Odette Edevane es una chica la cual tiene una ligera obsesión con los rompecabezas. Luego de mudarse con su padre para ir a la universidad, se reencuentra con su enemigo de la infancia "Dereck Evans" el chico que desde pequeña se empeñó en fastidiar...
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Papá al verme se dirige hacia mí preocupado, suelto la mano de Dereck para correr y abrazarlo, el corresponde confundido. Es en eso momento donde finalmente suelto las lágrimas que tanto tiempo estuve conteniendo, papá me consuela acariciando mi cabello y limpiando mis mejillas.
—Vamos a mí oficina ¿Te parece? —pregunta apartando con su pulgar una lágrima que rodaba con lentitud. Las personas seguramente están viendo curiosas, sin embargo, no le prestó atención. Asiento con el propósito de tener privacidad y explicarle la situación, aunque no sé cómo eso podría ayudar. Al estar en su oficina, papá pone el seguro y en silencio espera a que hable. Al no obtener respuesta suelta un suspiro—. Odette, linda ¿Me puedes decir qué te paso? ¿Viste algo? ¿Alguien te hizo algo? Por favor dime que paso —me ruega explicaciones que me son difíciles de dar, ni siquiera yo he podido procesar lo que paso.
—Yo... yo...—trato de decir, pero nuevamente el llanto se apodera de mí. No sé qué me pasa, él simplemente me ve con preocupación y lastima, lo cual hace que me sienta peor. Con frustración limpio cara, aparto mi cabello y me tranquilizo para por fin explicar lo que paso—. Salí un rato para recorrer la ciudad, compre unas cosas, camine un poco y luego me puse a tomar unas fotos. Me fui a un lugar más solo para poder tomar mejores fotos y.... unos chicos me robaron todo; mi cámara, mi celular, mi dinero. Yo no quería dárselos, pero tenían un arma yo... tenía mucho miedo ¡Dios! Soy una tonta.
—No, no eres una tonta, No digas eso, por favor —niega con la cabeza y camina de un lado a otro visiblemente molesto—. ¿No te hicieron nada más? —niego repetidas veces. Suelta un sonoro suspiro—. Bueno estas bien, no hay un daño físico. Iremos a comprar un nuevo celular. Tú tranquila, ya pasara. —El teléfono de su oficina suena y él fastidiado, contesta al colgar me dedica una mirada reconfortante y se acerca para darme otro abrazo—. Tengo que arreglar algo rápido, saldré cuanto antes pueda y luego nos iremos ¿prefieres compara el celular ahora o mañana? —me da dos opciones las cuales no quiero elegir, sinceramente no quiero hacer nada, no sé qué hacer.
—Mañana —contesto finalmente a lo cual el asiente y sale de la oficina. Me siento en los sofás de siempre hasta que la perta se vuelve a abrir, predigo que es papá, sin embargo, fallo al encontrarme a el castaño preocupado y en busca de respuestas.
—Odette ¿Qué fue lo paso? ¿Estás bien? —Su preocupación se ve genuina lo cual me hace que le darle explicaciones sin mucha objeción, además me ayudo bastante hace unos minutos cuando buscaba a papá.
—Nada, es qué me robaron —intento resumirlo y quitarle importancia.
—¿Cómo que te robaron? ¿El qué? ¿Quién? ¿Aquí? —niego a su ola de preguntas así que él me mira expectante a mi explicación. El poder platicarlo y sacarlo con papá al final si me sirvió ya que me siento con un peso menos, el explicarle la situación a Dereck se me hace más fácil.
—No, salí un rato a caminar y conocer la ciudad, me puse a tomar fotos y me robaron la cámara, el celular y dinero —al decir lo último, corto el contacto visual que teníamos.
