Peculiarities

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Quien dice que de amor se muere.

°°°
~ Hiro Hamada


Miguel caminaba con cautela dentro de aquel refugio social dónde lo habían llamado recientemente.

- Sabes que cuando alguien te invita, no necesariamente tienes que ir.

- Lo sé, pero alguien tiene que ayudarlos Penny.

- Miguel esto es serio, me estás preocupando- se colocó frente a el- con lo que te a pasado no deberías estar aquí.

- Bueno que te gustaría que haga, recuerdo que alguien se negó a la idea de que le guardará luto-
Pronunció en un tono pasivo- agresivo.

- Rayos yo lo lamento mucho- se cubrió el rostro- No tenía derecho a decirte eso, después de todo debes estar abrumada por lo que te sucedió, no quería desquitarme contigo.

- Hey tranquilo- la castaña se acercó a el- Se que no lo dices en serio de igual forma yo también debí dejarte guardarme luto solo que eso de saber que estoy muerta eso me...me duele- el espíritu de su amiga se sentó a su lado estallando en llanto.

- No te disculpes, no es tu culpa es mía...Tu nunca debiste saber nada sobre los espíritus solo debiste seguir siendo mi empleada.

Penny dejo de llorar y empezó a mirar a su amigo de reojo.

- Debí quedarme callado, tienes razón tenías un matrimonio con la persona que amabas, una vida planeada y todo para ser feliz y yo te quite todo eso, no debí decir nada sobre el avión...!Oh¡, Por dios yo te maté.
- pronunció el con los ojos desorbitados mientras se hacía un ovillo sobre la banca abrazando sus rodillas- Yo te maté- murmuró empezando a hiperventilar.

- Miguel, no digas eso.

- Te maté, te quite todo deberías odiarme- llevo ambas manos a los costados de su cabeza.

- Miguel yo nunca te odiaria - comento al ver lo destrozado que estaba su amigo.

- Mírame- le susurro, pero el no quería verla- Miguel Rivera, hazme caso y mírame a los ojos- demandó con voz fuerte.

El levantó la vista apreciando a su amiga con la mitad del rostro desecho del cual aún brotaba sangre, seguramente producto de cuando se estrelló contra el parabrisas.

- Esto me lo hice yo, nadie más es culpable solo yo entiendes. Trataste de impedir que yo fuera al aeropuerto para verificar que mi esposo no estuviera en el avión no ví el señalamiento y luego todo se apagó.

- Sufriste mucho...al morir.

- No, en realidad fue como quedarse dormido.

- Aún así me siento mal.

- Quizá eso tenía que pasar, después de todo soy donante de órganos y le van a dar mi corazón a una chica llamada Teodora.

- No me imagino lo que siente Fernando en estos momentos, por qué no vas con el.

- Estarás bien.

- Por supuesto, después de todo creo el te necesita más que yo.

La chica camino un par de pasos antes de desaparecer detrás de una pared.

...

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Between Shadows- HiguelDonde viven las historias. Descúbrelo ahora