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El camino a casa era realmente tenso, se podía oír la molesta respiración más los leves suspiros de frustración del pelinegro.

Si analizamos los puntos a detalle no tenía Por qué enojarse pensó jeonghan. Eran solo amigos y los amigos no se enojan por qué el contrario salga a divertirse... ¿O si? ¡CLARO QUE SI! por qué no lo pensó antes... SeungCheol estaba enojado por qué no lo invito.

Bien no es como si cheolie lo invitará cada vez que sale con sus amigos o con ella... Aún que una salida los tres con la última mencionada sería muy incómodo.

~Cheol, ¿Por qué estás enojado?- no sé atrevía a voltear a mirarlo.

~Ya te dije. - apretaba fuertemente el volante hasta que sus nudillos se tornaran blancos.

~aah, bueno, pues igual ya te dije lo que yo pienso, así que si tanto te molesta cuidarme, bájame aquí-señalo la próxima parada- esta línea pasa justo en donde está mi departamento.

~Deja tus jueguitos- detuvo el coche y se acerco molesto, abrochó de manera estratégica el cinturon de seguridad del contrarió-escuchame con atención, pequeño.-lo miro desafiante- ahorita te llevare a tu casa y espero a que te prepares para que después te vayas directo a la cama ¿Okey?. - sus rostros estaban a escasos centímetros de distancia, sus respiraciones chocaban mescladose entre si, sus narices chocando y de una u otra forma los dos sentían un gran impulso por probarse,por sentirse.

~E-esta bien- susurro casi juntando sus labios con los contrarios.

~ahora- tomo su barbilla con su pulgar e índice y miro directamente a los ojos del Rubio- toma esto- le extendió una botella de agua - te ayudará para que mañana no estés destruído- puso la botella en sus manos y se acomodo para seguir adelante.

Aquel precioso rubio solo pudo respirar con dificultades y sentir como su corazón revoloteaba fuerte y rápidamente.

Con torpeza tomo el agua embotellada y casi ahogándose con sus propios tragos, dios, aquel pelinegro si que sabía cómo ponerlo nervioso.

De un momento a otro sintió como la botella era retirada de sus labios y sintiendo otra cosa que le era indescifrable saber que era y de repente todo se volvió obscuridad y silencio.

꒷꒦••꒷꒷••꒦꒦••꒷꒷••꒦꒷••꒷꒦••꒦꒷••꒷꒦••꒷꒦••

Bueno, todo puede ser mejor que despertar con una horrible resaca y con un horrible golpe que hizo vibrar todo el departamento, apurado se levanto de golpe sintiendo el repentino mareo y aun estaba sin saber que demonios paso el día anterior. Definitivamente había tenido mañanas muchísimo mejores que esta.

Al levantarse pudo divisar una nota en su mesita de noche, era del pelinegro, podría reconocer su letra fácilmente, decía que tenía que tomar electrolitos y unas pastillas para evitar el punzante dolor de cabeza.

Bueno en realidad ahora no solo dolía su cabeza. Dolía todo su cuerpo como si un maldito tren hubiese pasado por toda su anatomía y entre más luz entraba por la ventana, más nublada se volvía la vista y ahí estaban por enésima vez esas malditas ganas de vomitar pero solo podía arquear ya que en su estomago no había nada y todo se empeoraba con ese maldito chirrido que sin importar cuánto se tapará los oídos, no podía dejar de escucharlo.

El humor del rubio era terrible, era muy buena la diversión de ayer que olvido por completo el martirio del día siguiente, en estos casos aplica muy bien aquella ley que dice: toda acción tiene reacción, en estos momentos no tenia ganas de nada incluso no quería ni respirar.

Entre maldiciones y descontentos hacía sus ruidosos vecinos se alisto para ir a la farmacia a comprar electrolitos y pastillas para el dolor.

el día era horrible, o al menos para jeonghan si lo era, todo soleado y se escuchaba demasiado ruido para su gusto, pues el el edificio donde vivía hacían reparaciones con maquinaria y había música puesta por los trabajadores. Siguió su camino hacia la puerta y en el transcurso se encontró con la malvada señora chwe que le dio el susto de su vida.

