocupación.

-¿Mi niña que ocurre?

Nuevas lágrimas se acumulan en mis ojos y el labio inferior me tiembla, sin decir nada la abrazo, ella me lo devuelve con su brazo libre.

-Mi niña me estas asustando, entremos y cuéntamelo todo

Me separo de ella y me hago aun lado para dejarla pasar, tomamos asiento en el sofá, ella deja el pastel encima de la mesita del centro y voltea a verme.

-Te escucho mi niña

-Me volvió a llegar otra nota - susurro y tomo la nota para dárselo-

Ella comienza a leerlo y cierro los ojos para pedirme mentalmente calmarme.

-No sé que decirte cariño - me observa y veo lo preocupada que se encuentra-

-Creo que ya es hora de contárselo a John o a Bruce

-No - me interrumpe rápidamente y frunzo el ceño -Es decir...mira volverán a enfadarse contigo por no habérselos dicho desde el principio

En eso tenía razón.

-Pero ya no sé que hacer, esto ya se está saliendo de las manos, no tengo ni la menor idea de quien puede estar haciendo esto...tengo miedo - murmuro-

-Mi niña - me envuelve en sus brazos - Intentaré buscar algo de información o una pista o algo, pero te ayudaré a resolver esto

-¿De verdad? - pregunto esperanzada separandome un poco de ella-

-Te lo prometo, pero lo mejor será que solo nosotras sepamos de esta última nota, así no involucramos a terceros

-Está bien, gracias - sonrío-

-De nada mi niña, te ayudaré en todo lo que pueda

La vuelvo a abrazar.

-Ahora ve a lavar tu rostro, mientras partiré este pastel para que lo comamos

-Vuelvo enseguida - respondo poniéndome de pie y me dirijo al cuarto de baño-

Al entrar me pongo frente al espejo y el reflejo de mi misma hace que quiera llorar de nuevo, cierro los ojos y el recuerdo de lo que había ocurrido con John hace que una sonrisa tire de la comisura de mis labios.

-Te amo bonita

Esa simple palabra hace que mi corazón comience a latir a ritmos antinaturales, él me ama a pesar de lo que me pasó, a pesar de mi aspecto, él me había dicho que me amaba.

Enjuago mi rostro y luego lo seco con una toalla, cuando me siento un poco más segura abro la puerta y salgo del baño.

-Aquí tienes mi niña -me sonríe Eva extendiendome un plato con una rebanada de pastel-

-Gracias - sonrío y comienzo a comerlo-

Nos quedamos hablando de otras cosas que no fueran esas notas, tenía que despejar mi mente o sino me volvería loca.

Eva me había estado contando que hoy se cumplian 3 años de la muerte de su esposo y que como cada año lo visitaba al cementerio y se encargaba de repartir alimento a personas necesitadas.