Amarte de Nuevo

Capítulo 28

Florencia, Italia

Vivianne

Miro a través del auto a mi siguiente objetivo el segundo buitre, a simple vista puedes ver que un empresario con su esposa e hijos que se gana la vida a mucha honra para mantener a su familia pero en las sombras es alguien muy distinto, veo que mi blanco sube a su auto y arranca los sigo una distancia prudente después de unos veinte minutos se detienen en un burdel veo como baja para entrar tomo un par de fotos, espero a que salga mientras le doy un trago de mi soda tomo una papa frita y me la llevo a la boca, un consejo queridas lectoras.

Si van a seguir a alguien lleven comida porque pueden pasar hasta horas para que descubras a la persona así que no hay que morirse de hambre.

Después alrededor de unas dos horas el sujeto sale vuelvo a tomar fotos, se monta a su auto y se marcha miro como el auto desaparece en la oscuridad dirigiéndose a su casa para darle a su esposa la patética excusa que se quedó hasta tarde en el trabajo he seguido toda su rutina desde hace una semana, un par de días después de que Sevastien despertó del coma mi vine a Florencia para asesinar a mi segundo objetivo pero para eso necesito saber mi rutina diaria, arranco mi auto para dirigirme hacia el apartamento que renté después de una media hora subo las escaleras hacia el quinto piso resulta que el edificio donde me hospedo está enfrente de mi objetivo cuando llego a mi puerta introduzco mi llave pero la puerta se abre fácilmente rápidamente saco mi arma y entro lentamente todo está oscuras camino por el pasillo apuntando a todos lados paso por la cocina cuando entro a la sala una mano me tapa la boca por detrás provocando que suelte el arma antes de que mi atacante lo prevea encajo mi codo con fuerza en su estómago suelta un quejido de dolor pero no le doy tiempo para recuperarse tomo su brazo para pasar su cuerpo por mi espalda estrellándolo contra la mesita de centro.

-¡Carajo Anne!-

Abro los ojos por la sorpresa al reconocer la voz, me apresuro para encender la luz cuando la sala se ilumina veo un cuerpo de conozco a la perfección su rostro está arrugado por el dolor tardo un par de minutos para recomponerme de la sorpresa.

-¿Vladimir?-

-No, soy Santa Claus- el sarcasmo tiñe su voz- obviamente soy yo- ruedo los ojos, mientras lo ayudo a levantarse- golpeas duro Anne, creo que me rompiste una costilla-

-No seas llorón aparte, ¿cómo iba a saber que eras tú?- veo como soba su espalda- ni siquiera te anunciaste, por cierto me debes una mesa nueva- señalo la mesa de madera ahora destruida el me fulmina con la mirada-aparte, ¿cómo me encontraste?, no te dije a dónde me dirigía...-

-¿Por qué no mejor te callas y me recibes con un beso?, estoy aquí arriesgando mi culo-

Me interrumpe mientras me sonríe, sin poder evitarlo una sonrisa sale de mi labios antes de que lo prevea me lanzo contra sus brazos me recibe entre risas mientras enrollo mis piernas alrededor de su cintura lo beso él sin dudarlo me devuelve su lengua separa mis labios su mano sujeta mi cabeza para profundizar el beso, me coloca en mis pies una vez que nos separamos por falta de aire.

-¿Qué haces aquí?-

-Pensé que necesitarías un poco de ayuda, no estaba dispuesto a que me dejaras sin noticias tuyas durante semanas como la última vez aparte no tengo mucho trabajo, no estaría de más una mano extra-

Le sonrío y lo beso de nuevo, tengo que admitir que fue una sorpresa grata el que viniera ayudarme.

-Eres el mejor, ¿lo sabías?-

-Kitten yo siempre soy perfecto- le doy un codazo en broma, nos reímos entonces su vista se enfoca en el pizarrón en una esquina- ¿es el nuevo objetivo?-asiento, el se acerca para verlo mejor-¿quién es?-