~Joven!, Buenos días.- grito la señora de avanzada edad, con la intención de hacerlo sufrir o esa era la perspectiva que jeonghan tenía.

jeonghan solo brinco por el el grito repentino, serró fuertemente los ojos, pues la punzada que causó en su cabeza aquel agudo e irritante grito le provocó estragos en el cerebro, suspiro pesadamente e hizo un ademán con la cabeza, no tenía ganas de hablar ni dar sonrisitas hacia otras gentes.

Se puso su lentes negros y cubrebocas, no quería ver o hablar con alguien, y tal vez así auyentaria a quien se le ocurriera acercarse, bueno no era esa la razón original, si no que temía que vieran su semblante destruido, con enormes bolsas obscuras bajo sus ojos, Su color desabrido en la piel, parecía una persona con problemas hepáticos entre otros aspectos que desgustaban al rubio...

Con pereza movía los pies, caminaba perdido en su mundo hasta que visualizo la farmacia, compro lo necesario y salió.

Iba tomando su electrólito cuando choca con un cuerpo por lo menos dos veces más grande que el del, haciendo que su bebida se derramará en su sudadera blanca.

~¡DIABLOS!-grito- ¡¿Por qué no te fijas por dónde vas?!.

~Tu eres el que debería fijarse,¿por qué no te detienes para tomar tu bebida?, lo que te paso no es mi asunto. - solo eso dijo y paso de largo a jeonghan.

Excelente, ahora su sudadera blanca estaba pintada de rojo, grandioso día, vamos por muy buen camino, pensó jeonghan.

Y bien queda mas que claro que hoy no era un buen dia, solo quería llegar a casa para quedar en estado de peso muerto de nuevo.

[★★★]

Los días en la preparatoria eran gratos y algunas veces estresantes como ahora por ejemplo, la aburrida clase de matemáticas al menos a jeonghan no le interesaban, una alma libre y relajada como la de el no necesitaba las matemáticas en su vida... Bueno no dentro de lo que cabe.

Estaba a solo un año de acabar el nivel Medio superior y aún no sabía que estudiaría, cree que aún no es el momento adecuado para elegir.

Iba tan sumergido en sus pensamientos que no se dió cuenta cuando llegó a la cafetería y ahí se arruinó su bello día.

Ver aquella imagen solo destrozó su corazón, sintiendo punzadas latentes, sintiendo esa opreción y sus ojitos se llenaron de lágrimas.

Los vio...

Se veían realmente felices, tomados de la mano,mirandose como si nada importará más que tenerse y sonreírse entre si, viendo y sintiendo el amor que se transmiten, las juguetonas miradas llenas de "amor", la mirada qué tal vez jamás le daría a el.

Sintió como su corazón se asfixiba, pues el pelinegro veía con ojos de adoración a aquella chica, la veía como si nada más importará, como si ella fuera su todo... El quería ser su todo.

Agachó la cabeza y se giró para limpiar las lágrimas acumuladas, hasta el hambre se le fue, el estómagos se le revolvió y a paso rápido se fué.

Subía corriendo las escaleras a la azotea del edificio, su mirada nublada por las lágrimas y el horrible dolor en el pecho...

Cuándo llegó, se dejó caer en el suelo y lloro amargamente por el, por lo que sentía, por lo que vio.

Últimamente esa azotea y el eran muy grandes amigo, pues a ella recurría cuando veía escenas como la anterior.

° 。 °。° 。 °。° 。 °。° 。 °。° 。 °。° 。 °。° 。 °。° 。 °。

HOLAAAAAAAAAA...

¿cómo están?, Espero que muy bien. Aquí les traigo otro capítulo,un poco aburrido pero será importante así que no lo olviden jajaja...

Bueno, también tengo que promocionarme descaradamente...

Subí un "one" es seoksoo, es muy romántico y creo que está muy lindo, así que si gustan pueden pasar a leerlo :3. Y ahora sí me despido.

Lxs quiero, cuidense mucho 🦋

Editaré al final de la obra, perdonen la dislexia :/
                              Bye

☆゚.*・。゚P E R D I C I O N   A N G E L I C A L    ☆゚.*・。゚ JCh.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora