#2

8.2K 507 140
                                    

– ¡Cachorrito, llegué a casa!

– Hi daddy. Perdón, no me había dado cuenta. – fue a exigir que lo cargaran, cosa que consiguió.

Con Mike en brazos, dejó su mochila en una silla y fue a la cocina en busca de una copa.

– ... – frunció el seño y lo bajó.

– ¿Qué pasa?

– No te hagas el tonto, ¡no hay una sola copa en este cajón!

– Mmm, ¿se perdieron? – desvió la mirada.

– Mike, ¿Dónde las dejaste? – lo arrinconó contra una pared.

– Daddy⁓ no sé.

– Un buen baby le dice la verdad a su daddy. – lo tomó del mentón. – aunque signifique castigo.

– Sh-shi daddy. Te diré la verdad. – respiró hondo. – oculté las copas en mi baúl de juguetes para que no pudieras tomar vino.

– En todo caso si no me decías hubiera bebido en taza. – le acarició la cabeza. – no te castigaré por decirme la verdad. Pero la próxima vez que hagas algo así sí te castigaré.

– Como digas daddy.

– Ayúdame a traer las copas. – lo tomó de la mano y lo llevó. Al querer abrir el baúl, Mike lo tiró del polo. – ¿Qué?

– Lo puedo hacer yo, jeje⁓, no es necesario que lo abras daddy. Ve a descansar y yo guardo todo.

– ... – lo abrió igualmente. Al ver lo que había pasado con la mitad de las copas se enfureció. – ¡Mike! 

– Se rompieron por accidente.

– Ahora tus juguetes están llenos de vidrio. – gruñó. 

El menor bajó las orejitas de lobo que hasta ahora llevaba afuera.

– Perdón daddy. Solo fue la mitad...

– Cómo si tuviera tantas.

– Perdón

– Te voy a castigar. Ve a mi habitación y espera mientras limpio todo esto. – se arremangó.

– Shi daddy... ¿te puedo besar?

– No

– Ok... – se fue.

A Trolli no le gustaba negarle besos, pero debía ser estricto. Se puso a sacar cada vidrio, no permitiría que Mike se pasara a cortar mientras buscaba un juguete.

    

En la habitación de Trolli

   
– Daddy se enojó mucho... – se sentó en medio de la cama. Hizo un puchero. – espero que daddy me perdone...

.

.

.

Entró a la habitación.

– Despierta – prefirió ser suave al despertarlo ya que Mike se solía asustar mucho si era despertado bruscamente.

– Mmm⁓ – se talló un ojo y se sentó de nuevo en el colchón.

– Bien – fue a buscar algo. – este será tu castigo. – sacó unas ataduras tipo bondage para atarlo a la cama.

– Daddy tu sabes que no me gusta mucho eso.

– Acepta tu castigo como buen niño. – preparó las ataduras en cada esquina de la cama antes de desvestirlo.

– Shi daddy. 

Trolli lo comenzó a desvestir. Le acarició la cintura y lo ató espalda arriba. Cuando terminó se subió encima y le dejó un chupetón en la espalda

– Ah⁓ 

– Y como castigo extra tendrás prohibido gemir.

– Oki – apretó los dientes al sentir un dedo embestir su entrada con brusquedad.

– Ya estás advertido. – metió un segundo y luego un tercero. Lamió su omoplato.

– Daddy – intentó que no saliera gemido. Se aguantó cuando sintió mucha más velocidad.

El azabache sacó su mano cuando vio unas gotitas húmedas en el colchón. Al parecer Mike se había corrido por las embestidas, pero había sido poco.

– Te permito gemir por ahora.

– Mgh⁓ hm⁓ 

Se comenzó a desvestir y se puso frente a Mike. Le levantó un poco la cabeza.

– Hay algo que necesita de tu atención aquí.

– ¿Puedo, daddy?

– Sí – se acercó un poco más para que alcanzara. 

– Mhm⁓ – saboreó la punta. Era algo incómodo por la posición en la que estaba, pero no le importaba, debía complacer a su daddy.

Fue lamiendo tímidamente hasta llegar al fondo. Simuló estocadas con la boca y chupó por todas partes.

– Como si fuera un biberón al que debes exprimirle la leche, no lo olvides.

– Shi⁓ daddy⁓ – jugó con él en su boca. – daddy apenas entra. – besó la punta.

– Tu boca es chiquita.

– No daddy, es que es grande. – insistió.

Trolli rio por como lo decía.

– Te ayudo. – se empezó a masturbar, rozando su miembro con los labios de su novio. 

– ... – sacó un poco la lengua. – hmh⁓

Unas gotitas que luego se transformaron en chorros salpicaron al rostro del castaño.

– Uff⁓ – se relamió al verlo lleno de semen.

– Gracias por la leche, daddy. – lamió la punta y se pasó la lengua por los labios para alcanzar a agarrar el semen que había ahí.

El Vino de tu Copa | Baby boy~₰Mikellino °Omegaverse°Donde viven las historias. Descúbrelo ahora