CAP41

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-¿Qué te parece ese vestido?-dijo Abby mirándose en el espejo sonriendo.
Oh si, era el grandioso día para comprar tu vestido de la última fiesta. Mientras estábamos nosotras en la tienda los chicos estaban comprando comida china para vernos en el departamento de Matthew.
-¡Abby, por deus! Ese esta perfecto para ti.-dije desesperada, mirando como Abby se miraba dudando.
-Pero…
-Pero nada, ese me gusta para ti, con tacones y peinado te verás estupenda-dije sonriendo forzadamente.
-Lo dices porque ya quieres ver a Matthew-contesto lanzándome dagas con los ojos.
-¡Por la comida Abby! ¡Por la comida! Me trajiste sin desayunar apenas me iba hacer de comer y tu apareces con tu cara de culo que siempre te cargas-dije cabreada y miro  a mi alrededor mirando puras chicas como locas comprando vestidos, hasta que mi vista queda en un hermoso vestido rojo colgando provocándome con su tentadora tela.
Ignoro las quejas de Abby y voy esquivando a las chicas hormonales comprando y chillando como puercos *Vas hacer mío, vas hacer mío, vas hacer mío* repetía cada vez más cerca.
Estire mi mano para tomarlo, lo tome al mismo tiempo que otra chica *No ahora perra*pensé mirando a la chica con más polvo que las donas.
-Perdón pero yo vi ese vestido primero-dije sonando amable, mientras la zorra hacia bombas con su chicle ignorándome.
-Lo vi primero yo-dijo guiñándome el ojo, estirando el vestido más a su lado pero no lo deje fácilmente.
-Mientes.-dije fría, jalando el vestido a mi lado.-Quita tus manos de él.

Ya se imaginan como termino esto…

-¡Por Esparta!-grite con una espada y un escudo cubriéndome, corrí hasta la hormonal.
Nah mentira.
Pero si termino así
-¡Quítale las manos, zorra!-dije jalándole el cabello.
-¡Nunca!-contesto arañándome la mejilla.
*Esta muera hoy*
Solté el vestido para tirarme encima de la hormonal haciendo que el vestido caiga a una distancia donde no tenga daños.
Le di una cachetada ya que si llego darle un puñetazo, pasare el día en la cárcel *Pero tendrás el vestido* pensé, buen punto.
La chica intentaba quitarse encima de mí pero no lo lograba, cerraba los ojos y golpeaba para todos lados.

-¡Mi padre se enterara de esto!-dijo.
Ignore sus comentarios hasta que vi una chica agarrar ‘mi’ vestido, me quite encima de la hormonal, gatee corriendo hasta que la hormonal me agarra el pie haciendo que caiga.
-¡Perra!-grite intentando levantarme-¡Nos roba el vestido!-dije borrando la sonrisa de la chica y siguió a donde apuntaba mi dedo para después correr. Me pare enseguida y le seguí el paso, vimos a la chica numero dos con una sonrisa que le quitamos cuando nos vio correr en estampida hacia su lado, la chica numero dos grito y corrió a la caja registradora, pero alguien le puso el pie haciendo que caiga.
-¡Gracias!-le dije a Abby, Abby me guiña el ojo.
Empuje a la hormonal para tener más ventaja, llegue con la chica número dos y le arrebate el vestido, levante las manos en forma de victoria hasta que algo casi me pega era un ¿Tacón?
Pasa otro a mi lado, mierda si era un tacón aventando por la hormonal.
-¡Estúpida!-grite corriendo a la caja registrado pero había fila *Doblemente mierda* esto terminara aquí.
Solté el vestido haciendo que caiga al suelo.
La chica hormonal me lanzo un tacón cayendo en mi zona donde tendré espermas, somos mujeres pero aun así duele hasta el demonio.
La hormonal llego a mi lado e intento agarrar el vestido pero levante la rodilla estampándosela en la cara.
-¡Mi nariz!-chillo mientras se llenaba de sangre.
-Hora de dormir zorra.-dije estampando mi puño en su quijada haciendo que vaya directo al suelo.

