Odette Edevane es una chica la cual tiene una ligera obsesión con los rompecabezas. Luego de mudarse con su padre para ir a la universidad, se reencuentra con su enemigo de la infancia "Dereck Evans" el chico que desde pequeña se empeñó en fastidiar...
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—¿No vas a contestar? —pregunta refiriéndose al aparato que no deja de sonar en mi bolsillo. Suelto un suspiro y lo saco para ver quién es la persona que me llama, solo espero que no sea papá. Oh, que sorpresa; es papá. Con duda deslizo mi índice por la pantalla contestando así la llamada.
—Buenos días papá —intento sonar casual. Con señas trato de decirle a Dereck que nos metamos al auto y nos vayamos. Voy un poco atrasada y no quiero volver a llegar tarde. Afortunadamente me entiende y desbloquea su auto, uno tipo sedán color gris.
—Buenos días hija ¿Cómo estás? —pregunta con interés.
—Muy bien —miento rascándome el cuero cabelludo, soy muy mala mintiendo, mi lenguaje corporal me delata, afortunadamente estoy por teléfono.
—Te llame anoche para saber si ya estabas en el apartamento de tu amiga, pero no me contéstate —Por suerte no conteste, no confío en mi yo borracha, especialmente porque todo lo que paso ayer está un poco borroso. Dereck ya está adentro por lo cual me dirijo al auto y entro. El castaño ágilmente sale del estacionamiento e inicia el camino hacia la universidad, al manejar se muestra bastante confiado su mano se desliza por el manubrio mientras él mantiene su vista fija en el camino.
—Sí, es que llegue un poquitito tarde —Un poquitito aja—. Y pues solo llegue a dormir —al menos lo último es cierto.
—Buen aparentemente todo está bien —asiento levemente a pesar de que no puede verme—. Llamaba también para preguntarte si querías que fuéramos a desayunar y platicar un rato, ayer creo que no quedamos completamente bien y no quisiera que estuvieras enojada por algo así, lo mejor es que conversemos —¿Conversar de qué? La verdad es que estoy un poco apenada ya que al final él tenía razón, salir día lunes y abusar del alcohol termino siendo muy mala idea, obviamente era mala idea.
—Bueno ahora no puedo porque tengo clases —intento evadir la propuesta. Dereck dirige ligeramente su vista hacia mí para luego regresarla a la calle.
—Entiendo, pero podemos ir a almorzar. Si quieres invitamos a tu amiga, me gustaría conocerla. Tengo entendido que ella vino de Londres —¿Cómo sabe eso? Bueno tal vez si tengo a Scarlet como mi soporte mejore un poco la situación, sé que papá no parara de insistir así que aprovechare la oferta de llevar a una amiga conmigo.
—Le preguntare a Scarlet, supongo que aceptara
—Perfecto, entonces paso por ustedes en el mismo lugar de la última vez
—Está bien —acepto y luego nos despedimos terminando así la llamada. Problema uno, en proceso de resolución. Ser un adulto responsable es muy complicado, no es como creía, en definitiva no.
—¿Era James? —pregunta y asiento en respuesta. Mi celular vuelve a emitir el mismo sonido de hace unos minutos, lo cual hace que ese pequeño pinchazo constante en la cabeza se intensifique. Masajeo mi cabeza mientras contesto a quien me llama, la cual parece ser mi madre. Lo que me faltaba.
