Narra Mike.
Hoy era el gran día.
Estábamos todos muy nerviosos, pero el que más mi padre. Hoy era un gran día para ambos. El comenzaría su nueva vida con la mujer a la que ama. Y yo le confesaría a la mía todo lo que siento por ella.Me puse mi camisa negra desabotonada. Mi pantalón gris ajustado, mi cinturón negro y mis zapatos a juego. Mi americana del color de mis pantalones, mis anillos, reloj y colgante. Colgué mis gafas de sol en el bolsillo de la chaqueta, me peiné y perfume.
Bajé y papá ya estaba vestido. Estaba guapísimo, nervioso como un flan. No paraba quieto de lado a lado. Richard estaba a su lado iba muy guapo también, muy elegantes los dos.
- ¡Oh dios Mike! Estás guapísimo, la vas a dejar impresionado. Me gustas hasta a mí.
- Hijo mío, estás impresionante.
- Vosotros sí que vais guapos - le ayude a colocar la flor de su americana a mi padre - Hoy es tu gran día padre, saldrá todo bien.
Richard se llevó a papá en el coche y yo fui en mi moto. Era la hora.
Cuando llegue estaban todos allí. Mía y las chicas vinieron a mi encuentro. Las salude y pregunté por Sara.
- Todavía no ha llegado, está de camino con su madre en el coche. - dijo Marta.
- ¡Estás guapísimo Mike! - me piropeó Carol.
- Gracias espero no llamar mucho la atención, solo quiero llamarla de una persona.
- Lo se, aunque quizás sea ella la que llamé la de todos. - me señalo hacia atrás.
A lo que me giré, vi el coche llegar. Una pierna con unos tacones negros atados al gemelo asomaron por el hueco, bajo ella del asiento del copiloto. Llevaba un vestido negro ajustado mostrando todas y cada una de las curvas de su cuerpo, era de tirantes finos. Largo hasta los tobillos con una línea a un lado dejando ver una de sus piernas lo que lo hacía muy sensual. Su melena larga y ondulada y esos labios rojos hacían que fuera a mi punto de vista la mujer más sexy del mundo. Era perfecta, su pelo, su ropa, sus zapatos, sus curvas, hasta la manicura negra era perfecta. Me acerqué a ella y la ayude a bajar del coche.
Narra Sara.
Por fin llegamos. Nos había costado mucho vestir a mamá y meter todo ese vestido dentro del coche sin arrugarlo. Espero que no se estropease en el camino. Tenía que hablar con Nate, no pude hacerlo ayer y necesitaba terminar con todo esto ya. No quería perder a Mike. Quería hablar con el y decirle todo lo que siento y sólo esperaba que el sintiese lo mismo y quisiera intentarlo de nuevo.
Baje del coche y ahí estaba Mike, ofreciéndome su mano para ayudarme a bajar. Estaba increíble. Ese traje le quedaba perfecto. Tenía ganas de darle un beso delante de todos y decirle que le quería. Pero tenía que encontrar el momento.
- Estás preciosa Sara - dijo Mike con una sonrisa en la cara, hizo que me sonrojase.
- Tu tampoco estás nada mal - respondí guiñándole un ojo.
Los dos ayudamos a mamá a bajar del coche. Todos se quedaron boquiabiertos. Estaba realmente bonita. Aunque muy nerviosa, camino hasta Óscar que la recibió ofreciéndole el brazo para que se agarrase. Mike hizo lo mismo conmigo y entramos todos a la ceremonia.
*Unas horas después*
El banquete había terminado, todo había salido perfecto. Estaba siendo un gran día. Ahora empezaba el baile y la fiesta de verdad. Los novios terminaron de bailar e invitaron a bailar a los demás. Era el típico vals, de bailar acaramelado con tu pareja. Nate me saco a bailar y acepté.
Fuimos hacia la pista de baile y me puso frente a él. Me agarró de la cintura y me acerco hacia su cuerpo. No cabía ni un alfiler entre nosotros. Comenzamos a bailar y el poso sus manos en mi cintura yo apoye las mías en sus hombros. Iba bajando a sus manos poco a poco por mi cuerpo y me estaba haciendo sentir incómoda.
...
Narra Mike.
Empieza el vals. Aunque no me gusta mucho bailar no se me da mal. Nate ha sacado a bailar a Sara. Están muy pegados y eso no me gusta. El se le acerca y la agarra por la cintura. Me estaba empezando a poner nervioso.
Bajaba sus manos por debajo de la cintura de Sara y a ella no se la veía cómoda. Me levanté de la mesa y fui hacia ellos.
Sara se separó de Nate y fue hacia el jardín, Nate la siguió y yo fui detrás.Se pararon a hablar y yo me quedé detrás de una fuente de piedra enorme que había allí.
- ¿Que pasa Sara?
- Nate, no me gusta que me toques así. - protesto Sara - Te ha faltado agarrarme del culo en mitad del salón.
- ¿No estamos para darle celos a Mike? - preguntó Nate, osea yo estaba en lo cierto, era todo un juego.
- Si, pero con bailar es suficiente Nate.
- ¿Y si yo me he cansado de no recibir nada a cambio? - se acercó hacia ella sujetándola de la cintura - ¿No vas a darme ni si quiera un poquito de ti por todo lo que estoy haciendo por ti?
- Nate, suéltame, vas borracho...
- ¿Y si no quiero? - seguía agarrándola de la cintura y bajo hasta sujetarle el culo.
- ¡Suéltame Nate!
- ¿Y si no que? ¿Eh Sara?
- Te ha dicho que la sueltes Nathan. - contesté.
- Y si no quiero que Mike, ¿vas a pegarme? - se giró hacia a mi, que me quedé sin decir nada, no sabía cómo reaccionar no quería montar un escándalo en un día tal feliz - Me lo imaginaba.
- Sueltala, no te lo repetiré - volví a decir.
- Lo mejor será que te vayas Mike.
Se giró hacia Sara agarrándola otra vez de la cintura. Intentando acercarla para besarla, cuando algo dentro de mí se encendió. No iba a consentir que nadie la tocase y mucho menos así sin su consentimiento.
Me acerqué a Nate, le agarre del hombro y cuando se giró le metí un puñetazo en toda la cara. Nos enzarzamos en una pelea. Rompió mi camisa, recibí un par de puñetazos en la cara... Hasta que lo tuve en el suelo, me coloqué encima de él y golpeé su cara con tal rabia que si no me llega a parar Richard, prometo que lo hubiese matado allí mismo.
Mis manos estaban llenas de heridas cubiertas de nuestras sangres.- Hermano vete de aquí, antes de que alguien os vea. Yo me encargo de todo para que nadie se entere de esto. Llévate a Sara, sácala de aquí.
Cogí la mano de Sara y caminamos hacia la moto. Le coloque mi americana para que no pasará frío, ya que era de noche y ella iba con aquel vestido tan fino. La subí a la moto, luego me subí yo, sentí como se acercó a mí, pegando su cuerpo contra el mío. Cuanto había echado de menos esa sensación de tener su piel junto a la mía. Arranque y me dirigí a casa. A nuestra casa.
...
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Me enamoré de ÉL (Terminada)
RomansaSara una chica joven vive con su madre en Madrid. Su padre las abandono cuando ella era pequeña y se crió sola con su madre. Es hija única, no tiene hermanos, aunque tiene dos amigas que son como hermanas para ella. La madre de Sara lleva un tiempo...