Como verán hice un trato… Con los policías, compre mi vestido para después encerrarme en la celda, ya que había golpeado a la hija de un millonario.
Lo único que tengo que decir es *¡Tengo mi vestido putitos!*

-Tienes una llamada para hacer-dijo el oficial abriendo la celda.
Agarre el teléfono alámbrico puse unas monedas y al segundo pitido contestaron.
-¿Hola?-dijeron en la otra línea.
-Carl, soy Mindy y estoy en la estación de policías por golpear una chica por un vestido.-dije oyendo como respiraba profundamente.
-Luego me explicaras eso con más detalle.-dijo dando una pausa.-Cariño tardare un poco en ir contigo, el tráfico a estas horas es aterrador.
-Está bien, gracias Carl…
Se cortó.
Colgué el teléfono, recargue mi frente en el, hasta que alguien me agarra de la espalda me pongo tensa.
-Entra a la celda.-dijo el oficial.
Me empujo en ella para después cerrarla.
Me quede sentada esperando, sabía que Abby estaba intentando parar los oficiales para no ir con ellos pero vio unos aretes que se le “corto el habla” lo sé, es una gran amiga.
-Ya vete, pagaron tu fianza.-dijeron abriendo la celda.
 ¿Cuánto dure sentada? No llevaba ni treinta minutos.
-¿Quién la pago?-dije agarrando mi celular y mis cosas que me quitaron antes de entrar a la celda, junto con mi vestido.
-Un señor, no nos dijo su nombre.-dijo el oficial encogiéndose de hombros.-Tienes suerte a la próxima te hubieran metido demanda niña.-dijo el oficial refiriéndose a la chica golpeada.-Adiós.
-Adiós.-dije saliendo de la estación confundida.
Mi mirada cae en hombre que está en el barandal de las escaleras fumando tranquilamente mirándome, no lo pude ver bien ya que tenía lentes de sol y una gorra.

Pase nerviosamente alado de él para después tomar un taxi e irme a mi apartamento.

Llegue exhausta, me fui a lavar la cara vi que tenía un rasguño en la mejilla *Perra* pensé mirando el rasguño en el espejo.
Agarre mi celular para llamar a Carl y decirle que ya salí pero tenía un mensaje *Ahorita lo veo* pensé marcando el número de Carl.
-Ya voy para allá.-dijo oí como encendía el auto.
-Gracias por todo Carl pero ya salí-dije agarrando el vestido verificando que no tenga ningún rasguño o sangre de la hormonal.
-¿Quién pago?-dijo confundido.

-Ni yo lo se.-conteste colgando el vestido en el armario.
-Qué raro pero lo bueno es que ya saliste Mindy, te veo más al rato, tengo que ir con Dylan, besos cariño.-dijo para después colgar.
Finalice la llamada y me metí a mis mensajes, abrí el mensaje.
***
Después me agradecerás, yo tengo que quedarme contigo, no los policías, nena te verás hermosa con ese vestido, te veré en el baile querida’
***
Apreté mis puños quedando los nudillos blancos.
Tiene razón lo de la policía corrí una suerte que no me reconocieran pero esto terminara aquí en California, no en Washington.
**
-¿Por qué no fuisteis al departamento de Matthew?-dijo Ryan entrando a mi apartamento.- ¿Quién te hizo ese rasguño?
-¿Abby no les dijo nada?-dije con la mirada pegada a las flores que me había traído Matthew.
-Abby no fue, Liam se la llevo a su casa para cuidar los dos juntos a su hermanita.-dijo Ryan bufando.
-Ryan tengo que contarte algo pero no aquí.-dije caminando hacia a mi oficina sentí sus pasos detrás de mí.
-Está bien.-contesto dudando.
Abrí la puerta y lo hice pasar se sentó enfrente del escritorio, agarre la botella de whisky, serví dos bazos de cristal para dejarlos en el escritorio.
-Gracias.-dijo tomando el whisky.

Tome asiento enfrente de él y puse mis manos arriba del escritorio tomando el vaso jugando con el líquido balaceándolo pero sin dejar que caiga ninguna gota.
-Quiero que me ayudes Ryan.-dije con mi atención ahora en él.-Pero te contare la verdadera historia de Miller y tu decidirás pero esto de aquí no sale.-voltee a ver la puerta cerrada con llave.

¿Por qué yo?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora