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—No esperaba que estuvieras tan tranquilo después de lo que sucedió —dice. Sus manos recorren las viejas ropas de Claudia, metiendo prenda tras prenda en una caja, parece que hoy por fin es el día en que todo lo de ella desaparecerá de esta casa. —Tal vez esperaba que estuvieras con una armadura día y noche, eres muy joven, hubiera sido perturbador verte con esa máscara siempre —agrega.

—Me pongo una máscara todos los días, es más, estoy seguro de que si me disfrazara nadie me reconocería.

Noah aprieta la prenda en su mano. —¿Cómo puedes decir eso con una sonrisa? —pregunta y su voz tiembla. Se ve inestable. Stiles camina dentro de la habitación, observa las pilas de cajas que están sobre la cama y ve la mancha de sangre que no quiere irse incluso después de años.

—¿Cómo puedes fingir que tu esposa no está muerta?

¿Cómo puedes fingir que tu esposa no te amaba?

Su padre se acerca para tomarle las manos. Sus dedos son ásperos y su anillo está ausente, probablemente fue arrojado hace años. —Podrías dejar de fingir conmigo —susurra.

Stiles piensa en como su padre siempre esperaba que Claudia se corrigiera. Cuando siempre le señalaba sus errores y las cualidades extrañas que tenía. Era cierto, Claudia no era perfecta, no era una madre perfecta y mucho menos una esposa ideal, pero ¿no podía ser ella misma? Tal vez si ella hubiera seguido sus sueños todo sería distinto, pero ella los abandonó porque el hombre frente a él se lo pidió para que pudieran verse más seguido, y Stiles siente un poco de miedo por sentirse de alguna manera reflejado.

Piensa en como él ya había desaparecido mucho antes de que ella padeciera Hanahaki, en el asiento vacío al lado suyo en el funeral. Piensa en él mismo cuando vomitó el primer pétalo y el miedo profundo que lo invadió, en como no tuvo a nadie a su lado para ayudarlo. Piensa en todas las entradas de todos los juegos en los que ha tenido la oportunidad de jugar en estos últimos meses, todos ellos arrojados en la basura porque su padre nunca se quedaba el tiempo suficiente en casa como para verlos.

Stiles podría dejar las máscaras atrás y contarle lo difícil que es seguir en esta casa, en una gran casa de dos pisos donde él es el único que pasa tiempo ahí. Contarle como parecía vivir más en la casa de los Hales, que había días donde sentía que pertenecía más a Derek que a sí mismo, y como esos días ahora parecían ser recuerdos lejanos.

Pero sabe que puede fingir un poco más, mentir un poco más, engañar a todos y a él mismo y seguir sonriendo mientras dice que todo está bien. Stiles sabe que si su padre se entera de su enfermedad lo obligará a operarse. Lo obligará para no ser una Claudia más.

—Está bien, papá.

Noah le sonríe mientras vuelve al armario. Ni siquiera parece notar la ausencia de los frascos que dejó años atrás.

—Vamos a mejorar, Stiles, te lo prometo.

Ambos saben que están mintiendo.

Leaving my love behind - SterekDonde viven las historias. Descúbrelo ahora