Odette Edevane es una chica la cual tiene una ligera obsesión con los rompecabezas. Luego de mudarse con su padre para ir a la universidad, se reencuentra con su enemigo de la infancia "Dereck Evans" el chico que desde pequeña se empeñó en fastidiar...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Despierto con un poco de dolor de cabeza. Estoy sola en la cama, Tatiana de seguro se esta alistando para irse a la escuela y Scarlet tenía clases en la universidad temprano, además creo que no está muy contenta conmigo. Afortunadamente hoy no tengo clases en la mañana, decidí dejar unos días más pesados para así un día libre para mí. Mi plan de esta semana era ir a ver si tomaba algunas fotos y luego ir a mi clase, pero claro, ya no puedo hacerlo.
Unos golpes en la puerta hacen que salga de mis pensamientos, me siento en la cama y luego de un bostezo doy el permiso de que abran. La puerta la se abre mostrando a papá, está listo para ir a la trabajar, va vestido formal, como de costumbre; camisa blanca, traje negro y corbata roja. Yo no podría vestir así todos los días, mi estilo es más casual.
—Buenos días —saluda con una sonrisa— ¿Cuándo tienes libre para ir a comprar tu celular? Porque si quieres mejor mando a alguien para que lo compre y te lo entregue —niego en respuesta. Dereck mencionó que a papá le gusta comprar celulares y cosas de tecnología, así que, si tiene tiempo, podría ser buena idea ir con él.
—Ahora tengo toda la mañana libre —contesto a lo cual el asiente pensativo—. Si tú tienes tiempo podemos ir ahorita.
—Sí, claro —contesta asintiendo. Revisa su celular y vuelve a asentir—. Bien, si quieres alístate ahorita y yo iré a dejar a Tati que tiene que entrar a la escuela en un rato, vendré por ti en un rato entonces —luego de decir eso se va. Como conozco a papá y sé que no le gusta esperar, me baño y alisto lo más rápido que puedo. Me pongo unos jeans, un suéter gris un poco grande y unos tenis blancos, bastante básico pero cómodo.
Agarro mi mochila y guardo todo lo necesario. Al estar lista bajo encontrándome con Alexia en la sala de estar, está concentrada leyendo una revista, al principio no nota mi presencia sin embargo cuando bajo el último escalón me escucha y al verme me dedica una sonrisa la cual correspondo.
—Buenos día ¿Qué quieres desayunar? —pregunta dejando la revista a un lado.
—Pensaba solo comer cereal, papá vendrá en un rato —contesto un poco apenada. Alexia es alguien bastante amigable y siempre está dispuesta a atener y ayudar a los demás y eso a veces me incomoda un poco, yo siempre fui más independiente.
—Siempre comes cereal antes de ir a la universidad, te hare un desayuno, ayer no fue tu mejor día, pero ahora es otro día, con nuevas oportunidades —asiento agradeciendo su ánimo y nos vamos a la cocina, donde me prepara un omelette acompañado por un jugo de naranja. Papá llega luego de un rato, mientras termino de comer él se toma un café y lee el periódico.
Cuando termino de comer, Alexia se va a su trabajo y yo con papá a comprar un celular. Mientras vamos en camino ninguno habla por lo que decido tomar el control de la radio, al encontrar una canción que me gusta la dejo ahí, me trueno los dedos cosa que papá no pasa por alto, los viajes con papá suelen ser un poco incomodos, no hay muchos temas para hablar durante mucho tiempo, finalmente decido cortar el silencio con algo que desde hace ratos quería comentarle.
