Mi Falso Matrimonio (Parte 1: Amor A La Italiana )

Capítulo 9

-Increíble usted es el famoso Enzo Russo ¿Acaso la empresa te va presentar el dinero Isabella?.

-Más bien estoy apoyando a mi futura esposa.

Toda la sala se quedó en silencio, no podía creer las palabras de Enzo.

-Muy buena broma, por poco caigo en ella, es imposible que Isabella sea novia de alguien tan importante como Enzo Russo, además no se supone que estabas muy enamorada de Carlo.

Ver a Sofía burlarse así de mi, hizo que me diera mucho coraje y dije impulsivamente - No es broma, Enzo y yo somos pareja.

-Por favor Isabella pretendes que crea tal mentira, es imposible que alguien como Enzo sea novio de alguien tan patética como tú.

Enzo se coloco entre nosotras en señal de protección -Señorita le prohíbo dirigirse de esa manera a mi linda novia, además Isabella tiene todo lo que me gusta de una mujer, es sumamente hermosa y muy inteligente, cualquier hombre estaría feliz de tener una novia como ella.

-Vaya vaya al parecer no eres tan ingenua como creí hermanita, no se deje engañar Señor Russo por Isabella en el fondo es una mujer frívola e interesada.

-No te preocupes se distinguir muy bien ese tipo de mujeres pero Bel es totalmente transparente y única.

-Enzo vámonos no deseo seguir escuchando las tonterías de mi hermana.

Tomé la mano de Enzo y me dirigí a la salida del hospital.

-Le ofrezco una disculpa Señor Russo, le prometo que no volverá a pasar, solo que....

-Bel no es necesario que te disculpes, además acabas de aceptar nuestra relación.

-Yo estaba molesta con mi hermana por eso dije tal cosa.

-Mira Isabella ¿Por qué no aceptas mi propuesta? Yo puedo conseguirle a tu padre el mejor Doctor de toda Italia y costear la operación.

-Ya le dije mi respuesta, para mi el matrimonio no es un juego, por favor solo hágame un préstamo de dinero, prometo trabajar arduamente para devolvérselo, le estaré eternamente agradecida.

-No, ya te dije las condiciones, tienes que casarte conmigo Isabella.

-Creí que usted era un buen hombre.

-Y lo soy, pero también soy un hombre de negocios y no puedo dejar pasar esta oportunidad.

-Puede decirme la verdad ¿Por qué se quiere casar?.

-Esta bien, en pocas palabras mi abuelo Dante Russo me amenazo con quitarme al mando de todos los negocios Russo sino me casó pronto, como verás no puedo permitir tal cosa.

-Bueno ahora tiene más sentido el hecho que tenga la urgencia de casarse.

-Bien hacemos un trato, tu Isabella salvas mi puesto en la empresa y yo salvo a tu padre, ¿Qué opinas?.

Vaya que estaba en una situación difícil pero la vida de mi papá dependía de esa operación, no podía ser tan egoísta.

-Solo pido dos condiciones Señor Russo.

-Te escucho.

-Primero quiero una boda sencilla por lo tanto no deseo que nadie se entere que estamos casados, no quiero que piensen que solo estoy en la empresa por ser su esposa.

-Al principio puedo prometer ser discreto, pero tarde o temprano se van a enterar, ¿No crees?.

-Por el momento solo deseo que solo nuestros familiares más cercanos estén al tanto de nuestra matrimonio.

-Esta bien y la segunda condición.

-Dormir en cuartos separados.

-No, Isabella si dormirnos en cuartos separados mi abuelo se va dar cuenta que es un matrimonio arreglado, pero prometo darte tu lugar y no tocarte si es que no lo deseas.

Vaya es una situación complicada, dormir a lado de Enzo con solo pensarlo me siento muy nerviosa.

-Esta bien, por favor salve la vida de mi papá.

-Claro solo necesito hacer unas llamadas y quedará todo solucionado, no te preocupes tu Papá le espera una larga vida.

-Gracias Señor Russo.

-Por cierto recuerda que ahora tienes que llamarme por mi nombre, nada de señor Russo, me voy pequeña.

Enzo froto su mano sobre mi cabeza, me dedico una dulce sonrisa y se fue, por alguna extraña razón sentí que ya había vivido ese momento.

Enzo.

Al dejar a Isabella decidi hacer lo prometido, di la orden al hospital de programar la cirugía de mi futuro suegro y deje claras indicaciones al personal del hospital para que sean rápidos ya que la vida del Señor Bianchi esta en peligro.

Tengo muchas asuntos por solucionar y debo regresar a casa, dejaré a Bruno que se encarge de pagar al hospital los gastos del señor Bianchi.

Isabella.

El médico se acercó a mí -Señorita Bianchi.

-Sí doctor.

-Ya tenemos todo programado, mañana temprano su Padre será llevado al quirofano, no se preocupe uno de los mejores cardiologos será el responsable de la operación del señor Bianchi.

-Muchas gracias doctor.

Vaya si que Enzo es un hombre muy influyente, bastó solo una llamada para que enseguida se solucionara el problema de mi Papá, ahora solo me queda tener mucha fe, para que mi Papá sobreviva.