04 | Tianguis

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Un viernes de tianguis TaeHyung fué con JungKook para comprar frutas y verduras frescas para una comida, después de que la mamá de Jeon los mandara a ambos súper temprano no les quedó de otra que obedecer.

Entonces ahí estaban a las 8 AM en el puesto de verduras comprando tomates para la comida de unas horas. TaeHyung toqueteaba los tomates "apachurrandolos" poquito para saber si estaban aguados o buenos, terminando así de juntar los 2 kilos. Le dió la bolsa a la señora del puesto y ella lo pesó checando que así completara su pedido.

—Jk está bien pinches caros los tomates, ¡20 pesos el kilo! ni que fuera semana santa.

—No te preocupes, algún día te pondré tu huerto y ahí podrás sembrar de todo para no tener que pagar estas cosas a ese precio —dijo JungKook imaginando a TaeHyung con una carretilla con abono, luego a TaeHyung callendo con todo y la carretilla por la poca e inexistente fuerza que tenía.

Caminando de la mano con JungKook pasearon por todos los puestos tratando de completar todo lo encargado.

"Pasele güerito, escojale que aquí hay de todo"

"Amigo pase por aquí"

"Está todo fresco"

"Pruebesela sin compromiso"

Era lo que escuchaban al caminar por distintos puestos, unos de comida corrida, verdurerias, accesorios, ropa, y hasta señores vendiendo pan.

Al tener todo lo que necesitaban caminaron hacia la salida, JungKook con bolsas del mandado en sus manos mientras Tae verificava  que todo estuviera completo por décima vez.

—TaeHyung muévete estas cosas pesan — JungKook ya estaba "cansado"

—No mames, son solo 2 kilos de tomate y un perro pollo —dijo TaeHyung no pudiendo creer la flojera y poca fuerza de JungKook.

—Sí, solo es eso y te tardas 3 horas leyendo esa lista en la que solo tenían que ir el tomate y pollo —TaeHyung lo miró ofendido, para el la perfección era lo indicado y si llegaba a faltar algo de lo que le encargó su amada suegra no podría con la regañada y la vergüenza.

—Dame una bolsa pues, y tú quédate con la del pollo —TaeHyung le propuso a JungKook para que ya no se quejara del peso.

—Okidoki —le dió una bolsa a TaeHyung mientras el sostenía la otra, para después tomar su mano y caminar a el lugar donde se estacionó.

—Que bueno que trajimos la camioneta, no aguntarías nada con tu bolsa.

—Haste pendejo, si no era por eso, solo querías traerla para que todos la vieran —dijo TaeHyung sonriendo burlón

—Bueno también eso, pero niega que la mamalona está chida. Y ni te hagas que también te gusta cuando bajas de ella en un brinco, pinche presumido.

JungKook empezó a conducir hacia la casa de su mamá, mientras TaeHyung se hacía el ofendido, pero ambos sabían que los dos disfrutaban esos momentos.

pinche naco › kookv   [COMPLETA Y CORRIGIENDO] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora