Conviviendo con una Argentina [Fanfic-Rubius] REEDITANDO

Reencuentro

...

A la semana siguiente...

Salí a caminar un rato, estaba agobiado en esa casa, ya había dejado de nevar así que, que mejor caminar por las blancas calles de Noruega. Arreglé mi campera, me acordé de que supuestamente "Miranda" se encontraba en la siguiente calle, así que me encaminé hacia allí; Los pajaron cantaban en los árboles nevados, estaba revisando mi móvil, unas cuantas menciones en twitter, luego las vería. Algo me llamó la atención, una chica de pelo rojizo y ojos azules muy familiares.

- Hola, te puedo... ¿Rubén? - Preguntó esta al darse cuenta de quién era yo, la miré con el ceño fruncido.

- ¿Miranda? - Pregunté yo esta vez, joder, era ella, que linda se veía con ese color de cabello, resaltaba sus azulados ojos, sí, lo sé, nunca mencioné el color de aquellos.

- ¿Q-Qué haces acá? - Se trabó al decir - Pregunta estúpida la mía - Suspiró.

- Vine con mi familia, necesitaba algo de... aire, ya sabes - Dije corriendo la mirada de sus ojos al horizonte - ¿Y tú? - Ella hizo una mueca breve.

- Vine acá a vivir, después de lo que pasó con... Raspberry - Susurró lo último, la miré pero desvió su vista al piso. Asentí lentamente - Lo siento...

- Tú no tuviste la culpa, no sabías que eso iba a pasar, si tuvo que ser fue por algo, ya está en un lugar mejor - Dije sonriendo de lado, ella asintió algo triste.

- Sé que te saqué lo más valioso que tenías, espero que vos estes mejor - Entrecerró sus ojos por el reflejo del sol en la nieve que chocaban contra ellos, mirandome.

- Lo estoy, aquí con mi familia me despeja de todo - Sonreí breve, imitó mi acto, vio el dije que me regaló Sandra.

- Qué lindo, ¿Quién te lo regaló? - Me preguntó observandolo, mientras con sus dedos lo acercaba a ella, luego me miró.

- Sandra, he olvidado quitarmelo la última vez - Terminé de decir, ella alzó una ceja sin entender.

- ¿Última vez? - Dijo dudosa, yo asentí quitandomelo, lo dejé en la palma de mi mano.

- Sí, ella se fue de intercambio a Argentina, por sus estudios - Ella rió arqueando sus cejas, con la vista en el suelo - Terminamos porque para mí, las relaciones a larga distancia no sirven 

- Tenés razón, pero bueno, todo llega a su fin, nada es para siempre - Dijo aquellas palabras, metiendo sus manos en los bolsillos de su campera.

- Si... ¿Qué es de tu vida? - Pregunté sin más, ella miró para atrás y volvió la vista a mí.

- Me mudé acá con mi actual pareja que es de Barcelona, nuestra casa queda a unas pocas cuadras de acá - Dijo asintiendo, desviando su vista a donde sabe quién.

- Awesome! - Reí, esta sonrió - ¿Cómo se llama? - Me referí a su pareja.

- Jim, Jim Henderson - Contestó, asentí esta vez yo, metí mis manos en los bolsillos de mi campera.

- Bonito nombre y apellido - Fingí un tono de voz de típico jefe de oficina - Me huele a salseo - Puse una mirada perver y ella rió negando con la cabeza.

- Sí, me gusta... Aparte de que es una gran persona, es... ella es muy especial - Soltó, la miré confundido, no se percató de aquello.

- Disculpa, dijiste ¿Ella? - Alcé mi ceja, acerqué mi oreja como si no escuchara.

- Sí, Jim es mujer, es mi novia, mi pareja - Dijo mirandome, sin expresión en su rostro, WTF CON TODO ESTO, esto es demasiado salseo para mi body.

- Oh... Perdón si te puse en un mal momento - Dije disculpandome, ella negó con la cabeza, acomodando el gorro felpudo que traía.

- Obvio que no - Sonrió, nos quedamos callados, mirando la nada, era un silencio incómodo, bastante, se podía cortar con tan solo respirarlo. Nos miramos, sin más nos acercamos y nos dimos un beso, vale vale, una hostia de puta madre, ya que nos chocamos las narices por desesperados, nos separamos tocandonos la zona herida.

- Joder, joder! Esto si que duele, hostia puta! - Dije inclinandome tocandome la naríz, ella reía con la mano en su cara.

- Sos un boludo - Me dijo riendose, me volví a acercar a ella otra vez pero esta vez si fue un lindo beso, lento y sin apuro.

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