Capítulo 13 "Mensajero de flores"

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Narra Mike.

Anoche me quedé dormido enseguida. Había dormido realmente bien, plácidamente hasta que note unos pinchazos en el brazo. Era como un hormigueo y la sensación de adormecimiento en todo el brazo. Si, Sara tenía su cabeza puesta encima de él y me estaba cortando la circulación.
Se veía tan bonita dormida. Que pena que despierta me tratase fatal.

*Teléfono sonando*

Sara se despertó con la melodía del teléfono. Abrió los ojos y me miró, sonreía. Era tan dulce. Duró poco ese momento, en cuanto se dio cuenta de dónde estaba, salto de la cama.

- Dime que no hemos hecho nada...

- No hemos hecho nada.

- Dímelo de verdad Mike.

- En serio Sara, no hemos hecho nada, estate tranquila... No eres mi tipo niña - ¿Que haces Mike? ¿Porque le hablas así ahora?

- Ni tú eres el mío estúpido. - enfadada salió de la habitación dando tras de sí un enorme portazo.

He sido un estúpido, lo sé.
Pero si no vuelvo a ser el idiota de antes que le hablaba mal, podemos empezar a llevarnos demasiado bien y acabaríamos mal. Este última día ha ido todo muy deprisa y la veo de diferente manera... Si eso ha pasado en pocas horas de llevarnos bien. No quiero imaginarme si nos llevaramos bien siempre.

*Teléfono sonando de nuevo*

- ¿Si?

- ¡Cariño! ¿Ya te has despertado? - una voz femenina suena al otro lado del teléfono.

- No, mi padre me ha enseñado a coger el teléfono dormido. ¿Tu qué crees Monika?

- Perdona bebé, es que ayer no respondiste a mis WhatsApps y me preocupaste. ¿Podemos desayunar juntos?

- Nos vemos más tarde Monika, tengo cosas que hacer. Luego te llamo.

- Tarde cariño, estoy en tu puerta con un delicioso desayuno. - suena el timbre.

Baje las escaleras y ahí estaba Sara. Abrió la puerta y al otro lado estaba Monika. Con una bolsa en la mano y un par de vasos en la otra. Con una sonrisa de oreja a oreja. Entró en casa y sin dejar las cosas se lanzó sobre mi a darme un enorme abrazo el cual no le correspondí. Beso mi boca, la cual no hizo ni un simple movimiento.
Estaba alucinando, lo loca que estaba está tía para presentarse en mi nueva casa (que por cierto no se de dónde habrá sacado la dirección) un domingo a las 8 de la mañana.

- ¿Que te he dicho Monika?

- Ya lo se bebé, pero te echaba de menos y quería verte.

- Acabo de levantarme... Ni siquiera me he duchado todavía.

- No te preocupes, ve a ducharte, que yo me quedo aquí preparando todo cariñito.

Asentí a la vez que veía a Sara reírse a escondidas para que Monika no la viera, subí las escaleras para prepararme hoy iba a ser un día muy duro...

Narra Sara.

- ¿De qué te ríes mocosa? - escuché su voz por detrás de mí. Mierda se había dado cuenta de mi risa.

- ¿Como me has llamado?

- MO-CO-SA, ¿Acaso estás sorda?

Me reí. ¿De qué iba esta tipa? Viene a mi casa, me insulta así de gratis y ¿pretende que me quedé quieta sin hacer nada? Esta no sabe con quién se ha metido.

Me acerqué a la nevera y cogí dos huevos. Caminé hacia Monika con una sonrisa en mi rostro. Y me pare justo enfrente de ella.

- Conmigo no se juega bonita. - le dije mientras le aplastaba los dos huevos en la cabeza.

Empezó a gritar como una auténtica loca. Quitándose la clara que le escurría por la cara y se le metía en los ojos.

- ¡MALDITA PIRADA! ¡ME LAS PAGARAS! - gritaba y mientras tanto yo solo podía reírme.

Mike bajo rápidamente las escaleras. Sus ojos estaban tan abiertos como dos platos enormes. Se aguanto la risa por unos instantes. Estaba claro que la situación era graciosa, pero era su "novia" así que estaba mal reírse de ello.

- ¿Que ha pasado aquí?

- Tu novia quería desayunar huevos. - Afirmé.

- No es mi novia - me respondió Mike.

- ¿Como que no? ¿Entonces qué soy? - dijo Monika.

- Monika hablaremos más tarde, ahora sube a ducharte, tengo que hablar con Sara.

- Espero qué la pongas en su lugar y defiendas a tu novia... Que soy ¡YO! - enfadada subió las escaleras hacia el cuarto de baño.

- ¿Que ha pasado Sara? Déjate de bromas...

- Me insultó y yo me defendí.

- ¿Eso es manera de defenderse? ¿Romperle dos huevos en la cabeza en casa de otra persona? ¿Y si te lo hicieran a ti? - se notaba que Mike estaba enfadado, no entendía porque... ¿Prefería defender a esa chica, a la que ni siquiera llama novia antes que a mí?

- Es mucho mejor darle de puñetazos hasta que te llenes de sangre ¿No? - protesté enfadada.- Es a lo que tú estás acostumbrado.

Me miró frunciendo el ceño, mis palabras le había dolido...
Subió las escaleras, con los puños cerrados, se había enfadado. Se que no fueron las más acertadas, pero en ese momento solo me salió decirle eso. No me arrepiento, tengo razón, el parece que todo lo arregla así.

Pasó un rato y llamaron a la puerta.
Un mensajero tenía un ramo de rosas enorme en las manos. Preguntaba por mi... ¿Quien habría tenido ese detalle? ¿Y porque? Si no conocía a nadie así.
Había una nota en ellas.

"Te quiero más de lo que te piensas"

Mike y Monika bajaron las escaleras, los dos ya arreglados. Ella ni siquiera me miraba a la cara aunque en su expresión se veía tristeza, ¿En serio va hacerse la víctima conmigo? ¿Cuando es ella que se mete con todos los demás incluso en el instituto? Si son tal para cual...

Mike miró el ramo de flores que había dejado en un jarrón. Lo miró y me miró a mi. Me echo una mirada desafiante, seguía enfadado. ¿A ver si voy a tener yo la culpa de que su novia sea igual de estúpida que el?
Cogió las llaves de la moto y salió por la puerta de la mano de Monika sin decir una sola palabra.

Pues ok.
Si así quieres ser, así seremos Mike.

...

Me enamoré de ÉL (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora