24- Confesiones

89 8 4
                                    

Nunca en toda mi vida había estado tan confundida ni me había sentido tan culpable por sentir lo que siento

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Nunca en toda mi vida había estado tan confundida ni me había sentido tan culpable por sentir lo que siento.

¿En realidad será tan malo? ¿En realidad seré condenada en las llamas del infierno solo por tener gustos distintos?

¿No tendré misericordia a pesar de haber sido buena todos estos años?

Mi cabeza esta dando vueltas y me estoy volviendo loca creo que cualquier momento esa locura me alcanzará y terminaré en un manicomio con ropa holgada caminado en esos jardines tan característicos de los psquiatricos sin rumbo, dopada por los medicamentos.

Por un lado una voz en mi cabeza me dice “Ábrete al cambio no eres mala solo tienes corazón, ve y búscala besarla y sean felices” pero también hay otra voz que me dice “Tú no eres así solo estás confundida porque nunca habías compartido momentos así con nadie y crees estar enamorada pero solo estás confundida, ella no te gusta solo es una amiga más”

Y la segunda voz cada vez es la que suena más fuerte dentro de mi y la primera la que quisiera que sonará fuerte y retumbara como tambor apenas se escucha.

También pienso en Lía, nunca nadie había permanecido tanto tiempo en mi cabeza y es que siento que la amo con locura, pienso en ella cada segundo de mi existencia y aunque toda mi vida me dijeron que estaba mal ahora esto me carcome por dentro.

Estoy cuestionandome sobre lo que creí toda mi vida de como fui educada y sobre esto nuevo que siento.

.....

Después de que mi hermana nos atrapará besándonos corrí como cobarde a esconderme en mi habitación y no quise salir hasta que mamá llegó en la noche.

Siempre tan cobarde Lucia eres una decepción para tu especie.

Evite la mirada de Jessica durante la cena, evite responderle a mamá cuando después de cena me preguntó que me pasaba mientras lavabamos los platos.

Y la evite a ella por días...

Simplemente le dije que yo terminaría el trabajo sola y que ya no necesitaba venir más.

Que yo pondría su nombre en el trabajo y que me aseguraría que quedará perfecto para sacarnos una buena calificación.

Lía intento hablar conmigo todo el tiempo, disculparse aunque la verdad ella no era la mala aquí sino yo. Y hasta vino a casa un día en la tarde pero fui tan cobarde que no le abrí.

Aún están en mi cabeza sus golpes de la puerta por 45 minutos pidiendo hablar conmigo y diciendo que sabía que estaba en casa.

—Lia: Perdóname por favor ricitos, te prometo no hacerlo más pero abreme estoy preocupada.

Me siento extremamente mal por haber actuado así, últimamente estoy actuando de una manera que jamás lo había hecho.

Suelo seguir las reglas me gusta hacerlo aunque nadie me lo pida, mi mamá jamás nos ah pedido o exigido que nos comportamos de cierta manera y en casa no hay tantas reglas pero yo actuó por automático.

El Diario De Una NinfómanaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora