Leyla

Capítulo 38

Abro los ojos poco a poco hasta acostumbrarme a la luz del día la cual se filtra por las ventanas, volteo la cabeza a un lado y sonrío al encontrar a John profundamente dormido.

Me incorporo un poco para verlo mejor, su perfil es perfecto, sus pestañas son largas que hasta dan envidia, sus labios no son tan gruesos pero tienen el tamaño ideal, acaricio su barbilla sintiendo un pequeño rastro de barba en ella, me inclino un poco hasta dejar un beso en su mejilla, en eso se remueve un poco hasta que abre los ojos.

-Buenos días - susurro-

Él comienza a desperesarse y gira su rostro para verme.

-¿Estoy muerto?

No puedo evitar reír y negar con la cabeza.

-Claro que no

-¿Y este ángel? - sonríe y enseguida me sonrojo-

-No digas esas cosas - golpeo su hombro de forma juguetona -

Ambos comenzamos a reír, luego John me atrae hasta él haciendo que mi cabeza quede recostada sobre su pecho, mientras él comienza a acariciarme el cabello.

-Gracias - susurro, luego de varios instantes en silencio -

-¿Gracias por qué?

-Por ayudarme a vencer mi miedo

Él deja de acariciarme y me incorporo un poco para verlo.

-Te amo Leyla, por ti estoy dispuesto a todo, jamás te obligaría a nada...y dejame decirte que me encantó estar contigo, sentirte por completo, ver tu cuerpo desnudo - comienza a acariciar mi rostro - Y estoy deseando hacerlo otra vez - justo antes de unir nuestros labios su teléfono comienza a sonar, de acuerdo comienzo a odiar ese teléfono-

John suelta un suspiro y nos separamos, toma su móvil, luego de ver la pantalla voltea a verme.

-Tengo que ir a trabajar

Frunzo mis labios y él sonríe dándome un beso.

-Yo también debo ir - hago un mohín -

John comienza a levantarse y se me atasca la respiración al ver su cuerpo completamente desnudo, ni siquiera se molesta en taparse.

-¿Nos bañamos juntos? - voltea a verme -

En eso recuerdo que yo también me encontraba desnuda entonces levanto más la sábana para taparme, John se da cuenta de ese acto y comienza a reír.

-¿Es en serio Leyla?

-No te rías - respondo completamente ruborizada - Vete a bañar tú primero

John no para de reír hasta que tomo una almohada y se lo lanzo pero lo atrapa en el aire

-Está bien, está bien - responde calmandose, toma su bóxer y se lo pone, luego comienza a recoger su ropa y camina hasta la puerta-

-Por cierto - dice deteniéndose en el umbral de la puerta - Yo te llevaré hoy al trabajo - me guiña un ojo, me lanza un beso y luego sale de la habitación -

Suelto un suspiro y me acurruco más en la cama.

Deseo que todo esto nunca termine.

°°

John estaciona el coche frente al restaurante y voltea a verme.

-¿Está tarde será tu última cita con la psicóloga verdad?

Asiento con la cabeza - Así es

-Te irá bien bonita ya veo mucha mejora en ti

Sonrío y abro la puerta - Gracias por traerme