Mariposas en el Violín

LV

*POV SETSUNA*

Tosí ante el impacto del liquido en la cara, y me aparte el agua de los ojos para mirar a la culpable.

-To...- No me dio tiempo a decirle nada mas cuando me volvió a tirar agua a la cara. Iva a hacerlo de nuevo, pero esta vez pude agarrarle la muñeca antes de que volviese a repetir. -Si vuelves a tirarme agua te ahogare en el váter.- Le advertí.

-¡Vuelves a ser tu!- Me abrazo fuertemente oprimiéndome la costilla, por lo que tuve que darles varios golpecitos para que me soltara. -Lo siento.- Se disculpo.

-Ayúdame a levantarme.- Le pedí reincorporándome en la cama.

-¿A donde vas?- Me pregunto Chie que seguía ahí.

-A secarme la cara con las toallas del baño.- Le respondí mientras Towa me ayudaba a ponerme de pie y ella me preparaba el porta sueros. 

Incluso caminar costaba y dolía. 

Mis baúles personalizados estaban por toda la habitación. De seguro que Mama le había pedido a Jaken que me los trajese, aunque... Había un baúl que no reconocía, se veía bastante mas lujoso a pesar de que los míos eran diseñador.

Gracias a Towa que me ayudaba a caminar, pude llegar hacia el baño donde una toalla con mi inicial y el emblema familiar. 

Me frote fuerte la cara para despertarme del todo, y en cuanto mire hacia el espejo pude ver el aspecto que tenia.

-Setsuna ¿Te encuentras bien?- Me pregunto cuando le agarre fuerte del brazo para no caerme.

-Towa... ¿Hisui me a visto así...? ¿A visto eso?- Inquirí con rabia por el aspecto que tenia. 

Entonces había vuelto a pasar...

Había vuelto a ser un monstruo...

*POV HISUI*

Volví dándole esquinazo a ese pesado del enano verde, a pesar de que el lo había pagado todo ya que no teníamos tiempo que perder buscando al tío Kohaku.

Entre en la habitación viendo como Towa y la enfermera le ayudaban a volver a su cama. 

-Ya estoy aquí.- Anuncie poniéndole el inmenso carrito de catering a uno de sus costados. Ella me giro la cara decaídamente. Le pasaba alguna cosa. -¿Que pasa? ¿Te sientes mal? ¿Quieres algo mas?- Pregunte.

-Estoy bien.- No lo estaba. Hablaba sin mirarme y a penas se movía.

-Tengo que salir un momento a hacer unas llamada.- Hablo repentinamente Towa pegándole unos codazos a Chie en las costillas.

-Si y yo tengo que ir a avisar al doctor de que ya has despertado. Cualquier cosa, solo pulsa el botón que hay en la cabecera de la cama y vendré enseguida.- Manifestó marchándose ella también de la habitación.

Les agradecía que nos hubiesen dejado a solas.

-E traído de todo un poco, aunque el cocinero me a recomendado que comieses un poco de sopa si acababas de despertar.- Dije quitando la tapa del plato.

-Comeré mas tarde.- Fue lo único que dijo, y lo dijo casi comí si de un susurro se tratase.

-Setsuna, estoy aquí para ti. Sabes que puedes contarme lo que te este inquietando.- Ofrecí percatándome de que ponía sus manos encima de sus antebrazos. Tenia frio.

-...-Miro hacia abajo apartando aun mas su mirada de mi, y movió un poco mas sus manos en sus antebrazos. 

No tenia frio... Se estaba tapando las marcas de sus brazos.

-Bueno... Sobre la cita. ¿Quieres hacer algo en especial?- Pregunte cambiando de tema para no incomodarla.

-¿Aun quieres hacer esa cita?- Cuestionó con desanimo.

-Perdí una apuesta. E de cumplirla.- Dije sarcástico.

-Olvídate de eso. No te obligare a ir.- Contesto decaimiento.

-Si haces eso, me harás admitir que me muero por tener una cita contigo.- Respondí con un suspiro sentándome en e borde de la cama donde ella estaba semi tumbada.

-¿Por que querrías tener una cita con...?- Su voz aun no estaba quebrada pero tenia un sentimiento a flor de piel.

-¿Con?- Inquirí.

-Con un monstruo.- Susurro, escondiendo su rostro al completo de mi, y apretando fuertemente sus antebrazos.

Le tome la cara y sin darle previó aviso me apodere de sus labios, aprisionándolos en un suave y  tierno beso lento. Al separarme vi como me miraba con sus ojos llenos de sorpresas.

-Perdóname. Es que no me gusta que se metan con las cosas que quiero.- Sus ojos repletos de sorpresa se abrieron aun mas haciendo que me perdiera en un mar de color purpura. -Ahora... Setsuna, te e echo una pregunta.- Comencé a decir con delicadeza en mi voz sin quitar mi mano de su mentón y apoyando mi frente con la suya. -¿Quieres hacer algo en especial?- Volví a preguntarle con dulzura.

-Yo... Nunca e ido... a una sala de cine.- Lo dijo pausada y con un gran sonrojo en sus mejillas.

-Entendido.- Declare teniendo ya mas o menos, una idea en mente de como hacerlo. Suerte que Moroha tenia el objeto que necesitaba. -Te hare ver que no eres un monstruo.- Pronuncie besándole la hermosa luna que ahora portaba en su frente.

*POV SETSUNA*

Vi como se disponía a salir mientras Towa volvía a entrar mirando el celular.

Me toque la frente justo donde el me había besado por ultima vez, dándome cuenta que era el mismo lugar donde estaba la luna.

Hisui... Si tu me harías ver que realmente no soy un monstruo... yo te haría ver todo lo que sentía por ti.

-¡Towa!- Grite sin elevar mucho la voz cerciorándome de que ya se había ido. -Necesito que vayas a por algo urgente. Cuanto antes lo traigas mejor.- Hable asustándola con mi repentino ímpetu.

Una vez que le dije lo que era me suplico varias veces, pero al insistirle comprendió que realmente no tenia mas remedio.

Hisui... te demostrare mi amor.