El Vino de tu Copa | Baby boy~₰Mikellino °Omegaverse°

#22

– ¿Cuál es el secreto?... – susurraba mientras garabateaba distraídamente en su escritorio. – ¿Cómo le hago?...

– ¿Hacer qué, daddy?

– Cosas de daddy. – le evadió mientras seguía pensando y tomaba vino.

– Nunca me dices nada.

– Porque no necesitas saberlo. 

– Yo digo que sí. – apareció Flex por la puerta.

– De ninguna manera. 

– Bueno, si no quieres. – tampoco le iba a estar diciendo ese tipo de cosas al castaño si Trolli no quería.

Lo que estaba buscando era una manera de detener su personalidad sociópata.

Como otro sedante. Pero, ¿Por qué no simplemente Flex hacía su trabajo mediante reuniones y cosas de ese tipo? pues claro, Flex lo hacía, pero los dos sabían que eso a Trolli no lo ayudaría, además ya lo habían intentado antes y no había dado resultado alguno. Lo que necesitaba Trolli era algo externo, Flex solo le ayudaría a identificarlo y a darle apoyo hasta que lograra su objetivo.

– ¿Quizás... drogas? – preguntó de repente el azabache.

– No, no es discutible si quiera. Sería peor que seguir bebiendo.

– Tienes razón.

– ¿D-drogas? daddy, ¿de qué hablas?

– Ya te dije, cosas de daddy.

– ¿Y por qué lo sabe Flex y no yo? – estaba algo celoso.

– ... Mejor ve a jugar, por favor.

– Pero--...

– Iré contigo más tarde.

– Vale – se fue a la salita de estar.

– ¿Nunca has hecho algo que te ha relajado de repente? así como al punto de sentirte especialmente bien.

– Cuando estoy ebrio.

– ¡Trolli! ¡eso no es "estar bien"!

– Lo siento. – bajó la mirada. – aparte de eso, no tengo "estados de relajación", si a eso te refieres.

– Que difícil. ¿Cuándo fue el último?

– Nunca recuerdo haber estado relajado. Antes del vino, solo era un psicópata al cubo, nunca estaba tranquilo. Uno de mis temores es volver a eso...

Flex sacó una libretita y anotó ese detalle.

– Mayor temor: volver a como era antes... 

– ¿"Mayor temor"? pff⁓, ese no es mi mayor temor.

– Entonces, ¿Cuál es?

– Hacerle daño a Mike, al punto de... – se interrumpió.

– Matarlo

– Mmm – solo asintió, antes de seguir intentar descifrar un posible "sedante" para su lado sociópata.

    

❐❐❐❖❏❏❏

    
– Escúchame, quiero que el viernes te emborraches. – le dijo el peliazul antes de irse.

– ¿¡Qué?! no pensé que me lo pedirías.

– No quiero que daddy se emborrache. 

– Lo pido porque quiero evaluarlo mientras está ebrio. Quiero ver cómo actúa. 

– Bueno, lo haré.

– Daddy, no...

– Calma, Mikel. No pasará nada.

– ¿Por qué no quieres que se emborrache, Mike? – preguntó Flex.

– Porque el vino le hace mal, me asusta que tome tantas copas...

– Tranquilo, serán solo las necesarias, ni más ni menos. 

– Oki 

    

❈•≫────≪•◦ ❈ ◦•≫────≪•❈

    
– Hora de placer. – exigió.

– Ah, ¿la quieres ahora? Estaba estudiando, pero si eso quieres no hay problema. Nada más estudio más tarde. – tomó el último sorbo de vino antes de devolver la copa a la mesa. – ¿cama? ¿o dónde?

– Cama

– Vale – lo cargó y lo llevó a la habitación. Le recostó en la cama y lo comenzó a besar, poniéndose sobre él mientras le tomaba las manos contra el colchón. Con una mano le apretó el muslo al menor. 

Le acarició la piel mientras le devoraba la boca en un besuqueo, buscando excitarlo mucho más. Pero en realidad la simple sensación de la cadera de Trolli recostada entre sus piernas era terriblemente excitante, sin contar que su camisa estaba algo desabrochada y le estaba aplastando el cuerpo.

El mayor le dejó la boca para permitirle respirar.

– Mhh⁓, daddy⁓, siento mojado⁓

– ¿Sí? – se echó hacia atrás y le bajó la falda. Tocó por encima de la ropa interior. – tienes razón, se siente húmedo... – se agachó entremedio y lamió por encima de la tela. 

– Mmm⁓

– ... – vio como la tela, ya no estaba solo húmeda, ahora estaba completamente empapada. Le acarició justo entre la división de la ropa y su piel. – ¿te gusta?

– Shi daddy⁓ 

Trolli se volvió a subir arriba suyo para volver a reclamar su boca. Le bajó la ropa interior de una vez, luego se comenzó a desabrochar la cremallera. 

– Pon tus piernas al rededor de mi cintura. – le pidió mientras le inmovilizaba los brazos.

– Oki – obedeció. 

– Te amo, baby⁓ – juntó sus caderas desnudas un momento mientras le quitaba la blusita y lamía sus pezones. 

– Ahh⁓ también te amo, daddy⁓ – sintió una pequeña succión. – ¡mhm!⁓

El azabache se posicionó e introdujo su miembro lentamente. Lo sentía suspirar y gemir de placer cada vez que se adentraba un poco más. Le dejó un chupetón en el cuello y dejó de aprisionarle los brazos contra el colchón. 

Pasó sus brazos por debajo de la cintura del menor para abrazarlo mientras se seguía moviendo haciendo estocadas.

– D~daddy⁓ hahh⁓ más⁓ – le acarició la nuca con los dedos.

Trolli fue embistiendo un poco más rápido. A veces le gustaba tomarse su tiempo. Era bastante bipolar en ese aspecto; porque habían días que se ponía salvaje y le dejaba cojo como por una semana entera, y otros días como este, donde tenía un especial cuidado.