¿Por qué yo?

CAP52

Mindy Miller POV.

-¿Ángel? ¿Sigues viva?-dijo Matthew moviéndome, o tocando mi trasero con su dedo del pie ¿Por qué? Recuerdan que alguien es virgen aquí… el desvirginado tiene su encanto… Aja… ustedes saben a qué me refiero.
Amanecí en la cama echa un león viejo cansado por atrapar a su presa.

-Sigo viva.-dije levantando la mano, él rio.
-Ya está el desayuno ángel, báñate y te espero en la isla de la cocina.-dijo besando mi cabello para después oír sus pisadas y dejarme ahí tirada en la cama con solo una sábana tapándome.

Tome la sabana y salí directamente a mi cuarto corriendo para cerrar rápido e irme a la ducha con mi ropa lista, no me mire en el espejo, no quería ver mi cara de satisfacción después de esa noche de sexo salvaje, está bien, mal chiste.

Salí de la ducha, limpia para empezar un buen día, no tenía tanto tiempo solo el día hoy y de mañana para regresarme de nuevo con Emma, no quería separarme de Matthew pero hay una niña en medio que me necesita y Matthew y yo no hemos decidido nada.

-Hola chico.-dije guiñándole un ojo mientras me sentaba enfrente de él, Matthew pone los ojos en blanco y aguarda una sonrisa.
-Hola chica, aquí está tu comida.-dijo pasándome un filete con puré de papa y pasta alado.
-¿Comida? Y el desayuno ¿Qué le paso?-pregunte tomando una cucharada de puré de papa.-Delicioso.

-Son las dos de la tarde Mindy.-dijo Matthew mientras comía tranquilamente enfrente de mí, me mira confundido.- ¿Algún problema?

-¡Me salte el desayuno! ¡Ese es un grave problema! ¡No cambio el desayuno ni por sexo!-dije mientras agitaba mi cuchara enfrente de su cara.
-¡Perdóname, por tener sexo conmigo y saltarte el desayuno!-dijo Matthew gritando alterado.
-Perdonado.-dije sentándome como si nada hubiera pasado y una sonrisa diabólica.-Pero me debes un desayuno.
Matthew bufa y asiente.
-Mindy…
-Mande.-dije comiendo el último pedazo de filete, sabía lo que vendría y no quería participar en esto.
-¿Qué haremos?-dijo Matthew mirándome seriamente.
-Tendré que regresarme a California Matt, Emma está ahí y mi vida, yo te quiero en ella pero mi hermana no la puedo dejar sola después de tanto tiempo.-dije soltando todo de un fluido para nada apetitoso.
Matthew asiente, mientras piensa en todo lo que le dije.

-Entiendo, pero no puedo salirme de la empresa de mi primo.- se encoge de hombros.- Le prometí estar ahí meses y solo me falta menos de un mes para regresarme a California contigo.- sonrió, en una desprevenida ya tenía mis manos en sus manos.- Te juro que si me esperas me harás el hombre más feliz del universo y tú serás mi universo.
Mi duende vomitaba arcoíris pero era feliz como su dueña.
Asentí y Matthew se pará de un salto y viene a abrazarme.
Se despega un poco de mí y me mira con una sonrisa besando mi nariz.
-¿A dónde quieres ir ángel?-dijo sonriéndome, le devolví la sonrisa *Tengo una idea* pensé mientras mi duende me miraba con diversión.

Parque de diversiones…

-¿¡Enserio Mindy!? De todas las ideas esta fue tu favorita.-dijo Matthew vomitando por segunda vez en el día.

-¿Qué esperabas, un paseo romántico por el parque, una velada romántica? ¡Por favor! Mejor consíguete una muñeca inflable.-dije mientras le apuntaba con la arma de juguete a la nariz del payaso haciendo que prenda.- ¡Le di!-dije saltando.