Naruto en Zero no Tsukaima II

Capítulo 39: Nobleza

Tras pasar la entrada Julio caminó por el gran patio y fue directamente a la entrada de la catedral. Ocasionalmente podía oír a lo lejos el sonido de las explosiones y con el pasar del tiempo el cielo nocturno se tornaba más y más rojo a causa del fuego.

Cuando entró finalmente a la catedral todo el ruido del exterior se calmó. El interior de la catedral era anormalmente silencioso a causa de una barrera insonorizadora que la catedral tenia integrada. Lo único que Julio podía oír en ese lugar era el sonido de sus zapatos con cada paso que daba.

El interior de la catedral era muy lujoso y lleno de historia. El techo no se podía ver a no ser que uno elevara la vista, los pilares de mármol blanco estaban bellamente decorados con un entramado complicado en sus extremos y en todas partes se podía ver vitrales compuestos por una gran variedad de cristales igualmente variados en color, el piso era tan lustroso que casi parecía un espejo. Mientras Julio caminaba a lo lejos vio a una persona frente al altar.

La distancia entre la entrada y el altar era de más de cincuenta metros por lo que Julio tuvo tiempo suficiente para poner su mente en calma, pero con cada paso que daba, con cada metro menos hacia el altar su mente se llenaba de ansiedad por la persona que estaba orando frente al altar.

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-creí haberle dicho a Evelin que quería estar solo.

Cuando Julio estaba a diez metros del altar esas fueron las palabras que la persona frente al altar dijo mientras abría los ojos y miraba la estatua de Brimir frente a él.

Julio

-si. Tuvimos una pequeña charla al respecto, al final me dejó venir a saludarte.

Dice Julio mientras tira algo hacia un lado. Incluso el sonido de esa pistola cayendo hacia un lado se puede oír claramente debido a la arquitectura del lugar. La pistola parece estar totalmente destrozada y tiene algunas partes parcialmente fundida a causa de la pelea.

Julio

-supuse que estarías aquí. Es la víspera del pentecostés después de todo.

Después de tirar la pistola inservible Julio dice eso mientras pone una sonrisa en su cara, una sonrisa algo solitaria.

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-ha pasado un tiempo Julio. Parece que te ha ido bien.

Una vez Julio le responde la persona frente al altar finalmente se da media vuelta y mira hacia Julio. La persona frente al altar es alguien que está al final de su juventud, alguien que ya está por terminar la flor de su juventud, pero cuyos ojos aun parecen llenos de energía y determinación.

Julio

-de ser posible hubiera querido encontrarte en otras circunstancias Jack.

La persona frente a Julio es; tal como decía la carta que le mostró William hace tiempo, uno de los paladines que fueron a la purga de la inquisición hace años. La persona frente a Julio es uno de sus maestros, la persona que le enseño esgrima poco después de que se convirtió en el familiar del papa y quien había dado por muerto en aquel masivo incendio.

Julio

-dime algo. ¿Por qué? ¡¿Por qué te encuentras como el actual líder de la inquisición?!