ALICE
Empiezo a abrir los ojos, pero el dolor repentino en mi cabeza me hace cerrarlos de golpe, intento levantarme con la cabeza taladrándrome, consigo salir al salón, paso a la cocina para beber agua y tomarme una pastilla para esta maldita resaca que me está matando. Lo único bueno es que es sábado y por lo tanto no tengo nada que hacer.<Qué triste es tu vida cariño>, no es triste, déjame. <Claaaroo por eso un sábado, estás en tu casa sin tener un plan, si pareces una abuela solo te falta tejer>. Las abuelas son más monas que yo, así que dudo ser una. Y en medio de mi preciosa pelea conmigo misma tocan al timbre, haciendo que el maldito dolor de cabeza vuelva al estado de antes. <Gracias persona estúpida que viene a mi casa a las 2 del medio día solo para molestarme>
Voy a la puerta y la abro no sin antes mirar por la mirilla para saber quien demonios era... <Genial, es tu queridísimo ex>
Y ahí estaba, con su cara de todo me importa una mierda. Liam es el típico chico malo y pues yo fui la típica idiota que cayó y perdió la virginidad con él, luego fue a contárselo a literalmente todo el instituto, yo quede destrozada y humillada. Por eso ahora soy como soy, si no llegas a tener sentimientos por alguien no habrá nada que romper, eso fue lo que aprendí de Liam y que no siempre el chico malo cambia por la chica inocente.
-¿Qué mierda haces aquí Liam?-digo seria y mirándole directamente a esos ojos azules que una vez me prometieron amor, ahora me río de lo patética que fui.
-Sólo venía a ver como estabas-dice con su tonito de en realidad me importa tres rábanos de mierda.
-Pues ya ves que estoy perfectamente, así que vete que no te quiero ni ver -digo con amargura cerrando la puerta y estampándosela en la cara al imbecil de Liam.
Ya me han jodido la mañana, voy al armario para coger las cosas que necesito para mi precioso baño que tenía pensado desde ayer, cojo bombas de baño y mi libro. Introduzco la bomba en la bañera haciendo que se deshaga y se coloree el agua que hace unos momentos era cristalina y ahora es de un color dorado con brillantes. Me deshago de mi ropa, me recojo el cabello en un moño despreocupado y me introduzco en el agua dorada provocando que todo el estrés y la ansiedad desaparezcan por completo.
Llevo como 2h en la bañera o eso creo ya que mis dedos están arrugados a más no poder, sigo con mi lectura sin importarme desintegrarme aquí mismo, hasta que otra vez alguien llama al timbre.<Es que la gente no tiene vida o qué pasa>
Ignoro a mi conciencia por que es muy amigable (nótese el sarcasmo), salgo de la bañera y me pongo el albornoz, salgo y me dirijo a abrir la dichosa puerta. <Oh oh, ¿quién demonios era este chico?>
-Hola preciosa -dice guiñando, y yo frunzo el ceño aún más.
-Perdona, ¿tú eres...? - digo sincera, porque no tengo idea de quién es.
-Oh no, ¿que no te acuerdas de la follada que nos dimos ayer, preciosa? -dice juguetón.
Trago saliva a lo que acaba de decir. <Mierda, ya te has enrollado con un desconocido y lo peor es que no te acuerdas "preciosa" >
-Perdón, pero no me acuerdo-digo con frialdad.
-Si quieres lo repetimos y así te acuerdas, por lo que veo estas muy descubierta- dice mirándome de pies a cabeza. Frunzo el ceño hasta que me acuerdo que voy en albornoz.
MIERDA MIERDA MIERDA, voy en albornoz delante de un desconocido que por lo visto me follé anoche. <Por eso niños, no se bebe, si no acabaréis asi>
Ignoro de nuevo a mi conciencia y miro de nuevo al chico que a decir verdad es bastante atractivo, tiene ojos verdosos, pelo castaño y es alto como 1'85 más o menos, me fijo en su sonrisa picarona y entiendo perfectamente para qué a venido.
-Lo siento pero yo no repito dos veces, cariño- digo guiñándole un ojo y cerrando la puerta, pero él pone su pie antes de que ésta se cierre.
-Te veo el martes a las 19:00, estaré aquí para recogerte-dice con su voz ronca y sexy antes de irse y dejarme completamente confundida.
<Ahora tienes una cita con un desconocido, bravo Alice>, a lo mejor es sólo que le gusto y ya. <Claro y también puede ser un maldito asesino que quiere cortarte la cabeza, pero no antes de follarte claro está>. Bueno pues no voy y ya. < Y cómo piensas escapar si va a venir a recogerte aquí, pedazo de inteligente>, pues ya le diré algo cuando esté aquí, dios conciencia déjame tranquila por una vez, si me mata pues mira tampoco pierdo mucho.
Tendré que hablar con Hana para que me diga qué mierda paso ayer, porqué él sabe donde vivo y porqué no recuerdo nada de lo sucedido.
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¿Podremos amarnos?
Teen Fiction-Aunque pudiera estar en mil sitios a la vez, tengo claro que sujetaría la misma mano, cada que me siento perdida -. digo con una sonrisa sincera. -¿De quién es esa mano? - pregunta. -La tuya... - susurro. *Una historia que te enamorará de principi...