Si la gente que me veía pasar por la calle se asustaba por mi mal humor, es debido a mí generoso primo Kim Seokjin y dudo que lo crean ya que es un pan de Dios, entre comillas.
Bueno, sabía que eso ocurriría por mí primera falta sin siquiera hacer una mísera entrevista, sin embargo, desconocía el día y la hora, porque sería más que lógico que algunos locales no estarían a disposición, mala suerte que la heladería es la excepción. Levantarme temprano un domingo no estaba en mis planes, menos casi ser atropellada por mi auto a manos de Kwon y al final estar en una cita con la ropa mojada, de todos modos, fue estupenda.
Además por lo que escuché, iríamos a la empresa de los raperos ya que Yoongi nos invitó a darle una miradita al set, entonces pongamos un cincuenta de felicidad y el otro de quiero matar a quien sea y se quiera pasar de listo. El día de ayer, lo concluí feliz, espero también este.
–Dime, ¿qué es esto?
Una chica de una estatura como la mia, a diferencia que me sobrepasa por unos cinco centímetros, arrugaba un lado de un mantel para mostrárselo a un chico. Estoy hablando de Minying, como mi otra amiga la salvaje, es menor por dos años y cada que se dan cuenta que no existe nada de rivalidad tanto entre ellas como en su negocio, piensan que es poco creíble. Las dos parecen gemelas; a la edad de veinte logran sobrellevar esta gran carga, miden lo mismo, cuando quieren me empiezan a joder, me tachan como la atrae problemas, ¿qué puedo decir?, es un don.
Sin dejarlo fuera, Hyun-Su, su hermano, a quién le está reclamando por lo que puedo escuchar, una manchita en aquella tela. Él la mira tan sereno, hasta con diversión por lo absurda que casi siempre es.
Paso detrás, queriendo ser desapercibida, porque se nota que la puerta siendo abierta les valió una hectárea de verga. Doy unos toques al mostrador, ahora sintiendo un tremendo hambre con solo observar los distintos colores.
–Bienvenida a, ah, eres tú.
Le doy una sonrisa, tratando de actuar linda poniendo la punta de mi índice en mis mejillas, logrando disgusto en Ying.
–¿Esperabas alguien más?
–Si, a una disque estupenda trabajadora, ¿conoces a esa persona?
–Una tal Choi Seohyun, ¿no?
-¡Hyuuuuuuuun!
Rodó los ojos al mismo tiempo que me dejaba abrazar por ese grandulón, casi me saca el aire joder. En serio, a veces pienso que estos dos con los otros de la cafetería, son familia.
–Me llegó el rumor que casi peleas con una rubia.
–La de ese vídeo viral – vaya, no están tan desactualizados.
Que al principio no se refiriera a esa grata anécdota, me confirma que la del chisme fue Ha-Yun, y Ha-Yun se lo dijo a Jin, y Jin se lo dijo a los chicos, y los chicos me reprendieron. Si no he venido con mi auto, es porque me lo decomisaron, no puedo conducir por una regla muy estricta, solo puedo entrar a él si voy en el asiento de copiloto y, ¡perfecto!, que nadie se anote a ser su chófer. Y encerraron a Jungkook para que no se le ocurriera, como ellos dirían, traicionarlos.
–Te metes en problemas, dime, ¿tengo opción contratarte?
–Lo que mi hermana quiere decir, es que si vuelves a hacer lo mismo de esa vez, no será para nada paciente.
–¿Más?
Era una tarde tranquila cuando ocurrió eso; una chica desde que había llegado, me despreciaba y cuando mi novio apareció para visitarme, la muy estúpida trataba de tocarlo a como dé lugar. No tuve más remedio que vertirle su preciado helado de yogurt light en su cabello.
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Juntos ²| Jungkook
Hayran KurguY pasaba lo que más temía Jungkook: perder a Choi Seohyun. -No copias ni adaptaciones -Heterosexual -Necesario leer primera temporada: Llegaste a mi vida -Hermosa portada y baner por: @wxnniexx ✨