CAP25

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-Vamos Mindy-dijo alguien saltando en la cama, haciéndome saltar apropósito.

-Ya calla-dije con voz ronca de apenas levantarme, me di vuelta quedando una posición muy cómoda para seguir durmiendo.

-¡Hay we! Tú no eres Mindy eres un troll con esa voz-dijo riendo mientras saltaba, solté una sonrisa con su idiotez.

-Que te den Matthew-dije frotando mis ojos para ver atreves de las lagañas mañaneras, cuando pude ver mejor visualice aun Matthew con una sonrisa saltando en mi cama, noto mi mirada y dejo de saltar mirándome.

-Buenos días brujita-dijo dándome las manos para pararme en la cama.

-Bruja tu Punky-dije ofendida riendo, parándome en la cama, Matthew soltó una risa y empezó a saltar, todavía me tenía agarrada haciéndome saltar con él, no sé cómo mi cama puede soportar tanto peso, sentía que se iba a desbaratar en cualquier instante.

Reímos, cantamos saltamos los dos, el brillo del sol entrando por la ventana y oyendo como una señora regaña a su hijo por ponerse un piercing que para ella era hacer un pacto con el diablo. Paramos de saltar un poco cansados, Matthew bajo de la cama y me mira.

-Arréglate pasare por ti para irnos a desayunar e irnos a la escuela-dijo empezando agarrar sus pertenecías para meterlas en la mochila, ya estaba vestido Matthew, bueno solo le faltaba ponerse sus botas y su camisa para irse a la casa de Carl o su departamento.

-Está bien-dije bajando de la cama, empezando a acomodarla.

-Deja te ayudo-dejo sus cosas en la silla recargable que ya estaba las cobijas y las almohadas dobladas perfectamente en la mesita.

Después de ayudarme, se despidió de mí para irse, me fui a la ducha con mi ropa lista. Me metí a la ducha sintiendo las gotas despejarme de todo lo que me rodea, salí de la ducha lista para empezar un día más, me cambie y me arregle sin ganas, ya que la cara la tenía hinchada después de lo que paso…

El timbre de la puerta me saco un susto, recuperándome ladee la cabeza volviendo a la tierra, me puse el brillo que me faltaba para terminar y guarde todo, fui a abrir la puerta encontrándome aun Matthew con un girasol gigante acompañándolo, puse mis manos en la boca por la sorpresa, se veía tan tierno con ese gorrito de lana y el girasol.

-La vi solitaria en el puesto y pensé que serias una gran compañía, contigo las dos brillaran juntas con sus colores alegres-dijo dándomela.

-Gracias-dije sonriendo, lo abrace y me estrecho más con él.

-De nada, altota-dijo haciéndome soltar una risilla-Bueno vámonos-dijo dándome la mano.

-Espera-solté su mano para meter el girasol en un tarro, llene el tarro con agua  y puse el girasol en el tarro dando un buen aspecto a la cocina, agarre mi mochila ya con los útiles del día y me fui alado de Matthew.

-Listo-dije agarrando su mano, entrelazando los dedos, me dio una sonrisa y nos fuimos caminando hacia una cafetería cerca.

Pedimos un café y una rosquilla, nos lo llevamos comiendo hacia la escuela.

**

-¡Mindy!-dijo Keith al verme, me abrazo con cariño y me dio un beso en la coronilla, oí un gruñido departe de Matthew.

-Que gusto verte otra vez-dijo Keith sonriéndome dejándome libre de su agarre.

-Lo mismo digo-le di una sonrisa y nos fuimos todos adentro del salón encontrándome al grupo de los idiotas y una anímala que es Abby riendo.

-¡Por fin se digna a aparecer!-dijo Finn, rodeo los ojos y le saque el dedo del medio-Y sigue siendo la misma-dijo sonriendo más.

-Mindy que gusto verte otra vez, necesitaba pelear con alguien-dijo Finn susurrando para que nadie más oiga, reí.

-Sí, también a mí me hacía falta pelear con un cavernícola.

-Pero un atractivo cavernícola-dijo acomodándose la chamarra de cuero para después aventar una radiante sonrisa aun grupo de chicas, haciendo que se sonrojen y empezaran a cotillear sobre él, rodeo los ojos y les grite a las chicas con hormonas de pollo.

-¡Tiene sida!-dije guiñándole un ojo, ellas corrieron alejándose lo más lejos posible de él. Finn cambio su sonrisa, mirándome asesinamente.

-¡Que te den Mindy!-dijo girándose con el grupo, solté una carcajada y apoye de brazo en su hombro sonriendo.

Los demás chicos me saludaron y me sentía feliz por saber que les importaba, era como una familia de chicos que apenas saben respirar y Abby mi mejor comadre.

Las clases empezaron, entre papelitos aventados, guerra de borradores, la maestra de literatura que necesitaba ayuda con una caja y se llevó a Matthew, un Matthew llegando con una cara de pánico, chicas huyendo de Finn, Jordán y Keith a mi lado riéndose por el papel que tenía en el trasero el maestro que le habíamos pegado que decía: “Es touche”, Ryan coqueteando con la maestra Georgina queda química y Abby y Liam siempre juntos.

-¡Maestro!-dijo Finn recibiendo la atención de todos y el maestro.

-¿En que lo puedo ayudar Hampton?-dijo el maestro con el ceño fruncido por interrumpirlo.

-Tiene en el culo un papel-dijo sonriendo con satisfacción.

Lo mire con ganas que mis ojos lo hicieran añicos.

El maestro agarro el papel y vio lo que tenía, su cara se puso rojo de coraje y vergüenza, le dio vuelta al papel.

-¡Miller!

-¿Qué pasa querido profesor?-dije con una mirada de gatito regañado.

-¿Por qué aparece su nombre detrás del papel y un apunte mío ya calificado?

Me di una bofetada mentalmente, nota: “Revisar al reverso de la hoja antes de hacer una broma”.

Finn soltó una carcajada y el maestro le dio una mirada asesina, haciendo que poco a poco cierre la boca.

Matthew se daba golpees en la mesa de la butaca por mi estupidez.

Ryan me daba una mirada de estas jodida.

Jordán y Keith me miraban con lamento, y los mire con cara de muéranse por no ayudarme.

Abby estaba en el baño.

Y Liam durmiendo con baba cayéndole mientras Finn le intentaba atinar darle en la boca.

-¿Qué espera señorita Miller?-dijo con los brazos en la cintura.

-Puedo jurar que ese papel lo arrancaron de mi cuaderno y pusieron eso para culparme-dije exaltada haciendo que me crea, el maestro no me creyó *Valí caca*

-En la dirección a la salida-dijo para finalizar su clase.

¿Por qué yo?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora