CAPITULO 30

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Betty bajó a preparar el desayuno con Mateo, lo sentó sobre la mesa mientras ella iba preparando todo.

MATEO: Mami -. Betty suspiró al escuchar a Mateo llamarla, le encantaba que el le dijera así, que le diera el honor de llamarla mamá.

BETTY: Dime mi amor -. Respondió dándose la vuelta y acercándose a él.

MATEO: ¿Tu amas a papá?

BETTY: Si, yo amó mucho a tu papá

MATEO: ¿Y a mí? -. Dijo haciendo pucheros, Betty río por lo bajo y en voz baja respondió.

BETTY: A ti te amo mucho más... Pero que tú papá no se enteré

ARMANDO: ¿Que no me enteré de qué? -. Dijo Armando entrando a la cocina, Betty solo negó con la cabeza al igual que Mateo -. Eso de hablar en voz baja, no te da

BETTY: Bueno, yo no estaba hablando en voz baja... Ya va a estar el desayuno

ARMANDO: Si como no... Mmm que delicioso, te ayudo a llevar las cosas al comedor

BETTY: Gracias, voy a bajar a Mateo y sentarlo en su silla —. Cargó a Mateo y le dió un sonoro beso en la mejilla.
Lo sentó en su silla y le colocó un barbero.

Armando llevó las tazas de leche y el biberón de Mateo, junto a unas tostadas con mantequillas.

BETTY: ¿Armando, que vamos hacer hoy?

ARMANDO: Pues primero, pensaba en ir un rato a caminar por la plaza y ya luego vemos que hacemos

BETTY: Me parece buena idea —. Los tres desayunaron tranquilamente, Armando no dejaba de mirar lo hermosa que era Betty.

Al terminar, Betty se vistió al igual que Mateo, terminaron de arreglarse y salieron de la casa.

Betty empujaba el coche de Mateo y Armando la tenía sujetada de la cintura.

MATEO: Papi, vamos parque

ARMANDO: ¿Creo que podemos ir, no? Amor tú qué dices

BETTY: Si vamos —. Jugaban los tres, las distintas familias que habían ahí, los miraban felices, se veía que era una hermosa familia, los veía como reían, como Armando jugaba con su Betty, como Mateo ayudaba a su mamá.

BETTY: Me cansé de estar corriendo —. Dijo tirándose en el pasto, Mateo se sentó a su lado y se puso a jugar con unos carritos de juguete, Armando se echó al lado de Betty y le dió la mano.

ARMANDO: ¿En qué piensas? —. Dijo al verla concentrada en el cielo.

BETTY: Estoy tratando de recordar

ARMANDO: ¿Y que te acuerdas?

BETTY: La verdad es que recuerdo muy poco, son como pequeños fragmentos del pasado que se me vienen a la mente, pero que desaparecen al segundo

ARMANDO: Bueno, es algo, tal vez poco a poco vas a ir recordando

BETTY: Eso esperó, quiero y necesito recordar todos los momentos contigo y con Mateo —. Dijo dándole un beso y levantándose —. ¿Seguimos caminando?

ARMANDO: Si, Mateo vamos! —. Dijo cargando a Mateo y llendo detrás de Betty.

Mateo iba en los brazos de su padre, la mente de un niño es un cuento de hadas, es el cuento más hermoso y lo que un niño vive cada día, lo refleja en su rostro y en su sonrisa, Mateo iba con una gran sonrisa de oreja a oreja, veía a todos lados, miraba a su mamá, a su papá.

BETTY: Yo digo que sea helado de fresa

ARMANDO: Chocolate

BETTY: Fresa —. Dijo cruzándose de brazos en forma de rebeldía, Mateo jugaba con una niña que había en la heladería.

ARMANDO: Mi amor —. Dijo poniendo sus manos en ambos hombros de Betty, haciendo que ella relajará su postura —. No podemos discutir por un helado, que te parece si por esta vez comemos el helado de fresa y la próxima de chocolate

BETTY: Está bien, ahí si te apoyó... Por cierto, mira a Mateo! —. Dijo señalando discretamente hacia donde se encontraba su hijo, el cuál reía con la niña.

ARMANDO: ¿Uy me parece que mamá está celosa? —. Dijo fastidiandola, Betty rápidamente lo fulminó con la mirada.

BETTY: Yo no estoy celosa!

ARMANDO: ¿Segura?

BETTY: Si, muy segura, más bien voy a ir por Mateo para que coma su helado —. Dijo llendo hacía Mateo

MATEO: Mami ven! —. Dijo dándole la mano y llevándola donde se encontraba su amiguita —. Ella es mi mami!

NIÑA: Hola! —. Dijo la niña con una sonrisa muy alegre, Betty le devolvió la sonrisa aunque por dentro moría de celos, era igual o mucho más celosa que Armando.

BETTY: Hola. ¿Que tal? —. Dijo agachándose a la altura de ella

NIÑA: Muy bien

BETTY: Me alegro, Mateo ya está tu helado, vamos a sentarnos

MATEO: Está bien, ya vengo

NIÑA: Yo también voy a comer mi helado —. Dijo llendo hacía la mesa en la que se encontraban sus padres, Betty le dió la mano a Mateo y lo llevo hacia la mesa que habían separado.

ARMANDO: Celosa, digo Betty. ¿Mateo hiciste una amiga?

MATEO: Si papi, se llama Mía —. Dijo sonrojado el pequeño

BETTY: Voy a recoger los helados —. Se levantó y se acercó a recibir los helados, mientras que Armando reía por lo bajo.

ARMANDO: Mateo estaba pensando en que más tarde y que halla más sol, podemos ir a la playa. ¿Tu quieres ir? Aparté, tengo una sorpresa para ella, pero más tarde

MATEO: Si y llevó mis juguetes!

BETTY: Aquí están los ricos helados! —. Dijo alegré, sentándose al lado de Mateo

ARMANDO: Mmm que rico —. Decía comiendo el mismo helado que Betty —. Mi amor, le estaba diciendo a Mateo que más tarde podemos ir a la playa

BETTY: Si a mí me urge un poco de sol!

ARMANDO: Ok, entonces alistamos algunas cositas, toallas, las ropas de baño y ropa de respuesto

MATEO: Mis juguetes!

ARMANDO: Y los juguetes de playa de Mateo!

"Encontrar el amor"


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Bueno, para terminar este capitulo se lo dedico a Dylanis_16 como regalo de cumpleaños!

Feliz día señora!

Atte. La esposa de Chayanne

Encontrar el amor ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora