#16

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– Bueno, terminé con Mike. – venía saliendo de la habitación con el mencionado.

– Ya era hora.

– Trolli – pegó un suspiro hondo, como aún pensando en lo que iba a decir. – ... o me dejas venir aquí 4 veces a la semana... o abro la boca.

 – ¿¡CÓMO?! ¡eres mi amigo, Flex! ¿¡cómo me puedes manipular así?!

– No quiero problemas contigo, de verdad.

– ¡Pues si no quieres problemas no me intentes chantajear! – tomó la mano de Mike y lo acercó a su cuerpo. – ¿y por qué pides venir aquí 4 veces a la semana?

– Porque... agh, no lo entenderías.

– Dime

– No Trolli, es un secreto, lo siento.

– ... Ok, ok, está bien. No te presionaré.

– Pareces molesto. 

– ¿¡Y CÓMO NO?!... uff⁓ – se pasó una mano por la cara.

– Daddy

– ¿Sí?

– Cálmate, me asustas. – le tironeó un poquito de la camisa.

– Perdón, baby. 

– ... – Flex bufó de mala gana. – bueno, adiós. – tomó su chaqueta y le besó la mejilla a Trolli. Se despidió de Mike y salió por la puerta.

– Mikel, ¿Por qué esa carita?

En los casi 3 años que llevaban juntos jamás había visto a alguien más besar al azabache.

– Eres mío, daddy. – hizo un puchero.

– ¡Ohh! ¡pero si estás celoso! – soltó una risita y lo tomó en brazos de manera juguetona. – baby, eso fue solo un beso de despedida, además solo fue mi mejilla. Tú tienes mis labios. – le besó. – no te pongas celoso por tonterías, pequeño.

– Oki 

– Y no solo mis labios. – gruñó lujurioso. Se relamió antes de llevarlo a la cama. Se puso en cuatro sobre el menor mientras le seguía besando. – ¿te gusta que te lo meta?

– Shi daddy⁓ – exclamó con una voz inocente. 

– ¿Lo quieres ahora?

– Shi

– Vale – se quitó la ropa. – entonces lo tendrás.

La faldita de Mike como era corta ya se había levantado por la posición en la que estaba el menor, por lo que Trolli solo tuvo que mover sus manos a su parte baja para tocarle.

– Ah⁓

– Mikel, si no fuera porque va a venir Flex de ahora en más, te haría ir sin ropa interior por ahí. Solo con faldita. – jugaba con los dedos dentro de su novio. De repente hizo unas estocadas bruscas.

– ¡Hahh!⁓ daddy⁓

– ¿Te duele? 

– Sí mgh⁓ pero el placer es más grande⁓ – el mayor metió el tercer dedo y fue más rápido. – ¡aah!⁓ ahmh⁓ 

– ¿Muy rápido? – sentía tan mojado, que no se resistía, quería partirlo en dos y eso que solo iba con los dedos.

– ¡Daddy!⁓ – le apretaba el brazo para desahogarse. – mhah⁓ ha⁓

Sacó los dedos y mientras besaba al contrario para callarle los gemidos se masturbó para lubricarse el miembro con los fluidos del castaño.

– Mmm⁓ – bajó a su cuello para dejarle chupetones. Se posicionó y mientras le chupeteaba el cuello metió su miembro hasta la mitad. – dime que lo quieres más adentro. – lamió la marca.

– A~ah⁓ lo quiero más adentro⁓ 

– Buen chico, Mikel⁓ – lo metió de una sola vez. – buen chico.

El menor no pudo evitar gemir al sentir sus paredes siendo abiertas por el miembro de su daddy. 

– Mh⁓ también quiero que me muerdas.

– ¿Cómo se dice?

– Por favor⁓

– Ok – antes de morder, le dio un chupetón encima y le clavó sus blancos colmillos.

– Ah⁓ – lloriqueó. Cerró los ojos un momento. Luego los abrió y comenzó a jugar con los dedos sobre los pectorales de Trolli. Los deslizó como formando caminos mientras sentía como era marcado. – mhm⁓ gracias daddy.

– Jeje⁓, el placer es mío.

El Vino de tu Copa | Baby boy~₰Mikellino °Omegaverse°Donde viven las historias. Descúbrelo ahora