▓ CAPÍTULO 31 ▓

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LA "ÉLITE" DE FRANCIA

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Narrador

—Majestad, los duques han llegado —le informó un guardia en el Gran Salón de Versalles ante el rey.

Acompañado por el Ministro, Luis recibió a las dos figuras de trajes elegantes, confeccionados por modistas ingleses de gran renombre bajo las telas más finas conocidas por el mundo europeo.

Una decena de grandes amistades de la corona se habían reunido para el banquete organizado por el rey, una manera bastante atractiva de desviar la atención de los nobles en Versalles y el resto de Francia de los asuntos de la corona que había cambiado casi por completo su patrón de comportamiento en los últimos años.

—Antonio y Marsella, qué gusto recibirlos —saludó el rey cordial, tratando de recordar la última vez que organizó un evento así.

—Para nosotros su invitación es el honor —agradeció con una reverencia la duquesa con una voz dulce y apacible.

—Comenzaba a preocuparme querido amigo, pensé que ya no volverías a juntarte con la élite de la élite, con eso de que Francia ahora es el paraíso de los pobres —siguió el hombre al lado de ella con confianza y carisma.

Luis los invitó a pasar para reunirse con el resto de personas que habían llegado, intentando calmar los nervios que había presentado desde su juventud ante las grandes expectativas de los nobles.

—Majestad, ¿se encuentra bien? —preguntó el Ministro a un instante de tomar su hombro cuando en la escalera en la entrada  del salón más grande que conectaba con el palacio apareció la reina de Francia.

Vestida con un telar aún más hermoso y cautivante que el que portaba cualquiera de las nobles en el lugar, y bajo un cabello natural que resaltaba aún más la belleza del rostro hermoso con el que había nacido. La mujer sonrió al unir su mirada con la del rey que se acercó caminando, mostrando una expresión tierna y cautivada.

—Mi reina —realizó una reverencia con su mano en el pecho ante la mujer.

—Majestad —correspondió a su gesto con la acción de una dama y pudieron mirarse de frente con grandes sonrisas.

—¿Me permite? —tendió su brazo esperando llevarla durante el resto de la noche, olvidando por completo los nervios con lo que cargaba antes.

—Será un honor.

María fue recibida por los halagos de los nobles y no hace falta mencionar que por las miradas de envidia de algunas personas presentes. Todos se habían reunido para gozar del banquete que había prometido el rey, aún con ello la atención de los nobles se dirigía en disfrutar de la estancia en una fiesta de "tal clase," orgullosos de ser los pocos presentes esa noche.

—Muchos nobles han salido de Francia o han quedado en bancarrota, qué escándalo —comentó con desdén y burla uno de los hombres más ricos presentes en el círculo formado por los asistentes.

—Negados a pagar un simple impuesto como el pópulo, pensé que sería mucho peor —siguió otro de los condes a su lado.

—Deja que se vayan, gracias a esto descubrimos o nos deshicimos de quiénes pretendían ser como nosotros.

—Además de que entre más grande el impuesto refleja lo que en realidad valen tus bienes.

—Aun así, hacen quedar mal a la nobleza francesa —intervino una de las mujeres con una copa de vino.

Reescribiré Nuestra Historia [Lafayette X Ti] Dress Up! Time PrincessDonde viven las historias. Descúbrelo ahora