CAP 2: Leche chocolatada

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CAPITULO 2: Leche chocolatada

JEREMITH SIMPSON

Golpeó dos veces la puerta de la casa que antes era de mis padres, ahora solo de mi madre.

Al abrir la puerta y veo a mi madre sorprendida, pues no le avise de mi visita.

—hola cariño, te esperaba el viernes, no hoy- se acerca y me abraza. Todos los viernes tenemos la costumbre de que después de mi turno en la cafetería, vengo con mi madre a ver películas antiguas o a pasar tiempo con ella. Si por mi fuera estaría con ella todos los días, pero el trabajo no me lo permite

Entro a la casa y veo la vieja caja de fotos y recuerdos de papá - 

—Mamá —susurro cerrando mis ojos—, sabes que que esto no te hace bien mamá  —me arrodillo recogiendo las fotos para devolverlas la caja.

—Hijo, se que te molesta, pero...es inevitable —su voz se quiebra, me pongo en pie rápidamente y la abrazo.

Hace cinco años perdimos a papá a causa de un infarto. Fue tan difícil poder superar aquel momento, sobre todo cuando no tienes mucha ayuda de tu familia, pues tanto la familia de mamá como la familia de papá nunca se han llevado bien y luego de que mamá y papá se casaran, la parentela de cada uno se fue separando en conflictos. Para mamá es aun mas difícil, papá siempre fue su mano derecha, mamá vivía por el, y sobre todo mi madre sigue enamorada de el.

—Lo se, pero sabes que a el tampoco hubiera gustado que estés así  —La estrecho aun mas en mis brazos. Un tiempo después de la muerte de papá, me prometí que cada abrazo será como cuando era niño y me refugiaba en los brazos de mis padres—. Ya se —me separo y tomo sus hombros para que me mire—, haremos todo lo que papá quería que lográramos ¿Qué te parece?.

—Te pareces tanto a el —pone una mano en mi mejilla, ladeo la cabeza hacia su mano buscando mas mimos y sonrió con los ojos abiertos—. Me parece genial  —baja su mano delicadamente.

Mamá se va hacia la cocina 

¿Leche chocolatada? —asiento varias veces como un pequeño niño saboreándome desde ya los labios.

—Claro que si 

Desde niño esa a sido mi bebida favorita, recuerdo perfectamente como en las tardes mamá compraba bizcochos y nos preparaba la leche con chocolate, así pasaba el resto del día con mis hermanos frente a la televisión, viendo cuanta caricatura transmitiera, 

—Mamá, ¿Cómo conociste a papá?

Ella sonríe mientras saca los ingredientes de los gabinetes de la cocina.

—tu padre era un chico demasiado brillante e inteligente, el mejor de nuestra clase, por otro lado yo era nueva en la escuela y cuando lo vi quede flechada —que coincidencia—. El era demasiado centrado en sus estudios y no se relajaba ni un segundo. No hablaba de otra cosa que no fuera el colegio, así que podrás imaginar que tampoco hablaba sobre su vida y mucho menos sus sentimientos. Era algo así como lo que llaman, "un nerd" —hace comillas con sus dedos, yo suelto un pequeña risa por su gesto—, mis sentimientos hacia tu padre siguieron creciendo, pero lo que yo no sabía es que los sentimientos eran mutuos —mamá empieza a batir la leche y sonríe mientras mira como se mueve el liquido dentro del vaso—. Así fue cuando un día tu padre me empezó ah hablar de otra cosa totalmente diferente a la escuela y bueno, nos confesamos nuestros sentimientos en un recreo.

Ella se estira entregándome el baso y da media vuelta volviendo a poner todo en su lugar.

—Que lindo 

—Fue lo mejor —contesta con nostalgia acariciando el meso de la cocina— ¿Cómo vas en el trabajo?

Me apresuró a tragar la bebida para contestar.

