Solo Un Café Más

CAP 7: Futbol y Rechazo

CAPITULO 7: Futbol y Rechazo

JEREMITH SIMPSON:

La semana paso. las visitas de Martina son más frecuentes, solo entra, ella pide algo diferente todos los días y se sienta a leer o simplemente a escuchar música a ver cómo pasa la gente por la vitrina. Hace poco pudimos intercambiar números y hablamos diario.

converso a veces con ella y en mis horas libres salimos a almorzar y a conocernos mas. Aprendí que martina es hermosa tanto adentro como por fuera, donde sus ocurrencias te alegran cualquier tristeza, donde su voz es un tipo de magia que me saca de esta realidad.

Le comenté a Alan y a Emma sobre el tema de la practica Futbol, seguramente Alan pensaba que bromeaba, pues en cuanto le dije soltó grandes carcajadas, haciendo que todos los clientes de ese día nos mirasen con incomodidad. Pero no, ahora estoy a segundos de bajarme del carro para practicar el deporte que me traumo de pequeño.

—¿Estás seguro? —cuestiona Alan mirándome atentamente, mientras yo bajo del auto y empezar a caminar hacia una de las tres canchas de Futbol.

—Si, ya te lo dije, es algo que papá quiso que hiciera —digo de nuevo intentando que mis propias palabras me convencieran. 

—Eso lo entiendo, pero recuerda que cuando fuimos a la escuela de futbol empezaste a gritar como si te estuvieran matando —Emma suelta unas carcajadas y yo miro mal a Alan.

—Si, mamá ya me lo recordó —digo evitando que siga con el tema— Aunque sé que es difícil, quiero aprender y la mejor persona para que me enseñe es tu primo —miro a Alan con mi cabeza ladeada intentando verme tierno.

—Okey, pero ten en cuenta que mi primo se toma este deporte enserio. No tendrá piedad —dice deteniéndose de caminar como si me fuera a retractar.

—Aceptare las consecuencias —digo con resignación sorprendiendo a mis mejores amigos

—Cambiando de tema, debes de contarnos que hiciste con la chica —Habla Alan haciendo que Emma preste toda su atención a mí con una sonrisa picara

—Casi nos lleva la policía, pero valió la pena —sonrió recordando el día anterior—. Salimos a hacer grafiti, montamos bicicleta —ambos me miran con ternura— es increíble la sensación de tranquilidad y alegría que me pues transmitir.

Ambos sueltan un "Awww" mientras me miran con orgullo como unos padres viendo a su hijo en su graduación. Yo muerdo mis labios esperando que lo que haya dicho no sonara tan cursi. 

—Eso suena tan peligroso y tierno a la vez —Alan parpadea varias veces.

—Nos alegramos mucho por ti Jeremith —dice Emma sonriendo

—Yo también tengo algo que decirles —Emma y yo nos miramos confundidos—. Papá abrirá un restaurante en unas semanas - abro mis ojos sorprendido— es muy rápido, pero papa lleva meses haciendo todo lo necesario para abrir un restaurante.

—Bueno, todos tenemos buenas noticias —dice Emma dejándome confundido

—¿Todos? ¿Tú que noticias tienes?  —Alan cruza sus brazos sobre su pecho volviendo a frenar, ruedo mis ojos ya que nos hace retroceder de nuevo.

—Me aceptaron en la universidad de la que les hable hace un mes —Alan pega un grito eufórico, él nos une en un abrazo mientras celebra y parece mas emocionado que la propia Emma. 

Desde mucho antes de graduarnos de la escuela Emma a tenido una fascinación por la moda, por temas personales y sabiendo lo costosa que es la carrera no pudo entrar, sin embargo, hace poco aplico para una beca al cien por ciento y todos sus esfuerzos dieron resultado.