CAPÍTULO 4

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---- UN BEBÉ ----

Claudia Weber

—Te ves hermosa con este vestido blanco-dice Clarence.

—Me siento gorda-toco mi vientre.

Desde mi secuestro todo ha cambiado y en parte me dejo muy marcada hasta el punto de crearme traumas; que gracias a la psicóloga atiendo, pero hasta cierto punto, la falta de autoestima es algo en lo que ella no logra ayudarme. 

—No estas gorda, eres perfecta-acomoda el vestido en el rack de ropa. 

<<Se va a arrugar el maldito vestido>> 

Y mi mal humor que siempre esta presente. 

Estamos en una tienda de vestidos de novia, dentro de unos meses me caso y Clarence está muy feliz de estar conmigo pero el vacío sigue en mí al enterrarme de la muerte de Aitana. Fueron días que soñamos con llegar a este día para que ella escogiera el vestido conmigo pero término muerta y sin la oportunidad de verme de blanco, extraño que ella me grite que me lo dijo, que yo me enamoraría y me casaría. Sus risas aún se escuchan en mi cabeza cada que la recuerdo.

—Clarence puedes pasarme las pastillas Q-23 que están en mi bolso-me bajo de la plataforma donde me toman medidas.

—¿De nuevo? -Pregunta angustiada.

—Si, están aquí de nuevo-me trago la pastilla.

—Señoritas el Jefe dice que ya es hora de marcharse-un escolta del mafioso habla.

—Necesitaremos más tiempo-agarro a Clarence del brazo con dirección a otra tienda a ver más vestidos.

Si me voy a casar mínimo tengo que estar cómoda.

—¿Estas segura?-me habla.

Estos meses junto a Clarence me han enseñado pero al mismo tiempo le di tiempo a Clarence de poder conocerme y al igual que yo, ella sabe que no estoy completamente segura  de querer casarme.

—Claro que estoy segura de esto.

Mi boda es en unos meses y he decidido casarme con el hijo de la mafia.  Luke se sintió  tan devastado que decidió irse de mi lado pero esa ya es otra historia que prefiero guardar muy en el fondo de mi bello corazón donde una vez me vi casada con él. 

<<Aquel día mi mundo entero se fue a la mierda>>

En pocas palabras ahora estoy a punto de ser la novia de la mafia ya que Eduardo se escapó y yo lo ayude sin querer a recuperarse, él se enamoró de mí y yo fingí enamorarme de el cuándo me entere que era el hijo de Aran lo que me deja en una buena posición para que no me maten como a Aitana. 

Mis pesadillas desde ese día que me secuestraron no paran y varias veces sigo viendo a Aitana dentro de mis sueño lo que provoca que entre en un estado de crisis y ansiedad al no tenerla, afortunadamente Aran encontró una fórmula para evitar dichas pesadillas que solo me afectaban, ahora estoy fuera de peligro y puedo seguir con mi vida. 

Venditas drogas que sirven para cada cosa. Soy afortunada por el simple hecho de ser aceptaba por la mafia e igual por haber entrado al laboratorio de pruebas pues gracias a los especialistas en drogas, médicos y la gran mente de Aran logré combatir pesadillas, enfermedades y otras cosas que me detectaron. 

—Tengo hambre-susurro. 

Mi futuro y mi vida depende de que yo me case con el mafioso y guapo hijo de Aran, que digamos que no esta  tan mal físicamente. 

Durante unas semanas se armó un conflicto que dejo a la ex novia y casi esposa de Eduardo fuera del clan mafioso así como también cerraron el trato con su familia llegando a un acuerdo y fue que al parir el hijo de Eduardo, Lucia tenía que desaparecer completamente de la vida de la familia Basset.  

GÉMINIS II (EN EDICIÓN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora