Me alejé de recepción con mis resultados en las manos no quise dejar pasar tanto tiempo porque quería salir de dudas lo más pronto posible.
Lo abrí con manos temblorosas y cuando lo hice cerré mis ojos para negarme a ver el resultado pero los tuve que abrir a los milisegundos.
Mierda.
Clamidia tengo clamidia, vaya mierda.
En mi cabeza solo podían estar las palabras de mi secta;
“¡Eso te pasa por zorra!”
"¡Por lujuriosa!"
“Por golfa!”
“¡Por no llegar pura al matrimonio!”
“¡Es tú castigó por tener relaciones solo por placer y no para concebir”!Estoy llena de prejuicios muy dentro de mí que aunque intente rebatirlos siempre estarán ahí dentro de mi mente muy ocultos pero que saldrán cuando este tipo de cosas pasen.
Me senté en una de las sillas de la sala de espera la cual era muy cómoda pero ahora eso no me era de importancia pues solo quería recuperarme del golpe recibido por la noticia.
Tenía los papeles en la mano y mis labios apretados tratando de asimilar ésto, si bien era curable eso era lo bueno pero no podia dejar de pensar que pudo ser peor.
En lo que estaba sentada ahí pude ver salir a una pareja joven del consultorio del doctor iban felices porque pronto serían papás y ya hasta iban pensando en nombres.
Los ví salir emocionados y fue cuando comprendí que yo jamás me vería en esa situación, es decir si llegará a quedar embarazada por error definitivamente no estaría felíz.
Debo cambiar debo dejar de meterme con el primero que se me atraviese o puedo quedar embarazada o con una ITS más grave.
Suspire y lleve mis manos a la cabeza con mis codos apoyados en mis piernas tratando de calmarme.
—Señorita: Jessica Rivas -Alce mi mirada para darme cuenta que era la secretaria del doctor- El doctor la espera.
Sonreí y me levante para meterme al consultorio ahí ya estaba una enfermera chaparrita y regordeta con sus cachetes rosados muy linda.
Me senté él leyó mis estudios en su computadora e hizo algunas anotaciones después de hacerme más preguntas me pidió que me pusiera una bata que estaba en el baño y me quitara las bragas para examinarme.
Me recoste en la camilla con esa bata muy incómoda abierta por atrás y rogue para que todo esto pasará rápido.
El doctor me examinó de manera respetuosa y la enfermera a lado de mi haciéndome plática finalmente me dijo que me vistiera.Minutos después ya estaba vestida sentada de nuevo en la silla frente a él.
—Doctor: Pues mira Jessica estamos a muy bien tiempo atacaremos los síntomas con antibióticos que hasta ahorita son pocos por lo general casí no se presentan pero bueno cada organismo es diferente.
Sé te harán más estudios para ver si no hay otra enfermedad de transmisión sexual.
Las buenas noticia es que es reversible.Me dijo animoso para tratar de calmarme pero no podía porque me estaba juzgando yo misma en mi mente.
—Gracias Doc.
Le sonreí de lado y el empezó a escribirme la receta.
—Doctor: Me dices que tú mamá no pudo venir por exceso de trabajo.
Obviamente no podía traer a mamá en esto así que bueno vine sola ya luego veré como le cuento.
—Sí ya sabe la pastelería esta a la orden del día y es la época de más bodas así que.
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El Diario De Una Ninfómana
AléatoirePorque en mi descenso hacia el Infierno encontré mi paraíso