16. Steter

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Peter y Stiles disfrutaban del día soleado en el parque. El mayor leía un libro en voz alta mientras la chispa dormitaba con la cabeza apoyada en su regazo.

De repente el lobo interrumpió su lectura y Stiles abrió los ojos.

No hacían falta las palabras. Stiles podía leer la felicidad del hombre en sus pupilas.

Contagiado por el arrebato de felicidad, el joven se levantó y plantó un pequeño beso en los labios del mayor.

— Stiles ¿Por qué estás besando a Peter?

— Bueno Scott estoy besando a Peter porque él es mi pareja.

— ¿Qué?

— Creo que me escuchaste.

— Lo hice pero aún no puedo entenderlo ¿Por qué querrías besar a un asesino psicópata?

— Es hora de dejar el pasado atrás. 

— ¡Stiles te prohíbo que sigas estando en una relación con Peter! — Peter ni siquiera le dedicó una mirada pero sus ojos parpadearon rojos por un instante. Por suerte, Scott estaba demasiado concentrado en Stiles para notarlo.

— Scott vos ya no sos mi Alfa. Además, al no ser un lobo tus ojos rojos sólo son incómodos. No me obligan a obedecer.

— ¿Cómo que no soy tu Alfa?

— Peter es mi Alfa y mi alma gemela.

— ¿Peter, Alfa? ¿Cómo lo sabes? ¿Cómo sabes que no te está engañando?

— La mordedura de apareamiento sólo reafirmó los sentimientos que teníamos.

— Puede ser un engaño Stiles.

— Deja que yo le expliqué Cariño. — respondió Peter levantándose. Su paciencia estaba alcanzando un límite. — Encontrar a tu alma gemela es el honor más grande que puede tener un hombre lobo y no debe tomarse a la ligera.
Como hombre lobo nacido jamás engañé a nadie menos en algo así.
De todas maneras, aunque no quieras creerme, si hubiera mordido a Stiles y él no fuera mi alma gemela la mordida lo habría matado.

— ¡Arriesgaste su vida! Maldito.

— Scott yo estuve consciente cuando esto sucedió. Él no me obligó. — Stiles que se había levantado junto a Peter se interpuso entre ambos apoyando su espalda contra el pecho de su compañero. — Mi chispa también me deja saber que él es mi alma gemela.

— No te creo. Puedes estar embrujado. Le pediré ayuda a la manada.

— La manada ya no existe Scott. Deberías poder sentir como ya no están los lazos de manada.

— ¡Se que ya no están pero creí que vos aún seguirlas a mi lado!

— Scott vos nunca estás conmigo. Siempre me dejas solo y nunca me respondes cuando te pido ayuda.

— Lo siento.

— Es demasiado tarde, debes irte.




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Teen Wolf: ONE - SHOTS IVDonde viven las historias. Descúbrelo ahora