☆ﾟ.*･｡ﾟP E R D I C I O N A N G E L I C A L ☆ﾟ.*･｡ﾟ JCh.

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Ya eran más se las tres de la tarde, el bonito rubio miraba impaciente el reloj y es que jamás se imagino a si mismo andando por ahí tratando de seducir a chicos guapos... Bueno solo a uno pero en fin, ya estaba listo busco una vestimenta apropiada para un campo de entrenamiento.

Cuando el reloj marco el tiempo previsto se dio una mirada coqueta ante el espejo y se dio ánimos a si mismo, sabía que era patético pero en estos casos se necesitaba a si mismo.

Con cada paso que daba parecía que en la acera se quedaba incrustada su "valentía" y es que como no hacerlo, imaginarse a si mismo haciendo el pobre intento de seducción y quedar en ridículo era aterrador, pero era más aterrador pensar en que tal vez si sea correspondido y que después de un tiempo se diera cuenta que solo era un capricho y no "amor"? ¿Debería de llamarlo así?, El pensar las posibles soluciones lo entretuvo mucho pues cuando se dió cuenta ya estaba llegando al campo.

Miro atentamente la puerta de entrada y pensó en que aún estaba a puto de arrepentirse e irse y pasar desapercibido, era una muy buena idea y planeaba hacerlo pero.

~¡Jeonghan!, Me alegra que si vinieras, sabes por un momento creí que serías el mismo cobarde y te quedarías en tu casa.- hablo burlonamente el peliblanco.

Estaba jodido y maldita sea la hora en la que camino rápido y llegó a ese lugar.

~No seas idiota, yo acepto retos así que aquí me tiene- mentir era una muy buena opción.

Quería parecer seguro, imponente y todo eso para ocultar las malditas ganas irse y esconderé en su cama perdido en sus penas. Suspiro una y otra vez, ya estaba ahí así que trataría de no arruínalo.

Fue a las bancas indicadas para visitantes y se sentó a ver el aburrido partido, está era una de las razones por las que prefería hacer dieta en vez de ejercitarse le parecía aburrido y absurdo correr atrás de una pelota... Era estúpido y no quería verse como un idiota y tampoco quería verse como aquellos hombres musculoso, alguno se ven muy raro no quería eso para su hermosa escultura, así que prefería comer sano y evitar desgastarse horas corriendo o levantando peso que a la larga te traerá problemas.

Perdido en siy celular noto que cayeron algunas gotas de lo que parecía ser sudor, hizo una cara de asco y levanto la cara para insultar al idiota que había salpicado su pantalla, pero que sorpresa se llevó.

~Me pareció ver a un guapo rubio- sonrió coqueto al menor.

~Seungcheol, hola - se acomodo un mechón rebelde que estaba en su frente.

~Hola bonito, así que viniste.- se sentó a su lado.

~Si, y tú ¿Qué haces aquí?- dijo aquello con una sonrisa forzada, se dio cuenta tarde de la estupidez que soltó.

~Creo que es obvio, pequeño, entreno aquí- le dio una sonrisa mostrando sus pulcra dentadura perfecta.

~Oh, si es verdad- sonrió forzado, los malditos nervios crecían cada vez más. - y bueno, no veo que entrenes, acaso ya acabaron?- quería que se fuera y no volviera, bueno que se fuera para que se pueda preparar mentalmente.

~bueno, es el descanso tengo al menos unos - miro su reloj deportivo y tenía cinco minutos más de descanso- minutos para hablar contigo antes de volver a entrenar.

El bonito rubio solo suspiro pues aún que es poco tiempo se convertían en minutos eternos.

~Y que te hizo cambiar de opinión y venir a "un aburrido entrenamiento"- dijo eso arremedando la manera de decir del Rubio.

~Pues vine a ver a mi hyung favorito- observo la sonrisa del mayor, creo que ya es hora de jugar- todo el fin de semana y los últimos cinco días me estubo rogando por qué viniera y bueno aquí me tiene- miro la cara confunda del azabache, a caso se estará preguntando de cuál Hyung hablaba.

~Y se puede saber quién es ese Hyung?- pregunto curioso, sus palabras salian con un astisbo de molestia.

~Es shua, es tan lindo, me prometió llevarme a un lugar especial después del entrenamiento, estoy emocionado por qué creo que sera la tarde más perfecta que haya tenido desde que me mude aquí- sonaba ridículo pero por la cara del azabache parecía dar resultado.

Por otro lado el pálido azabache se quedó pensando... ¿No recordaba la tarde que pasaron ellos? ¿Fue insignificante para el rubio? Pensarlo e imaginarlo dolía demasiado. Pero la realidad es que en verdad fue insignificante, está tan emocionado con Joshua que no se acuerda de lo que hizo por el cuando estaba triste y que jamás le contó lo que le pasó, posiblemente Joshua sepa, este sentimiento es nuevo y extraño.

~oh, ya veo, pues diviértete y adiós- sus palabras fueron directas y frías, se levantó y se fue sin siquiera mirar al rubio.

~Que diablos!- se susurro a si mismo, ojalá y Joshua no tenga problemas por lo que dijo, pero las circunstancias lo requerían- creo que funcionó.- parecía una colegiala sonriendo y de la emoción brinco y todo, solo le faltó gritar a todo pulmón.

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I know es corto, pero no eh tenido tiempo, estoy en épocas de examen y ajá, ya saben.

Peeeero aquí les traigo esto UnU está muy feo pero, dude, se hace lo que se puede.

Cuídense muchooo .

Bye 💜✨