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Me senté al borde de mi cama, un horrible hoyo en mi estómago de culpa. Lo que hice hoy se sintió tan mal, seguirlo al cementerio y tomar una foto de la lápida de alguien por quien podría haberse preocupado. Fue un nuevo bajón para mí, y el dolor que estaba sintiendo era terrible.

Era alrededor de la medianoche cuando no podía dormir, incluso sabiendo que tenía que subirme al autobús a las 5:30. Empaqué todo lo que necesitaba, lista para levantarme e irme cuando suene la alarma en cinco horas. Estaba exhausta, pero mi culpa no me dejaba dormir. No sabía qué hacer para arreglar este sentimiento de consternación, me estaba devorando.

Mi conciencia siempre ha sido una cosa asesina, y hoy no me dejará dormir hasta que haga algo sobre mi problema. Toda esta rivalidad contra Payton me ha hecho sentir más engañosa que nunca, ha sido más difícil de lo que jamás pensé que sería.

Por alguna razón, mi instinto me decía que fuera a verlo.

Tal vez si fuera a verlo y él se comportaba como idiota conmigo, me impulsaría a odiarlo más de nuevo. Por lo tanto, borraría esta culpa que tendría por ir tanto a sus espaldas.

Me levanté y agarré mi teléfono, me acerqué a la puerta y me puse los zapatos. Solo estaba en pijama, pero este sería un viaje rápido. Me dirigí a la puerta, abriéndola hacia el pasillo brillantemente iluminado y los sonidos del ventilador del aire acondicionado.

Salí en silencio con mis zapatillas de deporte, con los brazos cruzados porque hacía un poco de frío. Estaba solo unas puertas más abajo, solo lo sé por el balcón en el que lo vi hoy temprano.

En el segundo en que llegué a su puerta de roble, llamé suavemente tres veces. No pude evitar sentirme un poco tímida, nunca supe qué esperar de Payton durante nuestras interacciones. A veces era difícil ir voluntariamente a verlo sin saber lo que me esperaba.

Llamé de nuevo un poco más fuerte, pensando que tal vez no escuchó la primera vez. Podría estar dormido, después de todo era tarde. Si no llega a la puerta esta vez, asumiré que estaba dormido. Incluso puede tener una chica allí, esa sola idea me hizo querer huir.

No escuché ningún movimiento después de esperar pacientemente desde el segundo golpe, así que probablemente esto no iba a suceder. Puede que ni siquiera esté aquí, no me sorprendería que estuviera deambulando por las calles.

Voy a dar un paso atrás, pero al segundo que lo hice noté un pequeño ruido cerca de mis pies. Cuando miré hacia abajo, me di cuenta de que el suelo alfombrado estaba mojado donde yo estaba. No era mucho, pero lo suficiente para hacer pequeños charcos alrededor de mis zapatillas cuando presiono la superficie. Instantáneamente me sentí confundida, bajando las cejas. Me aparté de la puerta y luego me di cuenta de que parte de la alfombra estaba seca.

¿El agua venía de su habitación?

"¿Payton?" Llamé a su puerta de nuevo, ahora un poco preocupada porque había agua filtrándose por debajo de su puerta.

Sin respuesta, llamé de nuevo, sin rendirme ahora porque comencé a sentir que algo estaba realmente mal. Si había tanta agua frente a su puerta, entonces no podía imaginar cuánta agua había dentro.

Por instinto, agarré la manija de la puerta y la giré. Cuando la perilla giró completamente, rápidamente comprendí que estaba desbloqueada. Parecía muy extraño que la puerta estuviera abierta, no parece ser ese tipo de persona que dejaría algo abierto.

Tragué el nudo en mi garganta y abrí la puerta, esperando por Dios no ver algo que no quería. En el segundo en que abrí la puerta, escuché un sonido de agua corriendo, incluso antes de que pudiera mirar dentro de la habitación.

PERFIDY, payton moormeier.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora