Amarte de Nuevo

Capítulo 29

Vladimir

Le doy otro trago a mi vaso de vodka, creo que es el tercero que me tomo pero necesitaré fuerzas para lo que voy a hacer miro maldigo a la hora que acepté esto, maldita sea Vivianne y su poder de convencimiento, veo como el objetivo se mueve por todo el lugar charlando y saludando gente en cambio me dedico a mirarlo entonces la voz de Anne se escucha por el auricular.

-Carajo...-

-¿Qué pasa?- digo en voz baja.

-Estoy explorando la habitación del tipo, parece que le va mucho el pet play- escucho como abre un cajón- hasta tiene un bozal de perro-

-Yo le daría un buen uso para tu lengua viperina- digo mientras llevo el vaso a mis labios para ocultar mi sonrisa.

Escucho como cierra el cajón de golpe, para soltar un grito bajo de horror.

-Dime que no te va el pet play-

-No me va- guardo silencio unos segundos, mirando a mi alrededor para que nadie me esté escuchando- pero me empiezo a preguntar cómo se vería tu trasero con una cola de gatito-

Su silencio me confirma que también lo está imaginando, siento como los pantalones me empiezan a incomodar en mi entrepierna al imaginarmelo yo también, su trasero rojo y adornado con una cola de un gatito escucho como carraspea para recobrar la compostura.

-Podríamos intentarlo...-

Carajo

Será que nos detengamos porque estoy a nada de mandar a la mierda todo y llevármela al apartamento para hacerla mía toda la noche hasta que se quede ronca de tanto gritar de placer, parece pensar lo mismo que yo porque logra recomponerse.

-El objetivo se está acercando-

Me giro discretamente para verlo, el hombre de unos treinta y cinco, cabello castaño oscuro, ojos verdes viste un traje negro y zapatos de marca se acerca a la barra toma asiento a mi lado entonces le pide al barman.

-Un whisky en las rocas, por favor-

-Cualquiera que lo viera tomando whisky, pensaría que es policía- digo comenzando con todo este circo, el hombre me mira arqueando una de sus cejas.

-¿Qué le hace pensar que no lo soy?-

Muy bien Vladimir, tu puedes ya tienes su atención

-Ningún policía se viste tan elegante- le doy una sonrisa para después extender mi mano- Casimir-

-Piero- dice usando su seudónimo- su acento no es de por aquí-

-No, de hecho soy ruso pero vine a Italia por negocios y un socio me habló de este lugar para liberar el estrés y quise probar a mi suerte-

-Yo tengo una forma infalible para liberar el estrés-

Doy un pequeño respingo al escuchar la voz de Vivianne en el auricular, siento como mi cuerpo se tensa y los pantalones se ajustan más a mi entrepierna, entonces el hombre vuelve a hablar.

Me está provocando a propósito, ya lo pagará con creces en el apartamento

-Puede ser su día de suerte- me da una sonrisa coqueta, la misma que me dio el barman- así que... ¿ruso?, dicen que los rusos suelen ser muy buenos en la cama-

-Uff, ni se imagina cuanto- puedo jurar que la muy cabrona está sonriendo- esto se está haciendo más fácil de lo que creí-

Trago saliva duramente entonces de un solo trago me tomo lo que queda mi vodka, entonces le pido al barman otro mientras el sujeto a mi lado me sonríe como si acabara de encontrar a su presa de esta noche.