Mi Mejor Amigo (AD #1)

18.- Vida Y Muerte

Travis

Toda la semana ha sido jodidamente increíble.

Estoy tan enamorado de Jane que incluso me duele el pecho cada vez que la veo y cada vez el amor se vuelve más intenso. Con cada beso, cada palabra caigo aún más profundo. No creí que fuera posible, no creí que fuera posible enamorarme aún más de Jane, pero lo hice.

Me estoy enamorando cada día más de ella y me encanta esta sensación porque se que es correspondido. Así ella no se lo admita a sí misma, se que esta enamorada de mí. Me ama y aunque no lo diga, eso es mas que suficiente para mí. Es todo lo que siempre he querido. Mucho más de lo que imagine que iba a lograr con ella.

Es viernes y estamos en la hora del almuerzo en la cafetería. La gente desde el martes que nos vieron besándonos, ha estado hablando y hemos estado recibiendo atención extra y exagerada de todo el mundo. No me gusta la atención, pero dentro de mí me gusta el hecho de que sepan que estoy con Jane, mi supuesta mejor amiga y que ahora somos… lo que sea que seamos.

¿Es mi novia? ¿Que soy para ella? Me haría jodidamente feliz ser su novio, pero no se si ella se sentiría cómoda. Aún no se me olvida la cara que puso cuando estuve a punto de decirle que la amaba, el miedo y la vulnerabilidad adornando sus ojos cafés y no quiero eso. Se lo diré cuando ella esté lista. Aunque cada vez la necesidad de decirlo aumenta y siento que ya no puedo guardarlo más.

Ella se ríe cuando me da de comer en la boca una papa y hace un puchero cuando me ensucia de ketchup la mejilla, limpiándome rápidamente con su pulgar para chuparlo después.

Mierda.

Me quedo viendo como un idiota como su dedo desaparece en su boca y luego lo suelta con un sonidito.

Esta chica quiere matarme.

—Sé lo que estas pensando —me dice mientras toma otra papa—. Di «A».

Lo hago y sonrío porque esto parece divertirle, a pesar de que me siento un poco incómodo porque siento que todo el mundo nos mira y odio la atención en masa. Que irónico. Odio la atención aquí, pero me encanta cuando juego fútbol y que todo el mundo grite mi nombre.

—Y… ¿en qué estoy pensando? —levanto una ceja y ella pone sus ojos en blanco, sin embargo, sonríe.

—Maldición, ustedes me dan cringe —dice Jake, sentándose frente a nosotros en nuestra mesa, Kylie se sienta a su lado.

Le doy una mala mirada a Jake cuando Jane se endereza en su asiento. Mi mejor amigo me lanza un beso.

—Eres asqueroso —le digo y me pongo a comer yo mismo mi comida, de lo cual no es divertido ya que así no tengo toda la atención de Jane.

Y quiero su atención.

—Yo también te amo, bebé —me guiña un ojo y le saco el dedo medio.

Kylie se ríe y mira a Jane, quien le devuelve la mirada y ambas sonríen. Es como si pudieran comunicarse solo con miradas y me parce jodidamente extraño pero no les digo nada, siempre han sido así.

—¿Ya se lo dijiste a Jane? —pregunta Jake y eso me hace querer golpearlo otra vez.

Dejo los cubiertos y miro a Jake con ojos de «quiero matarte».

—¿Decirme qué? —Jane me mira, con intriga en sus ojos.

—Hum… hay una fiesta y… —por la mirada que me da, por la forma en que su sonrisa se borra lentamente, sé cuál es su respuesta; pero aún así, continúo—, y pensé que sería bueno que vayamos juntos.