Capítulo 23

667 63 56
                                    

El resto de la semana pasó cómo cualquier otra...

¿A quién engaño? La semana no tuvo nada de normal.

Antes de llegar a mi habitación junto a d'Eon le propuse la idea de la pijamads, o fiesta con ropa para dormir como le dije. Al principio pareció sorprenderse, supongo que para Francia de este siglo no debe ser algo usual y me dio tiempo para explicarle en qué consistía.

(—El término "pijama" todavía no existe en esta época pero es sólo entre nosotros así que debería estar bien.)

—Realmente eres fuera de esta época pajarita— d'Eon me responde ante la loca petición, lo dice en broma pero no puedo evitar sonreír sinceramente después de todo mi mundo y el de María en definitiva son diferentes.

—¿Y entonces qué dice? ¿acepta mi propuesta?

—¿Cómo podría negarme a una petición de esa clase con la pajarita de Versalles?

~ ~ ~ ♠ ~ ~ ~

Las pijamadas de mi época no suelen ser mixtas, generalmente es mujeres por un lado y hombres en su rollo pero otro cambio no le hará daño a nadie.

(—Por una sociedad menos aburrida.)

Me la pasé demasiado bien esa noche, d'Eon dijo que tenía que hacer algo antes y me dejó sola un rato, suficiente tiempo para ir a la cocina por comida que serviría como botana y para ponerme la pijama o ropa para dormir sabiendo que falta un siglo para que el término se use

d'Eon apareció minutos después tocando a mi puerta y llegó con una bolsa, dentro había una pijama de color azul cielo y un gorrito del conjunto de color rosa pastel, eso y tres botellas de alcohol muy caras.

De las mejores noches de mi vida hasta ahora...

~ ~ ~   ~ ~ ~

—¡Todos los hombres son iguales! Nunca lo olvides pajarita—  exclamó mientras se servía otro vaso de la bebida y yo estaba muriendo de la risa.

—¿Quién dice? Todavía hay caballeros en la época— refuté sumamente segura bajo la consciencia de cuatro de mis cinco sentidos.

—Te lo dice la voz de la experiencia querida.

Llevo una hora aquí con d'Eon tomando de esta cosa de la que ya no recuerdo el nombre pero todavía estoy consciente. O al menos eso creo. La primera botella está por debajo de la mitad, d'Eon es quien lleva la mayoría y con mi dosis actual de alcohol mis emociones son muy eufóricas y no entiendo si es divertido o no pero todo me da risa y d'Eon no me ayuda con todo lo que dice.

—¿Voz de la experiencia?— pregunté con curiosidad y le di otro trago al vaso terminando lo que quedaba en él.

—Así es,— me respondió con suma confianza y con la seguridad de su hablar juro que de no conocer a ese hombre que se plasma en mi mente con sus bonitos y grandes ojos azules le creería cada palabra acerca de su mención anterior —te encuentras con cada patán por ahí que uff, te repites a ti mismo que si no estuviera tan bueno no pasas ni una noche— nuevamente me empiezo a reír y con el movimiento de mi cabeza mi cabello pasa hasta mi rostro y no dejo mi felicidad, cuando finalmente quitó el cabello de mi cara veo que el semblante de d'Eon ha cambiado considerablemente, su seguridad de antes parece haberse transformado por completo en algo más triste.

—¿Realmente crees que los caballeros ya no hay en este mundo?— le pregunto con seriedad mientras bajo de la cama para sentarme con las piernas cruzadas en el suelo junto a d'Eon. —Yo creo que todavía existen— con mi comentario una sólida imagen llega a mi mente.

Reescribiré Nuestra Historia [Lafayette X Ti] Dress Up! Time PrincessDonde viven las historias. Descúbrelo ahora