Capitulo IX

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Me sentía pésimo. Dominik seguía sin hablarme, y realmente no creía posible la opción de perder mi orgullo y hablarle yo. Si alguien iba a acercarse, ese tenía que ser él, después de todo él se enfadó por algo estúpido y no aclaró bien las cosas. Yo solo hablé con Damian, y si supuestamente yo le gustara a Dominik, tampoco lo hice con intención de sacarle celos pues no tenía idea de lo que sucedía. Pero cada vez que pienso eso, me regaño mentalmente. No quiero pensar que yo le gusto a Dominik...es extraño, no me lo creo.

—En que piensas tanto, Monika —la voz de Damian me sacó de mis pensamientos.

Últimamente él se acercaba mucho hacía mí. Cada vez que me encontraba sola, él aparecía de la nada, me llegaba a asustar, realmente.

—En nada importante —sonreí—. Oye, aún no te devuelvo tu polerón

—Es cierto —se pasó la mano por la nuca—. Pero hoy puedes ir hasta mi casa, y devolvérmelo —soltó una corta risa nerviosa—. ¿Quieres ir después de clases?

Dominik venía por el pasillo. Me miró de mala forma, y se acercó a propósito donde se encontraba Danielle y otros chicos más.

—Si, claro que voy —respondí aun mirando a Dominik

—Genial, entonces te esperaré en la salida —acarició mi mejilla—. Te ves tan tierna

Eso había sido extraño.

—Damian...¿Hoy podrías ayudarme con el dibujo del que te hablé? —cambié de tema, para evitar la incomodidad

—Claro, tú me dices que quieres dibujar —esbozó una pequeña sonrisa. Sonó el timbre—. Nos vemos, dulce —se alejó

—¿Dulce? —murmuré a mí misma

No sé porque se empeñaba en creer que yo era tierna, dulce y esas cosas. Era todo lo contrario.

En el salón de clases, como ya hace varios días, me sentaba sola. Dominik se las arreglaba para ganarse en otro lugar, entonces...pues yo quedaba allí sin compañía en veces, o Janine se sentaba a mi lado. Esta vez llegué, y Janine iba en dirección a mi lado, pero Dominik la detuvo.

—Janine, hoy me quedaré aquí —habló y se sentó

—Como digas... —Janine me miró abriendo mucho los ojos, y se fue a su puesto

No tardó mucho en empezar con sus estupideces.

—Hola, Nika —dijo serio

—Para ti, Monika —dije en su mismo tono y sin mirarlo

Ahora yo también estaba molesta. Que estuviera hablando con la persona que me caía mal, y que peor, me miraba y se riera cuando lo hacía, me había hecho sentir basura.

—Bien ''Monika'' —remarcó lo último—. ¿Vas bien con tu novio?

—¿Qué novio ni que mierdas? Yo no tengo novio —respondí sin mirarlo

—¿Ah no? —respondió arrogante—. Todos andan diciendo que estas con ese tal Damian

—Pues no, y tú ¿Cómo vas con tu novia? Te he visto conversar bastante con esa pe... —tosí—. lo siento, digo Danielle.

—Todo va bien —respondió seco

¿Todo va bien? ¿Lo está confirmando? ¡Me viene a restregar que está con esa estúpida!

—¿Enserio? ¡Pues me alegro, que sean felices y ojala que ambos estén realmente enamorados! —le grité casi

—¡Bien! ¡Qué así sea! ¡Y espero que tú y Damian también lo sean! —respondió de igual manera

Te odio y te amo |Dominik Santorski ☢RESUBIENDODonde viven las historias. Descúbrelo ahora