Desperté por la alarma, me levanté, Jodie ya no se encontraba a mí lado, bufé mientras caminaba al baño, preparé la ducha y la ropa que iba a ponerme, hoy iría a sacar los pasajes para viajar a Noruega, llamé a mi madre para darle la noticia y se emocionó mucho. No veía la hora de poder volver a ver a Miranda. Conduje hasta el aeropuerto y saqué los pasajes, mañana en la mañana partía, le avisé a Mangel que se lleve a Jodie con él para que la cuide en mi ausencia
- ¿Ehtá seguro Rubiuh? - Preguntó Mahe, metiendo a la gata en la jaula.
- Que sí tío, te llamaré si la encuentro, por favor cuidala bien – Me referí a Jodie.
- Claro que si' hombre, me llamah cuando llegueh – Me abrazó fuerte, le correspondí y luego nos soltamos.
- Quedate tranquilo que solo son dos semanas muhé – Lo cargué y rió, nos quedamos callados.
- La iráh a buscah? - Dijo serio esperando una respuesta coherente, me quedé pensativo.
- Creo... creo que sí, ¿Tú qué dices? - Pregunté, frotando mi frente.
- Yo digoh que sí macho, si lah quiereh veh, veh poh tu sueño jodéh! - Bromeó a lo último y reímos.
- Entonces eso haré - Dije decidido - ¡Miranda allí voy!
...
Me encontraba ya sentado en el avión, grabando algunas cosas para mis criaturitas, estaba algo ansioso y nervioso, quizás si lograba ver a Miranda no me recibiría muy bien, puede que me odie por lo que sucedió.
"Favor de abrocharse el cinturón, estamos a punto de aterrizar"
Escuché y así lo hice, en menos de 10 minutos ya estaba bajando del avión con mis maletas, salí por el aeropuerto, pedí un taxi y me encaminé a mi casa, me fijé el móvil y tenía algunos whatsapp, los ignoré por el momento, solo le mandé uno a mi madre diciendo que ya había llegado y que estaba camino a casa. Una vez ya instalado con mi familia, salimos a dar un paseo, hacia bastante frío y nevaba.*Ls conversaciones con los familiares son en Noruego*
- Abuelo, ¿Sábes si alguien se ha mudado aquí? - Pregunté, quizás sabía si ese alguien era Miranda.
- Por lo que oí, una pareja se mudó a no muy lejos de aquí, en la siguiente calle ¿Por qué preguntas? - Me contestó luego de una pregunta, traté de excusarme.
- No, solo era una duda, ya sabes, vecinos nuevos ¿Tú los viste? - Volví a preguntar, este me miró.
- A mí no me engañas, tu estás investigando algo, o buscando, no sueles preguntar por la gente de aquí - Dijo y me quedé de piedra, no sabía que decir.
- Eh... sí, no sé qué me pasa, joder - Reí algo nervioso, justo mi madre le habló y se fue hacia atrás, me he salvado.
Caminamos un rato más, hasta que comenzó a hacerse de noche, decidimos volver a casa, mientras caminaba recordaba lo que me había dicho mi abuelo "Una pareja se mudó a no muy lejos de aquí, en la siguiente calle", aquellas palabras resonaban una y otra vez en mi mente, ¿Sería Miranda? "Una pareja" significaba que estaba con alguien, un gran estorbo, al menos para mí. Llegamos a la casa y me fui a mi habitación, me tiré en la cama, de tanto frío mis ojos estaban algo sensibles que se cerraban solos, tanto que logré dormirme.
- ¡Rubén! - Escuché desde abajo, me desperté - ¡La cena está lista! ¡Baja!
- ¡Ya voy! - Grité restregando mis ojos, con algo de cansancio me levanté de la cama y bajé.
- Hasta que al fin despiertas macho - Rió mi madre, el padrino la siguió y se sentaron en la mesa.
- Dejadme, aún tengo sueño - Bufé, tapé mi boca al bostezar, comencé a comer.
- Alguien está enojado, se peleó con la noviesita - Dijo riendo mi abuelo, mi madre lo miró.
- ¿Novia? Mi hijo tiene novia, qué milagro - Bromeó, todos rieron, yo solo sonreí de lado, no estaba de muchos ánimos.
- No, no es cierto, todavía soy libre como Dobby - Dije con un tono algo extraño y gracioso, pero mi madre no se rió.
- ¿Qué hay de Miranda? - Soltó de repente, haciendo que casi me atragante con la bebida.
- Ella se fue de viaje con su familia - Murmuré, mirando mi comida, ellos todavía no sabían lo de Raspberry.
- ¿Su familia, eh? Qué raro, porque su "Familia" hace dos horas regresaron del hospital, y no con buenas noticias como para irse de viaje - Dijo desafiandome, la miré, esta se dio cuenta de que mentía.
- Quizás sucedió algo allí, tuvieron que ir de urgencias - Divagué, ya no sabía qué decir, me miró seria.
- La hermana de Miranda murió hoy a la madrugada - Dijo y todos se quedaron en silencio, solo se escuchaban los breves sonidos de los cubiertos chocando contra los platos, no podía creer lo que decía.
- ¿Cómo que murió? Y-Yo no sabía nada... - Susurré lo último, eso no me lo esperaba, Miranda nunca me había dicho que tenía una hermana.
- Tuvo un accidente en automóvil, mientras conducía hacia aquí, la estuvieron buscando ya que no aparecía, hicieron la denuncia, la policía cuando la encontró, llamaron a la casa de ellos diciendo que tenían que venir a reconocer el cuerpo para saber si era ella, y así fue, la llevaron a la morgue - Tomó de su bebida - Por eso me llamó su madre.
- ¿Qué hay de Miranda? ¿Lo sabe? - Desde cuando mi mamá se refería a la madre de Miranda como "su madre", siempre solía llamarla por su apodo.
- Sí, por eso sabemos que se fue de Madrid, hacia su país para ver a su familia, pero luego volvió a viajar a otro lado, no sé donde, pero con su novio - Terminó su comida - Y ya sabemos lo que pasó con tu gata.
- No quise decir nada sobre eso... lo siento - Dije cabízbaja, ella se acercó a mí, acariciando mi espalda.
- Lo siento mucho hijo, ella ya está en un lugar mejor, tenlo por seguro - Dijo y besó mi frente, yo dejé escapar una lágrima, sonriendo a medias.
...

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Conviviendo con una Argentina [Fanfic-Rubius] REEDITANDO
RomanceMiranda López, una Argentina de 21 años, es enviada a Madrid a convivir con el hijo de la mejor amiga de su madre, Rubén. Al no conocerse ninguno de los dos, se mantienen distanciados en el mismo departamento, cada uno por su lado, al principio se l...