CAP. 4

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Eran las diez de la noche y la chica había llegado a su casa pero no contaba con que sus padres la estarían esperando en la sala.

Sebastian: ¿Dónde estabas?

No pudo contestar nada y solo se quedó callada viendo a sus padres los cuales tenían un enojo bastante notorio.

Cris: contesta, niña

Malak: me hablan como si hubiera hecho algo malo, además, no sé para qué quieren que les diga si de todos modos no les importa

Sebastian: la heredera del grupo FLOWER no debería estar en la calle a estas horas

Malak: ¡"la heredera, la heredera, la heredera"! Eso es lo único que les importa, ¿verdad? Que yo sea la maldita heredera de FLOWER... Claro, qué tonta soy

Sebastian: aunque no lo creas, nos importas, Malak

Malak: pues no lo parece, Sebastian. Si yo les importara aunque sea en lo más mínimo, no estarían de viaje todo el tiempo y no me hubieran tratado como heredera así como lo han hecho hasta ahora. Créanme que si no fuera así, en este momento no estaríamos discutiendo

Sebastian: está bien. ¿Quieres que te pongamos atención? Dime qué quieres y yo puedo comprarlo

Malak: ¡¿Es en serio que estás diciendo eso?! ¿Piensas comprarme?

Sebastian: querías que te pusieramos atención, ¿no?

La chica no pudo creer lo que su padre decía y soltó una risa sin gracia.

Sebastian: ¿De qué te ríes? Para que veas que sí te quiero, te compré una camioneta, tal y como te gustan a ti

Malak: no me importa, quédate con tu camioneta, yo no la quiero

Malak se fue a su cuarto, se bañó y se puso su pijama, quizo disfrutar un poco el paisaje para despejar su mente, así que se asomó a su ventana por la cual se podía ver la camioneta que había comprado su padre para ella.

Malak: creo que la tomaré, no pienso montarme a la moto con falda

Poco rato después el sueño la fue venciendo y se fue a recostar para dormir plácidamente.

...

MALAK.

El sonido de mi despertador comenzó a sonar, dándome a entender que se trataba del comienzo de mi estancia en mi nueva escuela, lo cual me pareció indiferente, no era nada nuevo que mis padres tomaran decisiones por mí y a mis espaldas.

Me metí a bañar con agua fría para mantenerme despierta, ya que es imposible que no me quede dormida en algún lugar. Salí de la regadera y regresé a mi cama observando que mi uniforme estaba colocado sobre esta, me lo puse y me peine de una forma adecuada para un primer día de clases en una escuela que no conozco.

Al terminar de arreglarme tomé mis cosas y bajé al ante comedor donde se encontraba mi padre tomando su desayuno mientras miraba el periódico, me senté frente a él y dejé mi mochila en la silla que estaba a lado de mí mientras una de las chicas que ayudaban en la cocina colocaba mi desayuno en la mesa.

Malak: padre, quiero decirte que tomaré la camioneta, solo será para ir a la escuela

Sebastian: haz lo que quieras, no importa -dio un sorbo a su café-

Me importó poco lo que me dijo y en el momento que terminé de desayunar fui a lavarme los dientes, salí para subirme a la camioneta y conducir hasta la escuela.

Cuando llegué al instituto SHINWA, me di cuenta de que era demasiado grande. Yo tengo mal sentido de la orientación, así que supongo que este no es un buen comienzo.

Caminé hasta llegar a un tipo bosque donde vi a un chico tocando el violín. Me quedé viendo cómo tocaba hasta que dejó de hacerlo y me miró con atención esperando que hablara y así lo hice.

Malak: siento interrumpirte, un favor, ¿me podrías decir dónde está la cancha de básquetbol?

Ji Hoo: ninguna chica, en todo lo que llevo aquí en la escuela ha preguntado por la cancha de básquetbol

Malak: pues vete acostumbrando, me estarás viendo casi todo el tiempo ahí. Bueno, si es que te gusta el básquetbol

Ji Hoo: está por allá -me señaló el camino- no es muy difícil encontrarlo

Malak: está bien, gracias... -dije intentando averiguar su nombre-

Ji Hoo: Yoon Ji Hoo

Malak: ok, gracias, Yoon Ji Hoo

Ji Hoo: y tú te llamas...

Malak: ¡oh, sí! Soy Malak Kantún

Ji Hoo: no eres de por aquí, ¿cierto?

Malak: -sonreí nerviosa- no, no soy coreana. ¿Tanto se nota?

Ji Hoo: sí -dijo sin expresión alguna-

Malak: -reí leve- bueno, me tengo que ir, adiós

Ji Hoo: adiós, Malak

Caminé hasta llegar a la cancha de básquetbol y era realmente grande, debo admitirlo, me gustó mucho.

Cuando iba de camino al salón donde me asignaron, todos empezaron a gritar como locos, corriendo mientras se reunían en el mismo punto.

X: ¡SON LOS F4!

Quise ver qué era lo que tanto gritaban, al acercarme pude ver a cuatro chicos, entre ellos estaba Ji Hoo, el chico que conocí esta mañana.

GU JUN PYO.

Mis amigos y yo llegamos a la escuela e hicimos nuestra típica entrada mientras todos gritaban emocionados por nosotros, me detuve frente a un chico al ver que este tenía una camisa parecida a la mía, cosa que me molestó demasiado.

Jun Pyo: tienes tres segundos -dije sin dejar de verlo-

X: ¿Qué? -comenzó a tartamudear- ¿Para qué?

Jun Pyo: tres -mientras más contaba el chico se ponía más nervioso- dos, uno

El chico estaba demasiado nervioso al punto de casi llorar.

Jun Pyo: ya, Woo Bin, ¿te queda jugo?

Woo Bin: ¡ah! Sí, ¿quieres?

Estiré mi mano para que él pusiera la botella de jugo en ella, y así lo hizo.

MALAK.

El chico que al parecer es el líder del grupo vació la botella de jugo en la camisa del chico causando el asombro de los espectadores, quienes solo se dedicaron a ver sin hacer nada al respecto.

Cuando terminó se fue junto con sus demás amigos mientras todos se colocaban al rededor del chico consolandolo y yo me quedé ahí procesando todo.

Malak: pero... ¿Qué le pasa a este idiota? Parece que no les enseñan buenos modales aquí ni en sus casas -dije molesta por lo sucedido-

Jan Di: está loco. ¡¿Pero qué es lo que pasa con él?! ¿Por qué nadie hace nada? ¿Por qué todos se quedan sólo observando?

Estaba caminando en reversa y no me di cuenta de que alguien estaba detrás mío hasta que choqué con esa persona.

Jan Di: hola

Malak: hola. ¿Cómo...

Iba a preguntar por el nombre de la chica pero la voz de otra me detuvo por lo que volteé, pero no era sólo una, eran tres chicas las cuales me vieron de forma extraña.

X: OMG. ¿Qué es lo que acaban de decir, niñas?

Malak: ¿Y ustedes quiénes son?

...

𝑒𝑛𝑎𝑚𝑜𝑟𝑎𝑑𝑜𝑠 𝑝𝑜𝑟 𝑐𝑎𝑠𝑢𝑎𝑙𝑖𝑑𝑎𝑑Donde viven las historias. Descúbrelo ahora