—pues bien, todo ajetreado como siempre y antes de que preguntes, Alan y Emma también se encuentran bien. Su padre quiere abrir otra local, quiere crear como una franquicia.

—El padre de Alan es un gran hombre— se sienta al frente mío en el comedor—. ¿Qué hay de nuevo? - siempre le eh tenido gran confianza a mi madre, pero aun así me da un poco de vergüenza hablar sombre mis intereses amorosos. Igualmente no es como si fueran numerosos.

—Pues, mamá —ella me mira atenta—. El lunes conocí a una chica - ensancha su sonrisa. Su pregunta obviamente no habia sido por pura curiosidad, ella conoce bien a su hijo—, es realmente bella, pero solo la eh visto dos veces en breves momentos.

—Ojalá la puedas conocer bien, y que sea una buena chica —asiento mientras le doy otro sorbo a la bebida—. No olvides que debes ser todo un caballero, que siempre debes ser respetuoso y que ella debe amarte tal como eres —asiento rodando los ojos divertido.

—Si señora —digo riendo. Miro mi reloj y ahí recuerdo que mañana tengo doble turno—. Mamá, ya me voy, debo de hacer un par de compras para el apartamento y para Teo —ella asiente.

—¿Cuándo traerás a Teodoro? Sabes que amo a ese perro —se acerca para abrazarme.

—Lo traigo... ¿El viernes? —ella asiente feliz.

—Esta bien cariño —caminamos hacia la puerta la abro, mamá  retorna el abrazo pero esta vez deja un beso en mi mejilla—. Nos vemos, cuídate - ella se apoya en la puerta - te amo.

—Yo mas mamá, adiós —me despido y me voy al supermercado.

•••••••••

¿Una bolsa pequeña de comida para perro por veinte dólares? ¿Es enserio? Dejo la bolsa en su sitio y empiezo a buscar otra  mas barata entre la gran estantería del supermercado.

Me voy a la caja registradora, y empiezo a pagar todas mi compras.

Luego de pagar un gran cantidad por pocos productos (lo típico) me dirijo a mi casa, pongo mis audífonos con música y empiezo a caminar. Y suena "Oh darling", la misma canción de ringtone que tenia aquella chica. Y como si todo se tratara de algo a apropósito, la veo caminando con el mismo libro del primer dia que la vi.

Quito un audífono de mi oído mientras la veo caminar, reacciono tomo el celular, lo pongo en cámara, y tomo una foto. Lo se, no está nada bien, pero así quizá pueda conseguir su Instagram o algo por el estilo. he visto sitios del internet donde con una foto logras obtener su usuario en las redes sociales.

Ella sigue su camino y hasta que la pierdo de vista yo sigo el mío hasta mi apartamento.

•••••••

—¿¡Le tomaste una foto!? —inquiere sorprendido Alan casi en un grito—. Eso es muy atrevido para venir de ti, ahora si pareces un psicópata.

—Quieres bajar tu voz, me vas a dejar sordo, además estoy seguro que si sigues hablando así de fuerte hasta los vecinos escucharan —digo bajándole volumen a mi celular.

—Lo siento. Pero enserio, estas loco —canturrea por la línea telefónica dándole un tono mas dramático a su voz.

—No exageres solo fue una foto, quizá me ayude a conseguir sus redes sociales.

No estoy loco, solo es interés...¿o si?

—Esa chica te trae de cabeza —dice riendo—. Jeremith ya tengo que colgar, mamá me llama —logro percibir los gritos de la señora Proum llamando a su hijo—, adiós, nos vemos mañana.

—Adiós —cuelgo.

Me tiró a la cama y respiro hondo mientras pienso en la foto y en la chica del libro recapacitando realmente si lo que he hecho es una locura. lo extraño es que si otra persona lo hiciera seguramente le cambiaria su nombre a "Lunático", pero cuando la vi esa idea no sonó tan descabellada.


Editado #1

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