Lo prohibido es más divertido.

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-Helen ella es Jenn Williams, es la que nos ayudará con todo mañana, está en último año y es genial con todo en especial con los cosplays  - me presenta Chad, Jenn tenia el cabello negro y largo hasta la cintura, ojos negros y grandes y estaba vestida con distintas gamas de grises, su blusa era un poco más claro que su pantalón

-Hola -me saluda con una enorme sonrisa

-Hola -digo devolviendole el saludo -Chicos hay un problema, Elizabeth no me dio el permiso para hacer sonar la alarma de incendios -digo y oigo como Jenn ríe

-Eso no es problema chica, puedo instalar algunos parlantes en las paredes y listo, de hecho estuve pensando eso... -dice Jenn sentándose en la cama de Marc

-Antes de que llegarán ya estuve hablando con Jenn y le conté todo lo que querías hacer y ella está dispuesta en ayudarnos -comenta Chad y Jenn asiente, Marc estaba recostado por la puerta mirando el techo hundido en sus pensamientos,  intenté quitarlo de mi campo visual y enfocarme en Jenn y Chad que hablaban animadamente

-Mira tengo planeado esto, Matt no estará mañana en todo el día, vendré cuando Chad me avise que salió de clases e instalaré los parlantes por las paredes para simular la alarma, eso será mañana, sin embargo el sábado vendré a las cinco de la mañana antes de que Matt ni Sam despierten, traeré una maquina de humo y eso será todo, nada muy complicado -Jenn parecía muy feliz de estar participando en esto

-Pero chicos, no piensen que todo lo que hará Jenn por nosotros será gratis- dice Chad y por fin veo como Marc parece estar atendiendo la conversación

-Serán 50 dólares, les cobraré solo por la maquina de humo que me costará conseguir - no esperaba que nos cobrara, Marc se acerca a Jenn y le deposita algo en su mano derecha

-Creo que nos deberíamos de colaborar entre todos - le digo a Marc viendo que lo que le habia dado a Jenn eran los cincuenta dólares

-Tómalo como un regalo - me dice sin expresión, habia estado así desde que entramos a la habitación

-Bien-dice Jenn sonriendo y suspira- Chad necesito que me avises cuando salgas de clases para venir a instalar todo

-Claro - responde éste sonriendo

-Helen y te recomiendo una cosa para mañana, como haz de saber todos los edificios tienen guardias de pasillos que son chicas de ultimo año como yo- no tenia la menor idea de eso - y ellas tienen el derecho de recorrer los edificios de las chicas todas las noches para controlar que todas estén en sus habitaciones, pero en realidad sólo lo hacen cuando tienen la reverenda gana y mañana es uno de esos días, te recomiendo que pidas permiso a tu padre o madre y lo hagas firmar con el director así no tendrás problema de salir para venir aquí

-Wow, bien, gracias lo haré - digo pensando en que tendré que llamar y molestar a mi muy ocupado y sin tiempo padre

-Bien chicos me tengo que retirar, necesito hacer varias llamadas para conseguir la máquina de humo -Jenn se despide de Chad con un abrazo y de mi con un beso en la mejilla pero sin embargo pasa a lado de Marc y ni siquiera le dirige la mirada

-Yo también me voy -digo trotando los dedos de mis manos

-¿Quieres ir a cenar algo? -me pregunta Marc había vuelto a actuar normal desde que Jenn salió de la habitación

-Con gusto, me muero de hambre -en un momento creí que era yo la que estaba hablando sin mover mis labios pero solo era Chad quien recibió una mirada de negación de parte de su amigo

-Le hablaba a Helen -dice Marc mirandome esperando mi respuesta

-Me gustaría pero... - digo y me interrumpe

-¿Por qué siempre tienes una excusa para salir o para simplemente estar conmigo? -Eso no era cierto... bueno, quizás sí

-Creo que mejor me voy... -Chad estaba mirandonos con suma atención

-No, quédate no pasa nada Chad y Marc... -digo mirándolo -Si, quiero ir contigo

-Bien -responde él sonriendo - ¿A dónde le gustaría ir a la capitana?

-¿Que te parece McDonald's? -me moría por una enorme hamburguesa

-¿Es en serio Helen? ¿Estás en Londres y quieres ir a un McDonald's? -me pregunta Marc, Chad había salido de la habitación sin decir nada

-Si me dirás esto, para qué me preguntas donde quiero ir -contesto frunciendo el ceño

-¿Que te parece el restaurante Cheyne Walk Brasserie? - el Cheyne walk que cosa?

-Claro, ya que no me quieres llevar a McDonald's...-digo, es en serio que quería una hamburguesa

-Si tanto quieres una hamburguesa lo puedes ordenar ahí -me dice riendo

-Bien, nos vamos? -pregunto al ver que no se habia movido de su lugar

-¿Planeas irte vestida así? - Que diablos...

-¿Planeas darme lecciones de moda?- pregunto ofendida

-Solo digo...

-Cállate, idiota. -bufo molesta, ni que estuviera tan mal vestida, tenía puesto una falda roja por encima de mi rodilla con una remera corta negra, el ríe y me abraza -Sueltame -digo con dificultad, en realidad no quería que me suelte

-Deja de decirme que haga cosas que no quieres que haga -me susurra en mi oído

-¿Nos vamos? -pregunto caminando a la puerta con los brazos de Marc en mi cintura ignorandolo por completo.

Habíamos llegado al estacionamiento con la misma facilidad que el día de la fiesta, ahora estábamos dentro de su Mercedes pero Marc frenó frente a una casilla de un ¿policía? Que esta en la entrada del instituto ¿Eso siempre estuvo ahí?

-¿Que haces? -pregunto viendo como Marc se bajaba del vehículo

-Necesito hablar con el guardia para que no nos delate -me dice, sobornar al guardia es lo que mi cerebro interpreta con sus palabras.

Una vez que sube de nuevo al vehículo sonríe y se vuelve a abrochar el cinturón

-¿Eso siempre estuvo allí? -digo mirando al guardia que habia salido a sentarse fuera de la pequeña casilla

-No, idea loca de mi padre al descubrir que me escapaba entre semana, pero al parecer el guardia se contenta con darle un poco de dinero...

-Me dices enserio? -pregunto interrumpiendo su historia de soborno

-Tranquila, relájate, no pasará nada.

-Estás loco -susurro

-Lo prohibido es más divertido -dice haciendo un baile de cejas que provoca que ría

-Ojos en el camino. -digo y de repente el auto empezó a ir cada vez más rápido, y es ahí cuando recuerdo que la última vez que me subí a un auto con Marc casi muero.
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Sólo olvida todo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora