CAP18

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Después de que viniera Carl y Dylan nos fuimos a mi departamento, yo a hacer mis deberes y Matthew a holgazanear y acaparar todo mi sofá  y con el colmo trajo a Punky ¡Ese pinche Punky estaba en mi sofá! junto a su dueño, ya comprendo el dicho de que cada dueño se parece a su mascota ¿Algo así no?

Estaba haciendo la tarea que me dejo de castigo la anciana de literatura que era “No debo insultar a sus mayores” y si así como leen esa anciana me ama tanto que me puso hacer eso porque corregí mi nombre ¡Solo por eso! Ya me harte de sus clases, luego hablare con ella personalmente para arreglar los asuntos *No me refiero al asunto casi echo de atropellarla* solo hablar como la gente civilizada.

Mientras terminaba las planas, aprovechaba para tirarles palomitas a los monos que se quejaban, tenía que ir al gimnasio y con estos dos “ayudándome” en no molestar iba a terminar más rápido *Aja…*

***

-Matthew tengo que irme al gimnasio y quiero ver todo esto limpio cuando llegue o sino no vuelves a venir a mi departamento ¿Me oíste?-estaba enfrente de él con mis brazos en mi cintura tapándole el televisor, me sentía como una madre regañando a su hijo y eso se sentía ultra mega genial *Ok no tanto, no tanto, exagero* …

-Si mama… digo Mindy, si Mindy está bien, solo deja acomodo esto-dijo Matthew recogiendo el tiradero y Punky estaba bueno en el balcón esperaba ver su suicidio pero nada solo parecía estar comiendo mis plantas *Maldito Punky*, Matthew acomodo todo en menos de treinta segundos-Vámonos-dijo poniéndole la correa a Punky y nos dirigíamos a la puerta.

Todo el camino fueron pláticas sobre como un mundano trae de mascota un puerco  y con estilo roquero, mucha gente lo veía raro y las putas con admiración  y coquetismo a Matthew, Punky creo que les caí mal las mujeres regaladas ya que chillaba e las quería “morder” cuando se les acercaba en momento de querer coquetear con el dueño *Creo que Punky me está cayendo mejor* entonces el odia a…

-¿Punky odia a Sharmin?-dije mirando a Matthew con una sonrisa relajado.

-Si la odia, deberías amar a Punky por eso-dijo agarrando a Punky cuando llegamos al gimnasio.

-Se está ganando mi amor ese Punky, si solo dejare mis plantas y a mí existir más sobre la tierra-dije mirando a Punky mientas nos mirábamos desafiantes ¡Me dirán loca pero veo como ese mini-pig como un humano por su manera de ser! *No estoy loca lo juro*

-¿Quieres que venga por ti terminando tu entrenamiento?-me dijo Matthew con toda su atención, no sé pero mi duende hacia el ritual de la felicidad con el señor Monopoly, que era un stripper con dinero de su juego.

-No gracias Matthew pero no, estaré muy cansada que solo querré una ducha y dormir-dije imaginándome ya en mi cama descansando *Muy hermoso para ser cierto*

-Bueno está bien-dijo tambaleándose con sus piernas-Te veré

mañana Mindy-dijo regalándome una sonrisa y un beso en la mejilla con un Punky aplastado por los dos.

-Adiós Matt y Punky-dije sobándole la cabeza a Punky, parece que empezamos a tener química.

-Parece que le agradas ya más-dijo soltando una risilla Matthew.

-Sí, ya vio que no soy una de tus zorritas-dije guiñándole el ojo a Punky.

-¿Qué?-dijo Matthew confundido, con una ceja levantada.

-Nada olvídalo, adiós-dije entrando más rápido al gimnasio.

*************

-Mindy estuvisteis muy bien, parece que no fue mala decisión meterte al equipo, te veré mañana chica-dijo el entrenador de kickboxing viendo mis avances e peleas, hoy si fue un día agotador con sus calentamientos y las peleas que me ha hecho pasar hoy, día agotador el de hoy, fue lo único que logre pensar con capacidad después de tanto agotamiento excesivo.

-Gracias entrenador-dije sonriente, quitándome el sudor de mi frente con la toalla pequeña que traigo en mi mochila.

-Dime Jeff, chica-dijo sonriente-Te veré pasado mañana.

-Adiós Jeff-dije saliendo con una sonrisa triunfadora.

Salí el gimnasio y el frio me ataco en la pura jeta, no tenía abrigo así que para mantener calor me puse a correr con lo poco de batería que me quede en el celular y mis hermosos audífonos que tenía.

Llegue cansada a mi departamento, solo arroje mis cosas y me fui directo a mi ducha, terminando me fui a acostar a mi hermosa cama que me pedía a gritos como yo a ella, como verán fue amor a primera vista ella me miro, yo a ella y pum surgió de un de repente ese fue nuestro hermoso amor desde ahora sigue ahí fluyendo como siempre, caí en los brazos de Morfeo soñando con unos ojos verdes con grises y ese duende estaba muy feliz por eso.

¿Por qué yo?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora