Capítulo 15. Sangre de mi sangre

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Nuevo capítulo, espero que lo disfruten.

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El viaje terminó al llegar a una caverna subterránea, el equipo es atado a unas estalagmitas por los hombres que los trajeron, que después se alejan hacia un altar de piedra mientras el que parece el líder por su armadura y capa, se dirige a la multitud que contempla a los cautivos.

-No se preocupen, los voy a sacar de aquí- dice Kara incorporándose sobre sus rodillas, concentrada regula su respiración y de un tirón rompe sus ataduras, aunque mantiene sus manos atrás para disimular-. Muy bien cuando saque mi revolver voy a amenazar al líder, espero que todos ustedes corran como malditos desgraciados sin mirar atrás hasta la salida ¿Entendieron?

El grupo asiente, pero el líder comienza a hablar en Kryptonés.

-¿Qué dice?- pregunta Imra.

-Algo de luces que cayeron, cielos despejados y fuego sobre el mar- contesta Kara.

-En realidad dijo que vieron luces bajar de las estrellas, luego los cielos se aclararon y que desde entonces han visto que la costa se ilumina cada noche- confirma J'oon-. No saben nuestras intenciones, pero esperan averiguarlas. Estabas en lo correcto, pero están usando una variante del kryptonés del periodo Pre-Oscuridad.

Kara alcanza su cuchillo en su bota y corta las cuerdas de sus amigos, antes de que los custodios reaccionen la rubia llega al líder apuntándole con su revolver directo a la cabeza, sin embargo, los espectadores comienzan a gritar.

-¡Kryptonian! ¡Kryptonian!- la palabra hace eco en la caverna, mientras uno a uno se empiezan a arrodillar.

-¿Qué sucede?- pregunta a Zor-El.

El líder vuelve a hablar con éxtasis haciendo gestos muy marcados con sus manos y la ex militar muy apenas le entiende, infiere algunas palabras pero su dialecto es extraño.

-Bythgar.

-¿Reina?- réplica confundida.

-Dice que en los tiempos oscuros los últimos kryptonianos viajaron al mar para salvarse, la resistencia militar cayó aquí, mientras la familias más importantes lograron cruzar el río- traduce Lena-. Creo que por tu estatura y fuerza dedujeron que eras uno de ellos. Por todos los cielos ¿Estás anotando esto J'oon?

El profesor asiente eufórico tratando de registrar cuánto puede en su diario que mantenía en su bolsillo.

-Kara, creo que piensa que eres alguien importante por descender de esas familias- dice la joven científica, la rubia baja el arma guardándola en la parte trasera de sus pantalones, a lo que el líder se acerca posando su mano en su hombro mientras sigue hablando su lengua con prisa-. Quiere saber cuál es tu casa- explica acercándose a ellos.

-Ah pues vivo en el barrio del puerto, sección tres- divaga la rubia mientras trata de recordar cómo decir todo eso en su lengua materna.

-¡No!- interrumpe Lena enojada-. Los Kryptonianos se organizan por casas familiares, dile tu nombre.

-Ah, Kara Zor-El- se presenta, estirando la mano a lo que el líder retrocede, él se lleva la mano al pecho, gesto que la rubia imita.

-Dru-Zod- dice el hombre bajando lentamente la cabeza.

-Es un saludo formal- advierte Lena por lo que Kara también baja la cabeza, después el hombre se pone frente a ella y la toma de la mano, levantándola en alto.

-¡El!- repite el líder la palabra con autoridad, el pueblo se sorprende y surgen pequeños cuchicheos mientras todos la miran maravillados, el hombre sigue hablando contento.

La expedición a KryptonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora