CAPITULO 25

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Armando sintió que todo su mundo se caía, ese era el mismo avión en el que iba Betty, su Betty.

ARMANDO: Betty... —. No sabía que hacer, sólo atino a sentarse en el sofá y llorar como un niño, Marcela se calmó y se acercó a él.

MARCELA: Armando —. El no la escuchaba, simplemente hacía como que no había nadie —. Armando mírame, no te puedes derrumbar sin saber, no sabemos si era ese el avión

ARMANDO: No Marcela, ella estaba en ese avión, estoy seguro

MARCELA: Armando, por favor, seamos positivos y pensemos que si ella estaba en ese avión, ella está bien

ARMANDO: Marcela, si a ella le pasa algo me muero

MARCELA: Escuchame, ella está bien, si te mueres, que pasará con Mateo... Primero, vamos a tranquilizarnos... Aura Maria, traigame una valeriana

AURA MARIA: Si señorita Valencia

MARCELA: Voy a comunicarme con Nicolás para saber si ellos saben algo o si es que se han enterado —. Armando bebió la valeriana, mientras trataba de pensar en positivo, en que ella estaba bien

Llamada

MARCELA: Hola Nicolás

NICOLÁS: Hola Marcela, dime —. Dijo con las voz entrecortada

MARCELA: Ya se enteraron

NICOLÁS: Si, mis padres están desesperados, no saben nada de Betty, aún no la encuentran, creen que puede haber sobrevivido y estar entre los escombros

MARCELA: Por favor, si saben algo más sobre ella, dímelo, lo que sea

NICOLÁS: No te preocupes, yo te mantendré informado

Fin de la llamada

ARMANDO: ¿Que fue lo que te dijeron?

MARCELA: Aún no la encuentran, pero hay posibilidad de que esté viva

ARMANDO: La necesito, mi Betty —. Habían pasado 3 días desde aquél fatídico accidente, la búsqueda continuaba.
Armando había estado día tras día preguntando sobre si la habían encontrado, incluso le contó a los padres de ella, que ambos habían iniciado una relación en secreto.

Aquélla mañana el teléfono de la familia Pinzón, sonó repetidas veces.

NICOLÁS: Alo, buenos días

HOMBRE: Buenos días, señor Nicolás, tenemos buenas noticias

NICOLÁS: Díganme, tienen noticias sobre mi hermana

HOMBRE: Si señor, en estos momentos la están trasladando a una clínica cercana

NICOLÁS:Ya mismo vamos, deme la dirección por favor —. Nicolás fue junto a sus padres para la clínica, con tanto apuró, se olvidaron de contarle a Armando, si no hubiese sido por Marcela, probablemente aún no supiera que ella estaba viva.

MARCELA: Armando, vamos en mi auto

ARMANDO: Si, le diré a mi mamá que recoja de la guardería a Mateo —. Subieron al auto y fueron hasta la clínica a la cuál habían llevado a Betty, al llegar vió a doña Julia abrazada a su marido.

ARMANDO: Buenas tardes

D.JULIA: Don Armando, perdón por no pasarle la voz al momento

ARMANDO: No se preocupe. ¿Dónde está Betty?

D.JULIA: Esta es su habitación —. Dijo señalando la puerta de al frente.

ARMANDO: ¿Puedo pasar a verla?

D.JULIA: Si claro —. Armando dejo sus cosas afuera y entró a la habitación, se acercó lentamente hasta la cama y la vió, se veía tan débil, tenía las mejillas raspadas y alguna que otra herida en el rostro, tenía suero conectado a ella.

ARMANDO: Mi amor... —. Dijo aguantando las lágrimas, le dolía verla así, necesitaba que ella se recuperase, que salieran de ese hospital y pedirle que se casarán. —. Betty, yo voy a estar aquí en cada momento

Le dió un delicado beso sobre sus labios y salió de la habitación.

ARMANDO: ¿Cuál es el estado de Betty?

D.HERMES: El doctor dice que está fuera de riesgo, por el momento, pero que ha entrado en un coma profundo del cuál no sabemos si algún día va a despertar, supongo que como ya sabe el estado en el que se encuentra mi hija, se irá y hará su vida , huirá como un cobarde —. Dijo molestó

ARMANDO: No señor, yo le prometí a Betty estar con ella en todo momento y así será, ella va a despertar y volveremos a estar juntos, así pasen años de años

D.HERMES: Eso esperó, no me defraude

Día tras día, Armando iba a verla al hospital, le contaba sobre su día, sobre Mateo, le leía algún libro, Nicolás le había ayudado a escoger los libros favoritos de ella.

ARMANDO: Mi amor, espero pronto despiertes... Mañana voy a traer a Mateo, te extraña mucho —. Regresó a su casa, jugo con Mateo.

MATEO: ¿Papi, Betty viene?

ARMANDO: Si hijo, Betty va a venir, mañana vamos a visitarla

MATEO: Di! Vamo! —. Terminó de trabajar temprano y recogió a Mateo, para luego ir a la clínica.

Abrió la puerta, traía un pequeño ramo de tulipanes azules y en la otra mano traía a Mateo.

ARMANDO: Buenas tardes mi amor, adivina quién vino

MATEO: Betty, so yo!! —. Dijo caminando despacio hasta la cama de ella, Armando puso los tulipanes en un florero y subió a Mateo a la cama.

ARMANDO: Mateo, despacio golpees a Betty

MATEO: Papi, Betty dueme mucho

ARMANDO: Si, Betty duerme mucho porque está cansada

MATEO: Yo quero jugar con ella! Ella despertar!

ARMANDO: Yo también quiero que despierte

MATEO: Betty, vamo jugar! —. Decía tocando el brazo de ella para despertarla —. Betty, vamo! Te extaño mucho!

ARMANDO: Mateo déjala —. Mateo al ver qué ella no despertaba, se puso a llorar.

MATEO: Mamá! Mamá! —. Armando se quedó totalmente congelado, sintió que su corazón se quebraba, Mateo había llamado mamá a Betty.

ARMANDO: Mateo, hijo, Betty si va a despertar, está bien, pero cálmate —. Decía haciéndose el fuerte, le hubiese encantado que Betty lo escuchará, que escuchará y se enterará de que Mateo la consideraba su mamá.

MATEO: Mami! —. Le dió un beso en la mejilla y salieron de la clínica.


"Encontrar el amor"




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By Morita

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