CAPÍTULO: 7

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Sola... en un mundo tan cruel.

- ¿Qué fue lo que hiciste? -Hizashi preguntó-.

- Yo... lo recuerdo como si fuera ayer-.

Estaba jugando en la sala, era una niña...
Mi padre estaba sentado viendo televisión.

Días antes de eso me hablaron sobre mi quirk. Y que debo mantenerlo oculto hasta que pueda controlarlo, pues era muy fuerte para mi. Hasta ahora no consigo controlarlo al 100%.

Ellos pertenecían al 20% de la población que nació sin alguna peculiaridad.
Pero, mi abuelo si tenía uno... el cual heredé.

Recuerdo que mi padre me llamó. Nunca supe lo que quiso decirme, porque cuando lo abracé... soltó un grito de dolor...

Sin darme cuenta había activado mi quirk, aún recuerdo su mirada dando directamente con la mía. Mientras veía su cuerpo deshacerse.
Solté un grito y mi madre llegó corriendo asustada.

Al ver la escena, su alma se destrozó en pedazos. Empezó a gritarme y decirme que era un monstruo, que no tenía corazón... que me odiaba.
Y que de haber sabido que eso sucedería, hubieran elegido no tener hijos.

Juntó entre llantos las cenizas de mi padre en un jarrón de porcelana y en el funeral todos mis familiares me observaban de mala manera.
Todos me evitaban, incluyendo mis primos.

Recuerdo las conversaciones entre mis tías. Le decían a mi madre que debería deshacerse de mi, que era un peligro para todos.

Según mis padres, mi abuelo nunca fue un héroe, o un villano, ya que su quirk era demasiado peligroso, incluso para él.

Siempre pregunté por él, no lo conocí en persona, sólo en fotos...
Pero, su cadáver fue encontrado en la sala de estar de su casa.
Algunos dicen que se suicidó, otros que un villano lo mató o que sufrió un paro cardíaco, el caso nunca fue resuelto y lo tomaron como una muerte natural, poco tiempo después fue olvidado.

Cuando tenía 19 mi madre murió a causa de una enfermedad.
Antes de irse me dijo "Cuidate, no sigas un mal camino e intenta que ese quirk ya no te cause problemas".
Esas fueron sus últimas palabras...
Le pedí disculpas una vez más... para luego volver a llorar.
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Rompí en llanto luego de contarle a Hizashi todo lo que pasó.

- Así que... ¿tienes un quirk el cual puede matar personas?.

- Algo así... es peligroso para todos -secaba mis lágrimas-.

- Sabes... como héroe debería llevarte a investigar, ya que eres una posible amenaza-.

- No hace falta, de niña mi madre ya cumplió con eso... varias veces-.

- Lo siento, no sabía que pasaste por todo eso -Suspiró- Así que... No puedo sostener tus manos-.

- No... mucho menos cuando me encuentro enojada o asustada. Es como un mecanismo de defensa... que se activa sin que yo lo quiera-.

- Pero, ¿puedes activarlo a tu voluntad?-.

- Así es, pero me da miedo hacerlo... puedo controlarlo al menos un 45%, pero eso no es suficiente-.

Yamada se quedó en silencio.

- Perdóname -volvió a decir-.

- No tienes por qué pedir perdón, no eres el culpable-.

- Perdón, por todo lo que hice, me refiero a todo aquello que te dije... al final sólo te obligué a decirme algo que no querías-.

- Tarde o temprano debía decírselo a alguien... No te sientas culpable por todo, yo hice mal en ocultarte esto cuando me preguntaste bien qué sucede conmigo-.

- No te preocupes princess, todo está bien, yo... debo irme, nos vemos el próximo viernes -Hizashi se puso de pie-.

Cuando sentí que ya se iba...
No pude soportarlo más.

Abrí la puerta con rapidez, lo estiré del brazo y lo abracé.

En ese momento... fue cuando pude sentir su cuerpo contra el mío. Su respiración... como sus latidos del corazón se hacían más frecuentes, cuando pude sentir su calor corporal.
Se sentía tan acogedor, rodeó suavemente mi cintura y aceptó aquel abrazo.

Su aroma... aquel aroma a fragancia masculina.
Quería quedarme allí para siempre.

Y si, así es... entre los brazos de Hizashi.

- ¿Estás bien princess?-.

Su voz retumbó en su pecho.

- Si, estoy bien...-.

- ¿Qué fue ese abrazo, que acaso no me odiabas?-.

- No te odio Hizashi, sólo... -.

Una llamada al teléfono de Hizashi me interrumpió.

- Perdón, es mi novia... -.

Me separé de él.

- "¿Desde cuándo este gritón tiene novia?"-.

- Hola Komari, ¿cómo estás mi florecita?-.

Recordé a aquella mujer con la que habló en la estación de radio.
Me sentí un poco incómoda.
Al cabo de unos minutos cortó la llamada.

- Quería hablarte de algo-.

- ¿De qué?-.

- Necesito tu ayuda en... ya sabes-.

- ¿Quieres que te ayude con la investigación?-.

- S-si, es que me informaron sobre eso. Tenemos varios sospechosos, villanos que se encontraron cerca de la zona. Mi trabajo será interrogarlos, pero, necesito una compañera que me ayude en esto, eres la persona más responsable que conozco ¿qué dices?-.

Pensé por un rato.

- Acepto -Dije sonriendo-.

- ¡Fantastic!, si aprendes a controlar tu quirk, podría servirnos de mucho-.

- Pero... no sé como hacerlo-.

- Entonces... -Hizashi quedó pensativo- Yo te enseñaré-.

- ¿T-tu me enseñarás a controlar mi quirk?, ¿estás seguro que podrás hacerlo?-.

- No realmente, pero puedo intentarlo-.

- ¿Cuando empezamos con la investigación?-.

- Ahora mismo, debo pasar por algunos papeles-.

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Las Cenizas De Mi Voz | Present Mic [Hizashi Yamada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora